¿Por qué yo?

Capitulo 8

[Woobin]

Abro la puerta de su habitación con el pie, entro y lo llevo hasta la cama, lo aviento a ella, pero me abraza del cuello y caigo encima de él.

—no te vayas—balbucea.
—suéltame—trato de zafarme de su abrazo a mi cuello.
—me gustas—me detuve al escucharlo. Volteo a verlo impresionado.—Yoobi~ me gustas—logro soltarme de él. Que susto me diste. Coloco mis manos en la cintura mirándolo.

—Olvídalo—dije a mi intención de venganza—Tendrá suficiente con la cruda.—Me acomodo mi ropa y salgo de su habitación. Voy bajando las escaleras y su hermana va subiendo, tarde dos semanas en darme cuenta que es profesora en la universidad. Salude educado.
—¿Y CheonDung?
—tomo de más. Lo deje en su cama, nos vemos en el colegio. Yo ya me...
—No te vayas—me tomo del brazo—seguro a CheonDung le encantaría despertar y que tú lo estés cuidando—que cursi, empecé a reírme. Rasque discreto mi frente ideando como salir de aquí.
—yo creo que será mejor dejarlo descansar.
—no te avergüences—entrelaza su brazo con el mío y me obliga a subir los escalones que acabo de bajar.—Somos cuñados. Tienes mi permiso para dormir con él—y así me metió a la habitación de su hermano, cerrando la puerta en mi cara, trate de abrir pero la cerro con llave.—No te preocupes. Voy a salir. Adiós.—se escuchan pasos alejándose.
—¡oye! ¡OYE!—grite desesperado pero no me respondió. Me gire y me recargue en la puerta. ¿Y qué voy a hacer todo este tiempo y con un borracho?

[Dara]

Sé perfecto que solo "anda" con mi hermano para molestarlo. CheonDung me ha contado todo. Aunque la verdad se ven lindos juntos pero el malo de Woobin solo lo molesta, por eso lo deje encerrado con Thunder, seguro estará tan desesperado. Una de dos, se cansa de fastidiar a mi hermanito o lo tomaran enserio. Y ahora yo voy directo a divertirme con mis amigas.

[Joon]

Un chico me mojo, odio que esos infantiles vengan a lugares como estos. Que fastidio toparte con inmaduros. Además le estaba reclamando y solo me miraba como un tonto. Que mal gusto tiene para vestir, como puede venir con bermudas, playera grande y una gorra hacia atrás. Y su "lo siento" fue lo más falso de todo.

Termine el entrenamiento de box, todas las chicas se acercan a despedirse de mí, yo les sonrío coqueto. Las chicas muy traviesas acarician mi cadera y un poco más abajo. Termino de secarme el sudor y al bajar la toalla ese chico está frente a mí con una bebida energizante en la mano.
—lo siento de verdad—estira su mano entregándome la bebida, yo solo lo mire—Acéptala, como una disculpa—lo mire de pies a cabeza. Pésimo gusto.
—no bebo de esa marca—pase a lado de él, evitándolo. Se quedó de pie. Sonreí discretamente con maldad. Pero esa sonrisa desapareció cuando de la nada está frente a mí. ¿De dónde salió?
—comprare la que quieras. Tú elige.—me cruzo de brazos.

[Mir]

Es cierto que la persona indicada llega cuando menos lo imaginas, sé que es el indicado. Siempre han dicho "no ames a quien no te ama, ama a quien te ama", eso no funciona, para que te sientas pleno tienes que amarlo aunque él no lo haga, si no lo amas y él a ti sí, se volverá una pesadilla, lo lastimaran tarde o temprano, porque en verdad no lo quieres y hasta estar con esa persona llega a ser una carga, a ponernos de malas. Por eso yo he decidido ir por el chico que yo quiero y que me asegurare de conquistar. ¿Cómo?, aun no lo sé. Justo estando frente a él, tratando de ofrecerle una disculpa, no sé qué hacer. Nuestro encuentro fue un accidente y creo que me odia.