Mis Ultimas 24 Horas

Capitulo 2. Es tiempo de partir

Eran las 4 am y yo ya estaba despierto, la vida empieza desde muy temprano en esta contaminada ciudad. Se notaba desde mi ventana que estaban preparando algunas rampas y medios tubos con grandes gruas para los X Games. Tenia mucho tiempo que no los veia por la ciudad y justo en el dia que tenia que levantarme temprano empezaban a joderme con sus malditas gruas.
-No se porque duran tanto tiempo construyendo una rampa de casi 7 metros donde solo 1 de cada 12 participantes lograra llegar hasta arriba y caer bien-. Me puse a pensar y a hablar conmigo mismo hasta que se hicieron las 5 am.
-¡Heady! ¡Ya baja! ¡Ya nos tenemos que ir!-. Grito Magda parada en la puerta de entrada y tenia los boletos del camion en su mano que estaba toda temblorosa por el frio que hace a esa hora y mas en esta epoca.
Me aliste y baje muy rapido, creo que nunca habia bajado esas escaleras tan rapido en todo el tiempo que hemos vivido aqui.
-¿Que tanto hacias? ¡Te estamos esperando, se hace tarde!- Dijo mi padre algo emocionado y con la voz temblorosa del frio; ahi fue cuando supe que yo fui el ultimo en bajar y que realmente todos estaban esperandome.
Desde ahi tuve una extraña sensacion que este dia iba a ser algo raro. Mis hermanas duran como 3 milenios maquillandose y escogiendo su outfit del dia pero se creyeron lo de que se les iban a quedar viendo en Ixtapa y solo tenian una gabardina y mi padre vestia una americana que le habia comprado en su cumpleaños en las rebajas de Pull & Bear y dijo que se veia como un "chavorruco" pero la tenia puesta y de hecho si parecia chavorruco.
Tomamos el bus que nos llevaba a la central de camiones o al "bus-center" como le decia mi papa queriendo crear nuevas palabras en ingles.
Viviamos relativamente lejos de la central de autobuses pero cerca de los X Games, y cerca de la Universidad donde tenia que tomar ese mismo bus para ir pero para el otro lado.
Eran las 6:15 y llegamos al bus-center, el sol ya estaba haciendo estragos en los primeros rascacielos de la ciudad y por otra parte seguia el horrible frio en la sala de espera.
Solo habian pasado 10 minutos desde que habiamos llegado cuando vocearon a los pasajeros del camion a Ixtapa, Guerrero. Apenas habia encontrado una red wi-fi libre cuando escuche a mi padre desde lejos que teniamos que subir.
-En el anden 4-. Dijo el encargado.
-Ya saben, anden 4, recuerdenlo bien universitarios-. Dijo mi padre tratando de practicar su español.
Todos sabiamos que el 4 sigue del 3 y es antes del 5 pero mi padre no lo entendia, pensaba que no sabiamos nada hasta entrar a la universidad y ahi se nos abririan las puertas del conocimiento y seriamos personas que iban a filosofar acerca del anden 4 y su bus a Ixtapa.
-¡Paracetamol!-. Grito Gloria tomandome el brazo.
-¡Ya deja de usar esos chistes malos, la bata es mi uniforme y crea respeto!-. Le dije.
-Si, por eso quieres fomentar el respeto en el bus-center jajaja-. Dijo con una risa burlona mirandome de perfil.
Y era cierto, habia llevado mi bata puesta todo este tiempo y yo no me habia dado cuenta. Pensaba que me habia puesto mi americana blanca que me habia regalado Magda pero no, era mi bata y la tenia puesta todo este tiempo.
Me la quite y senti el horrible viento helado del aire acondicionado que habia en ese larguisimo pasillo para llegar al cuarto anden.
Por fin llegamos al anden 4 y en eso vi el autobus con el letrero "Ixtapa, Mexico. Salida 6:30 hrs. Llegada 6:30 hrs"; -Un dia exacto-. Pense.
-Sus boletos por favor-. Dijo el conductor del autobus con la mano abierta señalandonos.
-Ah si, aqui estan-. Dijo Magda entregandole los 4 boletos.
-Sean bienvenidos, sera un largo viaje y espero que lo gozen-. Dijo el conductor dandole la otra mitad de los boletos a Magda.
-Gracias-. Dijo mi padre con su acento español que no dejaba.
Un ayudante subio el equipaje al autobus y subimos.
-Asientos del 12 al 16-. Dijo Gloria revisando los boletos que le quito a Magda cuando subiamos.
Corri y me sente en el asiento 13 en la ventana y mi padre se sento al lado mio.
-Este sera un gran viaje-. Dijo
-Si-. Le conteste mientras sacaba mi iPod de mi bata.
El camion se lleno y salimos con 7 minutos de demora; sentia esa sensacion de que algo raro iba a pasar.