El chico de a lado

Capitulo 4 (editado)

−Entonces... ¿Cómo están Jace y tú? – pregunta Matt preocupado.

Después de subir a mi habitación, lo primero que hice fue marcarle a Matt, aun que recibí su llamada antes. Teníamos ya varios minutos hablando preguntando si me encontraba bien.

−Matt, ya te lo dije, estamos bien− le dije por cuarta vez

− ¿Segura?... y que pasa con lo de la pelea de Jace en el estacionamiento, ¿Cómo puede estar bien? –dice Matt insistente. Pongo los ojos en blanco y me acuesto en mi cama.

−Jace está perfectamente bien Matt. Recuerdas que hace un par de años fue a clases de King Boxing.

−Sí, pero...

−Entonces el esta bien yo estoy bien y solo fue una tonta pelea de testosteronas ¿de acuerdo? – le dije omitiendo un poco el verdadero motivo del problema.

En realidad, conociendo a Matt si supiera desde ya estuviera buscando a Derek para terminar lo que Jace dejo inconcluso.

Hombres...

− ¡Jay! –grita Jace desde la planta baja.

−Bueno, parece que tienes que colgar−dice Matt. Me levanto de mi cama y salgo de mi habitación aun con el teléfono celular en mi oído− nos vemos mañana, descansa.

−Hasta luego Matt− y cuelgo.

Camine hacia la cocina donde se encontraba Jace, estaba sacando algo del refrigerador.

−Llamo mamá, dice que llegara tarde− dice Jace. Se incorpora y me tiende un par de verduras− lo que significa que tendremos que preparar la cena− sonríe y por último me pasa un cuchillo para cortar las verduras.

− ¡Genial! ¿Por qué no pedir pizza? –Pregunto malhumorada− ¿sabes que odio cocinar?

−Lo sé− se encoge de hombros− y porque lo sé, te obligo a preparar la cena− sonríe maliciosamente.

Le saco la lengua y continúo cortando las verduras. La verdad es que, si me gusta cocinar, solo que no quiero que Jace se entere es más divertido cuando lo hacemos de esta manera, pero creo que ya no está surtiendo efecto, ahora lo toma tranquilamente, tiempo atrás estuviéramos teniendo una de nuestras peleas.

Mientras que Jace se encarga de preparar las sartenes, que por lo que veo estamos preparando pasta Alfredo, una de nuestras comidas favoritas y lo único que sabemos cocinar que son puras pastas, termino de cortar las verduras.

−Esto ya quedo− digo satisfecha por mi trabajo.

−Genial Jay, ahora puedes ir buscando una película – dice Jace preparando no sé qué. Me acerco a él y lo abrazo de medio lado.

− ¿Puede ser una de terror? − pregunto esperanzada, ya que a Jace no le gustan mucho que digamos.

−Puedes, pero que no sean esas sangrientas que te gustan− dice con fingido horror. Ruedo los ojos y salgo de la cocina.

Como es de costumbre para nosotros, cuando mamá no está en casa, preparamos la cena y comemos mientras miramos una película en la sala de estar, ya que la pantalla es más grande que la de nuestras habitaciones, por lo usual Jace es el que escoge la película; comedia, acción, suspenso, pero nada de romántica, terror o masacre, que son las que a mí me gustan ver. Termine de preparar la sala; cojines en el piso, la pantalla lista con el DVD, la mesita de estar retirada un poco para tener más espacio.

− ¡Jay!, ¡¿Podrías sacar la basura por mí?! ¡por favor! − grita Jace desde la cocina.

Dejo el último cojín en el piso y camino hacia la cocina.