Ranma ½ - Ranma Y Akane

6. Lago Izumi

Era una noche de luna llena, y esta luna estaba hermosa, durante la noche se oculto un par de veces tras las nubes apenas notables en el oscuro cielo pero en este momento el bello astro se podía ver en su totalidad.

Iluminaba el lago del patio de enfrente de la casa Tendo dejando su reflejo en el agua y también iluminaba a dos jóvenes sentados en el porche de este mismo lugar.

— Akane.— un susurro casi inaudible sale de los labios del ojiazul.

— ¿Si Ranma?— la chica responde antes de darle un bocado a su emparedado.

— ¿Tienes sueño?

— No, creo que no podre dormir… — se sonroja un poco, desde el incidente de hace un rato solo se han dicho un par de cosas pero por todas y cada una de ellas se han sonrojado.

— Ni yo, pero es una linda noche.— sonríe y mira la luna, de inmediato una idea cruza por su mente.— ¿Quieres hacer algo?

Akane lo mira raro, como si no entendiera.

— ¿Algo dices?

— Si como ir a… Un restaurante de esos de media noche.

— Acabamos de comer Ranma.— Habla Akane con un poco de fastidio pero de inmediato se siente mal por ser siempre tan grosera con él. — Pero no es mala idea podríamos ir a patinar, la pista esta casi vacía a estas horas y…

Akane se da una sublime cachetada interna por el hecho de que por un momento pensó en estar a solas con Ranma al estilo romántico y eso la sonrojo por enésima vez.

— No eso no, tal vez ir al cine del centro que tiene funciones nocturnas.— Ranma.

— Son algo aburridas, que tal al Karaoke.— Akane.

— No canto, y los juegos de Arcade.

— Los cierran a las 9 en punto, y… El parque de diversiones que tiene atención 24 horas.

— Y que tal el salón de boxeo.— Ranma.

— Porque no vamos a nadar en el lago.— Ranma suelta a reír con la proposición de Akane.

— Eres muy tonta, sabes que el agua me convierte en chica.— le da una mirada a Akane y ella hace como no entender nuevamente. — hoy no quiero ser una mujer.

— Yo hablaba del lago Izumi donde hay agua termal.— ahora se ríe Akane.

— No lo conozco.— Ranma se cruza de brazos.

— Saotome, Ranma, como es posible que lleves dos años y algo más aquí y no conozcas el lago Izumi.— Akane lo mira entre divertida he incrédula.

— Realmente no se de que me hablas.— Le responde Ranma algo confundido con la cara de Akane.

— ¡Ranma! Alista tu traje de baño.

***

Un par de horas más tarde después de que los dos jóvenes entraran a sus habitaciones nuevamente para conseguir ropa de baño que salieran con el mismo sigilo de la casa y con una bicicleta que robaron o como Ranma dijo "Se encontraron en el camino" llegaron hasta un pequeño sendero que la única señalización que tenia era un cartel que decía "← Lago Izumi".

— Segura que no estas perdida Akane.— dijo Ranma mientras aparta las hojas que tapan el sendero.

— He venido aquí desde que se caminar.— ella también aparta la maleza.— Es medio imposible que me pierda.

— Para ti nada es imposible cuando me miras de esa manera.— Akane se detiene de repente.

— ¿De que manera dices?— En los labios de Ranma se forma una media sonrisa imposible de ver en la oscuridad.