Till the end of the line [WWII]

Capitulo 15. It's all over...?

Habia permanecido a la espera de que Gerard saliera de aquel despacho, pero no podía soportarlo mas.
El olor allí era fuerte, aquellos pasillos fríos y protagonizados por el rostro del dictador fascista de aquella nueva Alemania. Era escalofriante tenerle mirando todos tus movimientos... Esperaba la mínima oportunidad para salir a correr y hacer mi propia misión, ir a aquel lugar y recuperar a Gerald. Y como si un golpe de suerte fuera, la alarma de bomba sonó retumbando por aquel lugar y por todas las calles de Alemania.
Me toca.
Pensé. Así puse cuando todos empezaron a correr fuera del edificio de aquel despacho nadie salio, así que sin pensarlo más y entré donde mi rubio amigo llevaba ya media hora.

Mi rostro se descompuso.
Lo que estaba viendo... No me lo puse creer, la misión de Gerald era infiltrarse y acabar con el jefe de las SS, pero se le había atragantado, aquel hombre era su padre el cual estaba sobre Gerald golpeando su rostro. Sin pensarlo más saque mi arma y apunte a su cabeza.

-Alejate de Gerald, maldito desgraciado.- Le grite con odio a aquel uniformado hombre.

Este al verme recorrió mi cuerpo con la mirada, y sonreía con diversión. Gerald por su parte y medio inconsciente de giro para mirarme y con sus pocas fuerzas intento levantarse cuando su padre se quito de encima de el.

- Una mujer no es capaz de acabar conmigo, estúpida eres si crees que podrás... No tienes el coraje que tiene un hombre para apretar este gatillo. - decía mientras se acercaba mas a mi. Sus palabras me enfurecian,¿quien se creía el que era para decirme que no tenia coraje?¿acaso no había demostrado que una mujer puede hacer lo mismo que un hombre? O incluso ser mejor que la mayoría.

-No sabes de lo que soy capaz.- Le dije cargando el arma para simplemente apretar el gatillo. Este se acercó lo suficiente hasta pegar su pecho al cañón de mi arma. En un disimulo mire de reojo a Gerald, aun en el suelo tratando de recuperarse.

-Matame, gatita. - Dijo rechinando los dientes. Y cabreada no lo pensé mas, no dispare pero si le empuje para hacerle caer.
Rápidamente este tomo un arma y comenzó a dispararme pero Gerald se tiro sobre el, desviando sus tiros.

-Dispara,¡Ahora!- Grito Gerald cuando consiguió colocarse sobre el e inmovilizarle. Con la frialdad adquirida en el campamento de entrenamiento militar dispare en el cráneo de aquel hombre sus tantos años fue mi vecino. Gerald parecía mantener aquella frialdad, pero el edificio comenzó a temblar, una bomba había caído cerca y nos tiro a ambos al suelo.

Deje caer al suelo aquel bolso de adorno, y dejé mi melena rubia suelta por el movimiento. Gerald se abrazo a mi cintura por donde me agarro y me ayudo a caminar apoyándome en el y el en mi.
Caminábamos por aquellos pasillos que amenazaban con caer encima nuestra y aplastarnos, buscábamos una salida, una que nos dieran la posibilidad de salir de aquel lugar manteniendo la identidad que teníamos.
El uniforme nazi y los rasgos alemanes de Gerald nos lo facilitaba pero antes de que pudiéramos salir por la salida del edificio una viga cayó del techo.
Apenas recuerdo mas que en aquel momento es un dolor enorme y que todo se volvió negro...