Si bien su apartamento no era muy lujoso, tenía todas las comodidades básicas que ella necesitaba, en verdad pensaba que no necesitaba tantas cosas, estando rodeada de lujos desde pequeña quería salirse un poco de esas extremas comodidades y sentirse más normal, similar al resto, aunque sea un poco en apariencia, igual lo tenía todo pero sin querer aparentar de más.
Recibía pocas visitas, en su mayoría eran compañeros de clase que encontraban en la casa de Joey la tranquilidad necesaria para estudiar fuera del bullicio del campus universitario y sentirse con la libertad de soltar una que otra risa o comentario en voz alta que no podrían hacer en la biblioteca.
Joey tampoco era de salir tan frecuentemente, en ocasiones pensaba que tanto quería sentirse libre y lejos del agobio de sus padres para poder hacer todo lo que no pudo hacer por años que no se percató que más allá de esos deseos ella seguía siendo una chica tranquila y reservada con intereses sencillos y que en realidad las constantes salidas no lo consideraba como algo tan necesario.
Pero el constante stress de las clases, el tener que mantener un nivel elevado en sus calificaciones y el lejano pero al igual constante y minucioso monitoreo de sus padres hacían que buscara drenar todos sus sentimientos reprimidos de alguna forma y la noche siempre la encontraba con alguna fiesta o algún bar lleno de jóvenes así que cuando tenía la oportunidad esas salidas eran intensas pudiendo durar hasta días enteros sin llegar a su casa.
A veces se sentía como un fantasma ya que podía entrar y salir de su apartamento prácticamente sin ser notada por alguien, nunca encontraba a nadie que al verla volver en la mañana con el maquillaje corrido, la ropa desaliñada y tambaleándose por el alcohol en su sangre le dirigiera alguna mirada maliciosa o de descontento por cualquier cosa que se imagine al verla en ese estado.
Por lo general su piso era muy tranquilo, conocía alguno de sus vecinos solo de vista, no se relacionaba mucho con las personas del lugar, se interesaba en pagar al día y en no molestar.
Se acercaba la primera temporada de exámenes, y Joey empezaba a prepararse para ellos, el esfuerzo debía ser mayor, ya que era su último año y de esto dependía su graduación que tanto deseaba pero a la vez quería poder evitar.
A la vuelta de unos meses estaría de nuevo en su casa junto a sus padres aceptando algún otro plan que tuvieran para su vida, sin ella poder o querer escaparse, así que ya empezaba a sentir la presión por todos lados y solo quería tratar de mantenerse lo más concentrada posible para poder entender todo perfectamente.
Era la tarde del domingo y Joey se disponía a estudiar un poco más para así corregir algunas cosas para su examen del lunes a primera hora, tomó sus libros y se sentó en el piso de la sala, apoyándose en la mesita de los muebles, vestida con una camisa y pantalón holgados, un moño en su cabello y sus lentes se sentía cómoda para lo que tenía que hacer, a la final nadie la vería así que para que preocuparse mucho por cómo se veía.
Ya era de noche y Joey continuaba sumergida en sus libros, algunas cosas le resultaba más complicadas que otras y comenzaba a sentirse incomoda por esa situación, así que decidió levantarse estirarse un poco, tomar un vaso de agua y despejar la mente por unos minutos, luego de hacerlo se sintió un poco mejor retomando algo de fuerza y tranquilidad para seguir estudiando.
Toma de nuevo su lugar sentada en el piso y toma su lápiz para empezar a escribir en su cuaderno cuando de repente escucha un estruendo fuera de su apartamento que hace que se sobresalte inmediatamente, al parecer alguno de sus vecinos había decidido hacer una fiesta en ese momento, la música estaba muy alta, los gritos y risas provenientes de afuera se escuchaban con mucha claridad en el interior de su apartamento, al principio trató de ignorarlo, pero se desconcentraba con frecuencia, tenía que leer repetidas veces algunas cosas porque no lograba entenderlas debido a que la música se abría paso en su mente en vez de las lecciones que debía aprender, eran cerca de las doce de la noche y la música no cesaba, ya tenía más de tres horas y Joey estaba muy molesta y cansada.
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Déjame Amarte (EXO-KAI)-[Romance HOT]
FanfictionJoey, una joven a punto de graduarse de la universidad con un mundo nuevo delante de ella, debería estar feliz por esto, pero es todo lo contrario, nunca a encontrado en su vida la verdadera felicidad ya que todo lo ha hecho para complacer a sus pad...