Drunk.

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-Mitch... no, no es lo que...

-¿Que no es lo que yo creo? Por favor!

-Mitch, amor por favor escuch...

-Amor? Amor... Claro, que amor, eres un asco Rodríguez.

-Por favor déjame explicarte.

-Explicar que? Víctor... Jamás lo esperé de ti, ocupas el departamento para esto? Es por eso que pasabas tanto tiempo con este idiota. ¿Como no me di cuenta?

-Y tu? Pasabas días enteros con Scott.

-Es diferente! yo no iba por ahí revolcándome con él. Sabes lo pesada que es la carrera y lo casi imposible que son los exámenes o trabajos de finales de año.

-Siempre con excusas Grassi?

-Tu te callas. Nunca confié en ti, eres un asco. Quiero que ambos se vayan de mi departamento...

-Pero Mitch, amor, yo...

-Quiero que ambos se vayan dije.- Di un fuerte grito tratando de contener las lagrimas.

-Vamos víctor, no necesitas a este idiota.

-Eso era lo que querías verdad? Querías a víctor... pues ahí lo tienes! es todo tuyo! Felicidades, no sabes lo feliz que soy por ti.- Emití un tono sarcástico.

-Mitch...

-Vete! Por favor, vete...

Scott entró a la habitación y su mirada de asombro se notó al ver todo lo que pasaba. Se acerco a mi y me rodeo con sus brazos. No pude contener mas el llanto y comencé a llorar en su pecho. Víctor y Alex tomaron su ropa, todas sus cosas y salieron en silencio de la habitación, posteriormente, de la casa. Cuando escuche la puerta cerrarse, mi mundo se derrumbo. Sentía que no tenia consuelo, otra vez, esa angustia que te da cuando una persona a la que amas te traiciona. Scott sabía que en un momento así, debía quedarse callado, y solo esperar a que se me pasara un poco la tristeza. Y así lo hizo, se quedó abrazándome hasta que ya no me quedaban mas lagrimas. Me levanté sin decir nada, y me fui a mi habitación, me recosté sobre la cama, puse una almohada a mi lado, y continué llorando, pero esta vez, sin emitir mucho ruido.

Me quedé dormido sobre la cama, ya había amanecido. Scott entró con una bandeja, traía el desayuno, y se notaba que se tuvo que levantar un poco temprano para preparar todo.

-No debiste preocuparte.- Dije sonriendo un poco y sentándome sobre la cama.

-Claro que si, se que te gustará y que te dará un poco de ánimos comer cosas dulces.

-Gracias.- Sonrei tomando la taza de chocolate caliente.

Scott en ese momento se convirtio en mi mayor apoyo, en mi mayor todo, agradecia al mundo tenerlo nuevamente de vuelta.

-¿Por que te sigues preocupando por mi? Yo debería odiarte profundamente maldito rubio.

-Es simple, en el fondo de tu corazón jamás dejaste de amarme.- El rubio Sonrió y salió de mi habitación.

Scott podía ser rubio y ser un estúpido la mayoría del tiempo, pero a veces me sorprendía con sus respuestas... Ya que en cierto modo (no lo asumire.) el tenía razón. Nunca deje de sentir ese amor tan fuerte por Scott.

(...)

-Grassi?

-Presente.

-Crees que Hoy entreguen los resultados del examen?

-Lo más probable, pero como te dije, este profesor es un gran hijo de puta que juega con nuestros sentimientos.

-Queridos alumnos. Debo decir que estaré encantado de pasar mis vacaciones con muchos de ustedes. Hoying ¿cuantos alumnos son en esta clase?

MichelleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora