20 DE FEBRERO

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"Dios os bendiga, amigos míos, y os dé todos los días felices que a mí me niega. Alberto te agradezco que me hayas engañado. Aguardaba la noticia del día de vuestra boda, porque ese día tenía resuelto descolgar solemnemente de la pared el retrato de Carlota, y enterrarlo entre mis papeles. ¡Ya estáis casados y todavía tengo aquí su retrato! Aquí permanecerá. ¿Por qué no? Sé que también estoy con vosotros: sé que, sin perjuicio tuyo, tengo un lugar en el corazón de Carlota. Sí; ocupo en él el segundo puesto, y quiero y debo conservarlo. ¡Oh ! Me volvería loco si ella pudiese olvidar... Alberto, dentro de esta idea se encierra el infierno, adiós. Adiós, Carlota; adiós ángel del cielo."

(6) Por consideración a tan respetables personas, no incluimos en el relato esta carta y otra de que se habla más adelante. El más profundo reconocimiento del público no excusaría, en nuestra opinión, la audacia de publicarlas. (Nota del autor.)

Werther - GoetheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora