Chat ✧ Jikook

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Una copa de vino descansaba en la mesa del living, esperando a ser tomada. El repiqueteo de las teclas resonaba en el pequeño cuarto, que tenía dos grandes sillones, la mesa ratona, la biblioteca y el escritorio donde trabajaba Jimin.

Era su segunda página de la nueva novela y las teclas de la máquina de escribir, golpeaban la superficie de la hoja, llenándola de magia. El escritor extendió el brazo y tomó la copa de vino luego, tragó un sorbo y la dejó en la mesa, volviendo a su arduo trabajo. Solo si el teléfono dejaría de sonar, podría concentrarse. Pero no, seguía sonando el sonido.

Jimin tenía una ley: Cuando escribía, escribía. No hacía nada más. Golpeó el escritorio con su puño y tomo el teléfono.

Un mensaje brillaba en la página:

Jungkook: Hola.

Jimin desbloqueó su teléfono y escribió rápidamente.

Jimin: ¿Quién eres?

Jungkook: ¿Qué importa? ¡No puedo creer estar hablando con usted! Me parece una locura. ¡Mi corazón va a explotar!

¿Quién rayos era Jungkook y cómo mierda había conseguido su número? Escribió una respuesta rápidamente:

Jimin: Mira, no sé quién eres, así que adiós. Estoy trabajando.

La respuesta llegó al instante:

Jungkook: Usted no me conoce, claro que no. Pero yo a usted lo conozco como a nadie más, siento que estábamos unidos por alguna razón, por sus libros.

Jimin: ¿Así que eres un fan? ¿Cómo rayos conseguiste este número?

Jungkook: No solo soy un simple fan, soy su fan número uno. ¿Cómo podría usted saberlo? Claro.

Jimin: No has respondido mi segunda pregunta.

Jungkook: ¡Maldición estoy hablando con Park Jimin! Alguien dame un puñado de calmantes.

Jimin: Mira, me alegro que te gusten mis libros, pero no hablo con mis fans. Y si me disculpas, estoy bastante ocupado.

La máquina escribir parecía rogarle que teclee. Pero Jimin no pudo hacerlo, porque el torbellino de mensajes llegó demasiado rápido como para apagar su teléfono.

Jungkook: Pero ya se lo dije no soy un simple fan.
Maldición, creo que moriré.
¿Está escribiendo un nuevo libro?
¡No puedo creerlo, tengo una primicia para mi Blog!

Jimin se tomó la cabeza entre las manos. No quería que nadie supiera de su nuevo libro. Era su segunda regla: No contar nada del libro hasta haber hecho medio trabajo convencido de mandárselo a su representante...Pero ahora todo el mundo lo sabría debido a ese hombre que consiguió información.

Jimin: Por favor, no lo hagas, es algo muy nuevo aún.

Jungkook: Sí, siga dándome información. La publicación ya tiene noventa comentarios, ¿No es genial?

Jimin: ¿Publicación? Solo te lo he dicho hace un minuto.

Jungkook: Ya le dije, usted no me conoce ;)

Jimin: Maldición.

Jungkook: ¡Me dijo maldición! Alguien traiga un chaleco de fuerzas, porque voy a enloquecer.

Jimin: No, yo me enloqueceré, ¿Alguien más tiene mi número?

Jungkook: ¡Claro que no! Lo quiero solo para mí.

Jimin tragó el vino que quedaba.