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Capítulo narrado ♡:

Me había despertado 15 minutos antes de que el reloj sonara. Me fui a la ducha, abrí el grifo y me introduje.
El agua refrescaba mi piel, haciéndome temblar.
Tallé mi cuerpo, lavando cada centímetro de el.
Una vez terminé, me vestí con unos jeans ajustados negros, una remera del mismo color pero con una calavera en llamas y mis Vans.
Me puse colonia, agarré mis lentes de sol y bajé las escaleras. Tomé una manzana y me subí al auto. Encendí el estéreo, y puse que sonara algo de KDrew.
Movía mis dedos al ritmo de la electrónica. Hoy conseguiría tu atención, y que manera de la mejor forma.
Cuando llegué, aparqué en los lugares reservados, donde había que pagar. Obviamente no lo hacía, nunca prohibían el paso allí. Por lo que aprovechaba.
Entré al instituto, cambiando mi postura totalmente, saqué pecho, subí el mentón, caminé con toda la tranquilidad del mundo. Mi mochila estaba colgada en el hombro izquierdo, y mis manos estaban en los bolsillos delanteros.
Te vi y sonreí. Nadie podía ver mis ojos ya que estaban cubiertos por los lentes. Todos me miraban y tu no eras la excepción.
Caminé hacia ti. Lo notaste, ya que comenzaste a retroceder. Hasta que chocaste "accidentalmente" a Zayn. Me faltaban 3 metros, en ese tiempo, me quité los lentes. Me mirabas fijo, tu cuerpo emanaba nervios.
Me relamí los labios, también lo captaste, ya que bajaste por unos segundos la vista.
Tiré de mis comisuras hacia arriba, sacando las manos de los bolsillos. Mientras seguía caminando, me saqué la mochila del hombro, la tiré hacia donde estaba Zayn. Quien la atrapó y me guiñó el ojo. Tenía que agradecerle luego. Una vez llegué al frente tuyo, no te di tiempo a responder.
Te agarré de las caderas, subiendo tu cuerpo encima mío. Por inercia, hice que rodearas mi cintura con tus piernas. Tus manos estaban en mi pecho, y me mirabas sorprendido. Caminé, ahora más rápido, hasta el espacio donde el conserje guardaba todas sus cosas y cerré la puerta. En el trayecto, no dejabas de mirarme, y yo tampoco.
Una vez nos sumergimos en ese cubículo, prendí la luz. Aún arriba mío, puse tu espalda contra la puerta. Tanteando, encontré el seguro, y trabé la puerta.
Estábamos en la misma altura. Podía contemplar tus ojeras con mayor precisión. Estaba examinandote, por lo que notaba, hacías lo mismo.
Tus labios habían perdido color, tenía ganas de besarlos, así volvían a ser de ese color sandía peculiar. Tu nariz firme y recta era fantástica.
Tus mejillas estaban coloradas por el calor de la habitación.
Examiné que tenías puesto unos jeans también negros y una remera blanca con un arcoíris. Tenías unas botas marrones. Te miré a los ojos, el esmeralda que antes había notado apagado, ahora estaba brillante, lleno de vida. Esperé ser el causante de eso.
Nos miramos fijo unos segundos. Abriste la boca, pero rápidamente te callé, besándote.
Cerré los ojos, hice presión entre tu cuerpo y la puerta. Mis manos se dirigieron a tus caderas y las dejé allí. Tus manos se posicionaron en mis mejillas, y me pegaste más a ti.
Apreté los ojos con fuerza, deseando que este momento no fuese otro de mis sueños. Respiré, aún pegado a ti, y mis fosas nasales se llenaron de tu delicioso aroma. Podía oler a rosas, especias y jabón. Me estaba drogando.
Decidí comenzar a mover los labios. Eran movimientos suaves y llenos de sentimientos.
Me alegré muchísimo al sentir que tú también los estabas moviendo. Estaba feliz de estar siendo correspondido.
Estoy feliz de estar siendo correspondido.
Abrí levemente mi boca, dejando que mi escurridiza lengua llegara a la entrada de tu boca. La introduje, y te sorprendiste cuando nuestras lenguas se rozaron. Comenzamos a hacer una danza tranquila. Movíamos nuestros labios adecuadamente.
Creo que nuestros cuerpos no estaban de acuerdo, ya que pidieron más. Ahora los movimientos de nuestros labios eran erráticos. Mis manos se metieron por debajo de tu camiseta y tocaron la tersa y lechosa piel. Te estremeciste ante el contacto. Sonreí entre el beso.
Tus manos se enredaron en mi cabello, acariciandolo.
Por primera vez, nos separamos, tomando aire. Respiramos hondo, estábamos agitados, nuestros pechos subían y bajaban.
La excitación que pudo haber estado, había desaparecido. Nos mirábamos como si fuésemos la razón de nuestra existencia. Yo te miraba como si fueses lo más valioso de mi vida, porque lo eras. Me acerqué y te di un casto beso en los labios. Con mis manos, estaba haciendo círculos imaginarios en tu delicada piel. Se sentía tan bien tocarla.
Me separé del corto beso, y vi que estabas sonriendo. Esa hermosa sonrisa había regresado. Tus hoyuelos se marcaban más que nunca, y creí desfallecer al notar que yo había causado eso.
Pegué mi frente con la tuya, y besé tu nariz.
-Por favor dime que esto no es un sueño- dijiste.
Sonreí. Tu voz había salido ronca, grave. Tu voz era mágica, tranquila, gruesa, potente y masculina.
-No es un sueño- aseguré.
Comencé a repartir besos por todo tu rostro, frente, sienes, párpados, nariz, mejillas, mentón y finalmente tus labios. Estos, ahora estaban nuevamente con su color natural.
-Tus labios son mi nueva droga- dije.
Te reíste.
Eso fue música para mis oídos. Tu risa debe ser el sonido más maravilloso sobre la tierra. Aquella manifestación merece un premio.
-Harry...
-Lou.
-Te quiero.
Sonreíste. Y vi como tus ojos se empezaron a aguar.
-Y-Yo también t-te quiero.
Una vez dicho eso, me abrazaste, escondiendo tu rostro en la curvatura de mi hombro y cuello.
Tu aliento era caliente y se me erizaba la piel ante aquel contacto. Estuvimos unos minutos así.
Hice que me miraras.
-Harry Styles, ¿podrías perdonar a este imbécil y hacerle el honor de ser su novio?
Te quedaste callado, observándome. Lentamente fue creciendo en tu cara una sonrisa sincera. Recién ahí pude soltar el aire que no sabía que estaba conteniendo.
Repartiste abundantes besos por mi rostro, al terminar de besar mis labios, tus palabras salieron, haciendo que este día, merezca un título. Definitivamente quería congelar el momento para estar así toda la vida.
-Claro que sí.
Y este día aún sigue siendo mi favorito.
Repetiría esto todos los días, por ti.

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Todos los capítulos son narrados. Pero... ya saben... ustedes me entendieron (o eso espero xD)
Espero les haya gustado≧﹏≦ = ̄ω ̄=

Por ti. |L.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora