Días de Lavandas y Tulipanes. (Sterek)

Capitulo 12

El movimiento del lobo fue suficiente para que la vergüenza regresara a su persona, corrió al lugar húmedo y con liguero aroma a limón al que su olfato identificaba como baño. Nomás entrar observo su cabello revuelto y su cara color fresa en el espejo sobre el lavamanos, el agua de la llave no disminuía la sensación de calor en su cara así que Stiles opto por seguir el consejo de su zorro interior; desnudándose sin un poco de sensualidad y lanzando la ropa sobre los azulejos jade del baño antes de matar su acalorado cuerpo con la lluvia artificial, se lo reprendió nomas hizo contacto el agua con su cuerpo –Maldita cosa–murmuro aun sabiendo que era su culpa por no esperar a que el agua calentase estaba en pleno otoño con el invierno de camino con anticipación. Poco después la temperatura de la ducha fue aumentando gradualmente relajando sus tensionados músculos, el baño del castaño no duro mucho más de lo requerido para la limpieza general a falta de artículos propios de higiene, por lo que se limitó a usar agua y el shampoo olor café.

Al terminar su baño sentía su cara roja, solo que ahora era a causa de la temperatura que tomo el baño, observo su ropa desparramada por el piso considerando si la idea de usar de nuevo.

Los nuevos sentidos del chico no advirtieron en el latino que corría con una bolsa en sus manos en su dirección aunque tampoco lo hizo con él, minuto antes, sonido de la motocicleta en la que viajaba.

–Buenas Derek –Saludo sin parar su caminata el beta ignorando las condiciones del nombrado. El alfa solo ni siquiera le escucho en su sueño. –Buenos días Sti, te traje un cambio de ropa. –El castaño al otro lado de la puerta salto al oír a su amigo.

La puerta del baño se abrió dejando espacio para la cabeza y brazo de Stiles. – Dámela Scott.

–Ni siquiera un "Buenos días" o "muchísimas gracias salvador" –Le dijo McCall con mal fingido disgusto. Como podría fingir con esa sonrisa tan pura hacia su amigo.

–Buenos días Scotty–Le sonrió –Ahora dame mi ropa o no te sacare a pasear. –Antes de que le pudiese responder la ropa le fue arrebatada seguido de un portazo en la cara.

–Te esperare en la cocina, quieres que te prepare algo llevas más de un día sin comer amigo.

–No gracias, sin ofender amigo pero hasta el café lo haces mal. –Ahora que conocía la naturaleza de su amigo y teniendo una similar era consciente de la posible sensibilidad ante el sonido.­–Espérame en la cocina y cuando baje preparo algo, de seguro viniste a toda prisa y no has comido nada.

El lobo bajo a esperar a su amigo con un puchero, siempre ha querido prepararle el desayuno a Stiles pero tanto su amigo como su propia madre eran conscientes de que Scott McCall no sirve para la cocina y lo mantenían alejado de esta. A los minutos bajo el castaño de nuevo guiándose por su olfato tomando como guía a su amigo y su aroma a naranja, este se encontraba sentado en la enorme mesa del comedor aun con un puchero y cabe recalcar él estaba porque apenas vio al de lunares sonrió y lo levanto en un abrazo, ambos reían tan contentos de estar con el otro hasta parecían una pareja de enamorados para cualquier espectador.

–Vamos para Scotty, debes comer.

–D-E-B-E-M-O-S Sti, debemos recuerda que no has comido nada desde día y medio. –Le regaño el más alto mientras dejaba que el otro volviese a tocar el piso.

–Como digas–Dijo revisando las provisiones en la extensa cocina. –Hermano, los chicos de la...manada. –Aun le resultaba extraño usar ese término para referirse a ellos. – ¿Ya habrán desayunado antes de venir hacia acá?