♀♂JUST... FRIENDS♂♀ ●HOT●

●capitulo 5●maraton 2/?

-¿Importa?- interrogó ella, acercándose a él para desabrocharle el cinturón. Pese a que era de mañana, iba vestido muy normal, pantalones negros y una camisa blanca, y al acordarse de las palabras de su amiga, April supuso que era el atuendo de camarero.

-la verdad es que no, pero si me cuentas que te ha excitado, quizás yo también me excite-

-¿no te excito yo ya? ¿no te excita mi cuerpo?- dijo ella desabrochándole tres botones de la camisa, le besó el cuello a la vez que sus manos volvían a dirigirse a su entrepierna, donde su erección la esperaba -yo diría que si te vale solo con mi cuerpo-

-ya con tu llamada se me ha puesto dura- confesó Colby agarrándola por el trasero, arrimándola a él -pero dime, que te ha puesto a ti, quiero oírlo-

Ella sonrió y lo hizo girar hasta que quedó de espaldas al espejo de la entrada. Terminó de desabrocharle el pantalón, el cual cayó solo, para luego bajarle los boxers. Miró el reflejo del culo del chico frente a ella, por el espejo.

-cuando he salido a correr, había un rubio un con culo espectacular, no te puedes ni imaginar cono me ha puesto correr tres kilómetros detrás de él-

-¿y por que no te lo has tirado? Podrías haberte puesto a su lado y haberle propuesto otro tipo de ejercicio mucho mas... completo- él movía su cintura para que su erección creciera todavía mas al rozarse y frotarse contra el vientre de ella.

-iba con una chica todavía mas espectacular que él, la he visto con las uñas preparadas para defender su tesoro-

Bruscamente, Colby se giró y se puso detrás de April. La besó en el cuello a la vez que le pellizcaba los pezones. Ella protestó, peno no se apartó.

-¿te gusta el espejo?- le interrogó él al oído, a la vez que hacia descender su mano por el vientre de la fémina hasta llegar a su zona íntima. Acarició sus labios vaginales, causando una corriente eléctrica en todo es cuerpo a April. Le sumergió dos dedos mas allá, trazando suaves círculos con la yema de sus dedos y jugando con su clítoris mientras no dejaba de mirarla de manera provocativa a través del espejo. April no pudo evitar gemir y con su mano buscó la erección de Colby.

No obstante, él no dejó que se la alcanzara, y empujandola delicadamente pero con decisión por el hombro, la hizo inclinarse hacia delante y abrir las piernas. Volvió a llevar su mano hasta la vagina de ella, esta vez por detrás, excitándola con una mano, mientras se agachaba y con la otra buscaba algo en el bolsillo de su pantalón. Sacó un preservativo y se lo puso con rapidez, volviendo enseguida sus dedos a la húmeda entrada que ya lo esperaba. Tras asegurarse de que seria bien recibido con una mano agarró a April por la cintura u con la otra sujetó su pene dirigiéndolo con exactitud a su objetivo. Entró con un poco de dificultad, y a Colby lo excitó aun mas el ver como ella cerraba los ojos y entreabría la boca al sentir como su hinchado miembro se abría paso entre ella.
Cuando estuvo totalmente adentro, retrocedió con lentitud y volvió a entrar suavemente, una, dos, tres veces, hasta que sintió que ya se deslizaba con mayor facilidad dentro de ella. Entonces sujetó con ambas manos las caderas de April, y comenzó con un movimiento contante hacia dentro y hacia afuera. En reflejo del espejo podía ver los pechos de ella rebotar y moverse alocados cada vez que la penetraba y su cuerpo chocaba con su culo.

Se inclinó para apresárselos y sobárselos mientras la tomaba por detrás. Después sus manos subieron hasta sus hombros a la vez que la embestía, tiró de ella hacia sí, hundiendo aun mas su erección en las profindades de April. En la cara de ella aparecía una mueca cada vez que lo hacia y de su boca se escapaba un gemido, Colby no sabia si era de placer o de dolor.

-¿te hago daño?-

-no pares-

Aquellas dos palabras pusieron a Colby a mil. Se incorporó y volvió a tomarla por las caderas, tirando de ella para clavarla contra se pene. Ella tuvo que apoyar sus manos contra el espejo para mantener el equilibrio.

-sigue- ella le pidio, sabiendo lo excitante que le resultaban sus palabras -sigue-

Las envestidas de él ya eran frenéticas. Alzó la cabeza hacia el techo y si cara se contrajo a la vez que su respiración agitada se convirtió en gemidos. April se concentró en las sensaciones que sentía en su interior, en todos los puntos sensibles que el pene de Colby le tocaba, y dejándose llevar por los excitantes ruidos del orgasmo masculino, se dejó llevar por una oleada de placer que salió de sus entrañas.