Al siguiente día de esa noche tan mágica desperté como siempre 5 minutos antes de salir de casa parar llegar justo antes de que las puertas del colegio se cerraban, siempre fui una chica rebelde, de mal carácter y violenta así que no era raro que los orientadores me detuvieran antes de entrar siempre buscando un pretexto para joderme o darme un consejo. ¡BAHHHH! Cuando llegaria el día que notarian que no me importaba lo que decían, no solo ellos también mis padres, mis amigos; todo el mundo.
Era otro dia comun y insignificante para mi, cuando en medio de tanto relajo entre mis compañeros y yo reinó el silencio, mi mejor amiga me hizo señas de que volteara; esas señas solo las usábamos cuando algún maestro llegaba y íbamos a tener problemas.Sigilosamente tome un asiento en el primer pupitre que encontre pero no escuche regaños, esta vez era diferente solo había silencio cuando voltee solo pude fijar mi vista en algo, en alguien para ser más específica, allí estaba él; no parecía un muchacho como los que yo había conocido, ni como ningún otro del colegio, en sus facciones se podía ver la madurez y algunos golpes de la vida que ni aun así lograron quitar su galanura, era de esos chicos con aires de maldad pero con rostros inolvidables, con una mirada indiferente pero al mismo tiempo implorante de cariño.
No podía dejar de mirarlo era como si hubiera caído de algún cielo desconocido, era una luz a punto de apagarse, tan misteriosa y al vez tan tan, ahhhhhh!
Trate de desviar mi mirada y ser indiferente, nunca me gusto que la gente notara que me interesa, ni aun mi mejor amiga y ella sí que me iluminaba siempre sabía cómo me sentía y como hacerme sentir mejor, me acompañaba en mis locuras pero también me inspira a querer algo mejor, era mi hermana de otra familia, de otra sangre pero a final de cuentas mi hermana, nos perteneciamos más que a nuestras propias familias, éramos ella y yo; ella siempre tan frágil y yo siempre tan venenosa.
Prosiguieron las clases y él estaba sentado a unos cuantos pasos de mi lugar, me acerque y le comencé a hablar, lo encontré dibujando pude notar el nombre que estaba allí escrito, el nombre de una mujer, no me desilusione y le hable, cuando sus ojos me miraron fue como si hubiera visto de frente el resplandor de dos estrellas.
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"El amor en las estrellas"
Poetry"Una persona que fue amada por una estrella queda marcada toda su vida, no importa que existan centellas, no importa que alguien te haga parte de su galaxia; siempre volverás a donde comenzaste a brillar."