Esto, ocurrió hace mucho tiempo, un par de piernas y dos aletas. Yo vivía feliz, me había casado hace dos meses y convivía con mi marido Roderic, yo era feliz, feliz como ninguna otra mujer, él lograba una sensación en mi que nadie más podía hacerlo, yo por él dejé mi familia, mis amigos, mi hogar, mi ciudad. Pero... él trabajaba mucho, tanto que pasaban días sin verlo, sin sentir su aroma entrar por mis fosas nasales, sin sentir sus caricias ni su mirada penetrarme el cuerpo, esos días me sentía sola y me quedaba en mi casa las 24 horas esperando a que llegara, así días, pasaba noches despierta.
Un día Roderic llegó, ese día no estaba de muy buen humor, venía enojado, según lo que me decía lo habían despedido de su trabajo.
—Cálmate amor, ya veras, encontrarás uno nuevo. Yo te ayudaré, lo resolveremos juntos...—sin embargo, cortó mis palabras bruscamente y me apartó de él.
— ¡No! ¡No, para de decir que lo haremos juntos! ¡Siempre estamos juntos! ¡Esto es todo tu culpa!—suspiró profundamente y luego prosiguió—El jefe me encontró hablando contigo... de nuevo... ¡¿Acaso no puedes pasar un día sin escuchar mi voz?! ¡¿Qué mierda hacías cuando no me conocía, como vivías?!
—Desde que te conocí fuiste indispensable para mi, te necesito para mi vivir—me acerqué a su hombro y lo abracé.
— ¡No, no! ¡Todo el tiempo estas llamándome, el jefe ya me regaño unas veces pero ahora fue suficiente! ¡Por tu culpa perdí el trabajo que tanto soñé desde que soy un niño! ¡Todo por tu maldita culpa! ¡Estas... estas...Obsesionada conmigo! Eso ¡Estas obsesionada conmigo! ¡Maldita loca!—de repente gritó en mi cara y pude sentir el olor a alcohol provenir de su boca, estaba borracho, se ve que había tomado mucho. Pero eso no quitaba mi miedo al ver su rostro de odio, al contrario lo aumentaba.
—No... eso no es cierto, yo...
—Eres un maldita loca y tu locura está afectando mis pasiones ¡Me está afectando a mí!—de repente comenzó a susurrar cosas que no llegaba a oír.
—Tengo... tengo que deshacerme de ti ¡Tengo que deshacerme de ti! ¡Tengo que llevarte de vuelta a donde perteneces!
Esa fue la última cosa que lo oí decir antes de que tomara el cuchillo de la cocina, la máquina de coser y me convirtiera en su sirena de cuentos de hadas para que nademos juntos... para siempre.
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ADAY
FantasyHay teorías que en algún tiempo hace millones de años una parte de la raza humana fue a buscar refugio y comida al mar y que con el paso del tiempo se fueron acostumbrando a las profundidades más oscuras solo por la necesidad de seguir con vida. Se...