En un mundo Post-Apocalíptico, plagado de criaturas, lleno de peligros; donde ya no existe la paz y en donde la humanidad ya esta casi extinta. Luchando unos contra otros para sobrevivir, grupos enteros de personas buscando la manera de salvar a su...
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—Ahhrg... ¿Dónde estoy?—
Se preguntaba mientras abría sus ojos, su cara y todo su cuerpo estaba cubierto de polvo y escombros, el joven de cabello negro se levantaba, sacudió su cabello con su mano derecha para quitarse el polvo de encima, voltea a ver su alrededor, desconcertado piensa —¿Qué paso?—. Estaba con dolor en sus huesos, revisa las extremidades de su cuerpo por si tiene alguna lesión. —Estoy bien, tengo dolor, pero no tengo ningún hueso quebrado— .
Se quitaba los pedazos de escombro del cuerpo mientras se terminaba de levantar; Con mucho esfuerzo se levantó, estaba de pie y empezó a caminar, miraba a su alrededor y claramente podía observar la destrucción y el lugar en el que se encontraba.. La mayoría de los edificios caídos y destrozados, algunos en pie, completamente abandonados y casi destruidos, las calles cubiertas de arena, grandes huecos en partes de la ciudad, autos abandonados y muchos destruidos, era el perfecto panorama post-apocaliptico.
Empezó a caminar un poco mientras seguía asombrado con el paisaje. Un extraño ruido se escuchó, el piso empezó a temblar! —¿Qué es eso?—. Se preguntaba el joven, volteó a ver al cielo y se sorprendió con lo que vio, tanto que fue a esconderse detrás de un vehículo, una camioneta ultimo modelo, al parecer alguien había gastado mucho dinero en ella, lastima que lo que esta pasando no lo dejó disfrutar!; Por el cielo, lo que pasaba era una nave, al parecer una nave vigilante, si una de esas te atrapa seguro seras comida de alíen, o eso es lo que se creía, nadie lo sabía con certeza. Cuando la nave se alejó, el joven entró a la camioneta.
El joven de cabello negro trató de encender la camioneta y conducir hacia algún lugar, pero sentado en el lugar del conductor y frente al volante se puso a analizar un poco.
Se preguntaba que estaba pasando, que le había sucedido al mundo, porque estaba el allí...
Trataba de recordar pero no podía hacerlo, su mente estaba en blanco, ni siquiera recordaba cual era su nombre, miró hacia su ropa y estaba usando una sudadera color celeste, pantalones color negro, miró su cara en el retrovisor del auto, su cabello liso color negro que le cubría la frente, su piel color blanco pálido, sus ojos color marrón claro, estaba pasando por el peor momento, porque ni siquiera recordaba su cara y cuando se vio al espejo, fue como si mirara esa cara por primera vez en su vida.
Trató de ignorarlo por el momento, empezó a buscar las llaves, en la guantera se encontraban, casualmente.
Encendió la camioneta...
—¿Podré manejar?— Se preguntaba, pero al parecer si tenía conocimiento sobre eso, empezó a recordar como manejar de alguna manera.
Se puso en marcha, sin rumbo, solo a dar vueltas para ver si encontraba señales de vida o por lo menos darse cuenta de que estaba pasando; Su mente era un torbellino, muchas cosas pasaban por su cabeza, dudas y sobre todo preguntas, ya que cada vez que avanzaba, mas destrucción podía observar.
