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Capítulo 9: La llegada de la leyenda

¡Qué cálido!  - pensé.

Me pegué más a ese calor, empecé a parpadear, estaba tumbada y observada por todos. Intenté levantarme pero Kim me paro.

- Mystery, no te levantes, túmbate. Tranquila le diré a los chicos que necesitamos intimidad para hablar -me susurró.

Bruce me dio un tierno beso en los labios antes de retirarse con los demás y dejarme con Kim y Stella.

- ¿Cuánto tiempo llevas? -me preguntó mi amiga con sus brazos cruzados a la altura de su pecho y mirándome con el ceño fruncido.

Yo no entendí a que se refería, así que le pregunte con ojos como platos:

- ¿De qué hablas?

- Mystery, me refiero a tu periodo. A mí no me engañas. Entiendo de medicina y de embarazos. Lo sé porque lo viví junto a mí madre adoptiva cuando dio a luz a mis hermanos, ella me lo enseño en otros embarazos ya que comadrona.

Me quedé anonadada. No se me había pasado por la mente que la causa de que no estuviera con el período fuera el resultado de algo desconocido para mí. Miré sorprendida a Kim.

- Acaso, ¿no sabes que eso sucede? -ella me observó un rato y siguió diciendome- No me digas que... ¡nunca te han hablado de esto! -me miró un poco confusa y contuvo la risa.

- Pues... no, no se. Además tampoco tuve tiempo de hablarlo con mis padres -dije un poco triste, recordarlos me hacía sentir un poco sola, aunque sé que no es así.

- ¡Oh, Mystery! Amiga mía, estas esperando un... BEBÉ DE BRUCE -dijo gritando de emoción.

Me asusté por si los chicos llegaron a escucharla, y me relaje al ver que no había sido así. Después de decirme eso me abrazó y empecé a llorar de la alegría de un bebé, Stella no pudo aguantar me abrazó también y me felicitó. Ella estaba un poco confusa ya que no sabía muy bien de que hablábamos -les recuerdo que es más pequeña que yo-.

- Tranquila. Ya te contaré más adelante como vienen los bebés, todavía eres muy joven. No debes tener prisa -le dijo Kim. En un susurro me explico como fue que me embarace para que Stella no lo oyera. Entonces lo entendí, y un temor vino a mí mente.

- Debéis prometerme que no le diréis nada a Bruce, ¿de acuerdo? -antes de que contestaran les dije- Si lo averigua no dejará ir en busca de ese tipo.

Ellas se miraron y asintieron.

- De acuerdo. Pero con la condición de que harás lo que te diga, ¿entiendes? -contestó Kim.

- Trato hecho -es la único que pude contestar.

Al rato se acercaron los chicos ya que vieron que me puse en pie.

Antes de levantarme mi amiga me dijo que tengo que cuidar muy bien de mi bebé ya que era esperado por todos. Habíamos estado caminando durante bastante rato y me vino a la memoria lo que me dijo, tenía la duda de aquello, así que hice como que me sentía mal. Todos se pararon y me observaron. Mire a Kim para que entendiera que quería hablar con ella y se acercó a mí.

- Tiene que descansar un poco, yo me quedo con ella. Vayan adelante, ahora lo alcanzamos. ¿Qué te pasa? -me preguntó.

-  Solo... ¿por qué dijiste que mi bebé es esperado por todos?

- ¿Te acuerdas la leyenda que nos contó mi tía, la de las cuatro hermanas en la que una murió?

- Sí, me acerdo -le contesté.

- Pues la paz volverá cuando vuelvan a nacer las nuevas elegidas. Podría ser que una este en camino -ella tocó mi vientre y entendí que quiso decirme, yo también puse mi mano en mi vientre.

Grabé esa información muy dentro de mí mente. Fuimos a alcanzar a los demás.

Sin darnos cuenta había anochecido, así que decidimos pasar la noche en la aldea ala que llegamos.

A la mañana, estando todos listos Draco junto a Kim nos contaron una historia sobre un talismán, mientras caminábamos hacía nuestro destino, la ciudad de los dragones.

¿Qué será ese talismán? ¿Qué hará Bruce cuando se enteré de que Mystery esta embarazada? ¿Quién es ese hombre por el que Mystery quiere ocultar a su bebé? ¿Qué ocurrirá cuando lleguen a la ciudad de los dragones?

Tendrán que esperar al siguiente capítulo para averiguarlo

Nota: la paloma de la imagen simboliza que Mystery ya no guarda ningún rencor en su corazón