Al día siguiente.

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ESA MAÑANA EN MI CASA

El insoportable calor que estaba haciendo fue lo que interrumpió mi sueño. 

Me encontraba sola en mi habitación con mi pijama habitual y envuelta en una maraña de cobijas que me sofocaban.

El encuentro con Danni había sido solo un sueño.

Un muy caliente sueño. Uno del que no quería despertar. 

Estar con Danni ayer fue algo relativamente normal al principio. Pedimos una pizza, vimos una pelicula, hablamos, nos reimos. Lo normal. Solo hubo un leve momento en el que sucedio algo inesperado. 

Danni me besó. 

Estoy muy segura de que eso no fue un sueño. No fue malo, al contrario, fue agradable, Danni es muy bueno besando, solo creo que fue algo apresurado ya que nos conocemos desde hace menos de 24 horas, el no me conoce y yo a el tampoco, cualquiera de los dos podria ser un asesino serial y el otro no se enteraría.

Ninguno de los dos armo un gran escandalo por eso, fue un simple beso. Cuando nos separamos nos dimos cuenta de lo que habia sucedido, nos disculpamos brevemente el uno con el otro y seguimos viendo la pelicula como si nada hubiera pasado y cuando esta se acabo nos fuimos a dormir, Danni dijo que estaria vien durmiendo en el sofá pero yo insistí en que, como minimo durmienra en el cuarto de invitados ya que sé de primera mano cuan incomodo es ese sofá.

Me quede unos minutos tumbada en mi cama viendo al techo pensando en que decirle a Danni cuando lo vea. 

Me dispuse a levantarme de la cama en cuanto decidi lo que iba a decir al lindo chico que descanzaba en el cuarto de al lado. Pensé en preguntarle a Danni que quería desayunar así que me asomé al cuarto de invitados pero para mi sorpresa estaba vacío, por lo que decidí bajar a ver si encontraba a Danni curioseando en algún lado.

Me fijé en el baño del cuarto de invitados, en la sala, en el patio, en el cuarto de mi hermana y mi madre; como no lo encontré supuse que se había ido antes de que yo despertara, por lo que me dispuse a bajar y desayunar algo. Mientras bajaba la escalera escuché una familiar voz proveniente de mi cabeza.

Eso. Eso. Muy bien idiota, espantaste al pobre chico, ahora que sabe lo patética que eres. ¿acaso no puedes hacer algo bien por primera vez en tu vida?

Puse mis ojos en blanco intentando disimular un poco el hecho de que sabía que era verdad lo que me dijo y que en el fondo me afectó.

Al entrar a la cocina me congele ante la vista de un chico de espalda a mi algo alto, en boxers de cuadros azules y con su espalda y brazos bastante bien formados pero no de forma exagerada.

Caminé despacio al lavabo que estaba sólo a unos cuantos pasos junto a mi  para tomar un poco de agua pero como mi nivel de torpeza es infinito, me tropecé con mis propios pies calle do de boca al suelo golpeandome realmente fuerte la muñeca.

-¡¡mierda!!

Danni se dio la vuelta rápidamente al escuchar el golpe, que a decir verdad, había sonado muy fuerte.

-Mierda Katy ¿estás bien? ¿Qué pasó?
-Joder Danni, ¿te parece que estoy bien? Creo que me torci la muñeca o algo porque me duele como no tienes idea.
-Oh claro, lo siento. Que pregunta más estúpida. Llamaré a tu madre ¿dónde está tú teléfono?
-Déjalo, no sirve de nada que le llames, no le va a importar una mierda. Ayúdame a ponerme una sudadera para ir a que me revisen.
-Yo creo que una sudadera no es tan buena idea, hará que te lastimes más por el movimiento.
-Hey, absolutamente no iré al hospital vestida con unos shorts de pijama y una camisa de consejos. Eso ni loca.
-Claro. Tienes razón. Ven, te llevo arriba.
-Vale.

Danni se pone de pie y cuando yo voy a hacer lo mismo el me toma de la cintura acercándome bastante a él para luego cargarme.

-Hey hombre ¿qué diablos haces?
-No dejaré que te lastimes más.
-Me lastime una mano, puedo caminar perfectamente.
-No me importa cuánto discutas, no te bajaré hasta que estemos arriba en tu cuarto y luego en un taxi de camino al hospital.
-Te dije que me bajes maldicion. No soy una puta barbie que necesita un super héroe cada que se le rompe una uña.
-Sé que no lo eres, pero cumpliré lo q.ue dije. Soy más grande y fuerte que tú, así que resistirte es ilógico.

Suelto un geuñido de frustración ya que lo que Danni dice es cierto, es inútil discutir a nivel físico con el ya que perderé, obviamente.
Da ni comienza a caminar a las escaleras y entonces yo noto que únicamente lleva sus boxers, por lo que tiene el pecho desnudo pegado a mi a tal punto que logró oír su corazón algo agitado, supongo que por el esfuerzo de cargarme.

Llegamos arriba bastante pronto y Danni entra de espalda a mi cuarto por alguna razón que desconozco y me deja suavemente en mi cama como si fuera una muñeca de porcelana que con el menor toque se va a romper.

-¿Dónde guardas las sudaderas?
-La puerta junto al espejo.
-¿está esta bien?
-Si, perfecta. ¿Buscas algo más?
-Un pantalón.
-Tercer cajor detrás del espejo.
-Umm ¿Katy?
-¿Si?
-Estos no son pantalones, es... es tu ropa interior -se ruborizo considerablemente lo que lo hizo ver muy lindo-.
-Oh mierda, lo siento -seguramente yo está igual o más colorada que el-, hace poco cambie todo de posición así que aún no me acostumbro, creo que están en el primer cajón o en el lugar de las sudaderas.
-Ajá, aquí están ¿esté esta bien?
-Claro, no importa. Sólo date prisa por favor, me duele mucho la muñeca y creo que esta empezando a amoratarse.
-Esta bien, ven aquí.

De forma trabajosa Danni logro colocarme la sudadera sin lastimarme demasiado, yo insistí en que podía ponerme sola el pantalón pero el dio mucha pelea y terminó colocandomelo el, por lo que vio mis vergonzosas bragas estampadas de pequeños dinosaurios; el, muy prudentemente, decidió no hacer un comentario sobre ellas porque si no lo hubiera golpeado.
Danni llamó un taxi y nos fuimos al hospital, pero la cosa es que está tan condenadamente lejos de mi casa que es por lo menos una hora y media para llegar.

Durante el trayecto empecé a hablar con Danni sobre la película de la noche anterior, que resultó ser nustra favorita -¿Quien lo diria?-.
Luego de un momento nos quedamos callados cada uno viendo por la ventana, y me descubrí bostezando ya que aun seguía cansada -nada raro-. Empecé a quedarme dormida y de repente sentí que me sujetaban suevamente por los hombros y me recostaban en algo duro pero tibio -creo que era el costado de Danni, o su pecho o su espalda, el caso es que se sentía bastante comodo-, y de esa manera me quede dormida.

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⏰ Última actualización: Mar 31, 2016 ⏰

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