Narra Christian.Estoy en mi despacho y llaman a mi puerta y cuando veo a Satine no digo nada.
-¿Puedo? - pregunta con la voz temblorosa.
-Claro - sonrío
No me esperaba que viniera, la echaba de menos lo tengo que reconocer. Satine pasa y cierra la puerta.
-¿Qué tal? - rompe el silencio incómodo.
-Bien y, ¿tú? - respondo
-Bien
-Y bueno, ¿Qué tal con Ángel? - finjo una sonrisa pero no me sale
-No es mi novio
Me invita a sentarme para seguir hablando y finalmente me pregunta por qué me fui.
-No te voy a responder a eso
-Solo he venido a saberlo- miente
-¿Por qué te fuiste con Ángel? - cambio de tema
-No me fuí con él, me dejaste tirada en la cena de tus padres -sin querer elevo el tono de voz.
-Te fuiste porque te dió la gana - replico levantándome de la silla.- No haber entrado ahí en lugar de esperar te fuiste con el gilipollas ese y yo como un imbécil buscándote- grito.
Aprieto los puños y doy un golpe en la mesa que la hace callar.
-¡Me fui porque no quería aguantar a un imbécil como tú! - me grita - ¡Solo me lo encontré!
-Claro y luego te lo follaste ¿Verdad?
-Pues no - dice gritándome.
Da ella otro golpe y se me queda mirando seriamente.
-¿Qué pasa?
-Pues nada que va a pasar, que me voy.
-Vale
No quiero que se vaya pero no quiero recordar cuando cogí el teléfono y escuché la voz de Ángel.
-Todo esto es culpa tuya - digo antes de que se vaya
Se da la vuelta y me responde:
-¡Ha sido culpa tuya esto no estaría pasando si no me hubieras dejado tirada te repito! - se acerca a mí y me da un pequeño empujón.
La agarro la muñeca y se me queda mirando.