Las Raras

Capítulo 4

-Lo siento, lo hice hacer por tu bien, no quería que supieran de una manera extraña, sé que eso debías decírselo tú, pero tu no les ibas a decir nunca.- hablé rápidamente.

Blake se quedó en silencio, miraba un punto fijo, ya me estaba asustando, ni siquiera pestañeaba, así que decidí dejarla, iba saliendo de la habitación, pero Blake me interrumpió.

-Gracias.- dijo mirándo me fijamente.

-¿Porqué?

-Por aclarar las cosas, yo nunca les iba a decir.

Asentí y le dije:

-Vuelvo más tarde, con las chicas.

Salí del hospital con miles de cosas en la cabeza, necesitaba descansar.

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Llegué a casa y dormí como un cerdo, en verdad estaba agotada.

-Emily, despierta.- era la voz de Cloe.

-¿Que pasó?.- dije tallándome los ojos.

-¿Como sigue Blake?.- dijo la pelirroja.

-Esta bien, ya le dije que ustedes saben lo de...- dije haciendo un gesto raro.

-¿Que opina?- pregunta Cloe.

-Se lo ha tomado bastante bien, más tarde podríamos ir a visitarla.- dije aún aturdida por el sueño.

-Está bien, aclararémos todo, ahora duerme.

No dudé y me quedé dormida al instante, me desperté como a las 4:30 pm.

Me bañe, peiné y arreglé, decidí bajar para decirles a las chicas que vayamos a ver a Blake, pero escuché algo que hizo que me quedara escondida tras los barrotes de las escaleras, escuchando una conversación entre Cloe y Andrea.

-No podemos decirle a Emily, tu sabes que no reacciona bien.- decía Andrea.

-Lo sé y Bruno también sabe, por eso debemos mantenerlo en secreto si queremos que funcione.- agregó Cloe.

¿Bruno?, ¿Que tiene que ver Bruno?, nunca hablábamos de él era alguien insignificante, pero decidí bajar de todas maneras.

-Hola chicas, ¿listas para ir ver a Blake?- dije con el tono más alegre del mundo.

Pegaron un salto cuando hablé y me miraron miedosas.

-Ssi...claro...vamos.- dijo Andrea, un poco nerviosa, mirando a Cloe.

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"(1 hora después)"

-Por eso no quería decirles.- dice Blake llorando, la verdad es que todas llorábamos.

-Nunca te íbamos a juzgar por eso, querida.- dice Cloe sonándose los mocos.

-Además eres nuestra amiga, siempre estaremos ahí para apoyarte.- dice Andrea.

-Gracias, las amo.- acto seguido nos dimos un abrazo grupal y juramos que nunca más nadie le guarda un secreto a la otra.

Pueden pensar que somos muy "cursis", pero así es como nos comportamos por eso somos raras.