Mi Amor, Mi Corazón, Mi Héroe

Un claro en el bosque

No dejaba de pensar en aquel momento, aquel día lluvioso, aquellas palabras que él me dijo: "no lo puedo permitir, porque te amo". Simplemente no podía. Cuando lo intentaba olvidar, se me venía a la mente, él, su sonrisa, su alegria, su amor; pero tambien su cara de arrepentimiento, ira y frustración. Y cuando me daba cuenta de lo que estaba haciendo, me echaba a llorar, todas las lágrimas que lloró él más las que seguimos llorando aún.

Pasaron los días, las noches llorando, pensando en él, mientras mi corazón latía de los nervios, como si estuviera al lado mia, diciendo esa misma frase delante mía, una y otra vez.

Él, sin embargo, estaba desaparecido, no daba señales de vida, no cogía el telefono, no respondía a los mensajes, nadie en la villa sabía donde estaba. Teniendo en cuenta como estaba, conocía el único lugar donde podría estar: aquel claro dentro del bosque frondoso al lado de la villa, conocía aquel lugar, me llevaba de pequeña para jugar, allí es donde me enamoré de él porque me salvó la vida de un animal que me creía comida. Estaba segura, allí tenía que estar. Necesitaba hablar con él, no podía aguantar más esta situación, quiero dejar de llorar y quiero que me muestre su verdadero amor; por lo que me dirijí allí rápidamente, sin que nadie se enterase de mi salida.

Llegué a aquel lugar enseguida y estaba en lo cierto, ahi se encontraba él, sentado en el suelo con los ojos cerrados, parecía que canalizaba la energía de la naturaleza, ya que fluía con ella como si fuese uno. Creí que no me había visto, pero en cuanto me acerqué, se levantó del suelo, se dió la vuelta y me miró a los ojos. Los veía y sabía que no eran los mismos ojos: no solo su mirada había cambiado, había madurado.
Me preguntó si queríamos hablar, si quería saber respuestas. Asentí y me acerqué a él. Él se acercó a mí y me dijo: "lo que siempre he querido decirte no lo puedo hacer con palabras" asi que puso una mano en mi cara y me besó.
Mientras nos besábamos, era como si me estuviese hablando, me dijese cosas bonitas. Cuando cerré los ojos para disfrutar aun más del beso, vi a dos niños agarrados de la mano: éramos nosotros dos de pequeños jugando en el claro del bosque. Cambió el lugar de nuevo y veo a otros dos adolescentes en un banco dándose un beso: seguiamos siendo nosotros. Al sentir esto de él me di cuenta de que estaba pasando, estabamos en sus sueños, soñaba conmigo, y eso me hacía muy feliz, asi que se me salió una lagrima. Fue el beso más largo de mi vida, y el más bonito.
Alejó sus labios de mi boca y me dijo: "¿ahora sabes lo que siento por ti? Siempre he sabido que estabas enamorado de mi, pero tuve miedo de perderte aquel día, asi que por favor, ¡no me abandones nunca! Quiero que hoy seas mi presente y mañana mi futuro, juntos "
Me emocioné tanto que ni podía hablar, asi que me abrazó para consolarme.
Era ya de noche y no se veia la villa desde aquí, asi que nos quedamos a dormir en el castillo que teniamos dentro del árbol, hacía frío por lo que me abrazó y nos quedamos dormidos.

Forjamos nuestro futuro con el acero del presente y las llamas del pasado. Cuando era una niña, él era mi fuego, ahora es mi acero, y ahora seremos la espada que hemos hecho juntos.