Capítulo 5: La segunda prueba

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Al amanecer me desperté asustada y con sudor, vi que ya era de día. Me levanté con cuidado para no desertarlos y pensar con más calma sobre mi ¿sueño?. Iba directa al lago -que encontramos Esperanza y yo la noche anterior para relajarnos de todo lo que había sucedido- para bañarme.
En cuanto llegue en la cascada, había una joven desnuda, de pelo azul claro y unas cicatrices en su espalda dándose un baño.
En ese instante me recordó a mí única amiga de la infancia, del día en que la raptaron delante de mí. No se cómo ni cuándo empecé a llorar, pero fui corriendo hacia ella con la intención de abrazarla, cuando se giro hacia mi dirección... y con un solo movimiento, me envió al suelo.

- ¡Vaya! Parece que no me has olvidado, Destiny, ¿estás preparada para combatir contra mí? -dijo la joven apartándose de la cascada. Recogió sus ropas que estaban apoyadas en una roca cercana y se vistió rápida, como el viento.

Desconcertada me levante, limpiandome las lágrimas que todavía salían de mis ojos. Vino a mí mente un pensamiento: "Es mi amiga Kim y tengo que enfrentarme a ella, es decir, esta es mi prueba. Pero no podré matarla, si eso es lo que tengo que hacer".

Estuve observando los pasos de Kim acercándose a dónde estaba, subí la mirada hasta que llegue a sus ojos, que me transmitían dureza y frialdad.

Tenía ganas de abrazarla y contarle todas las cosas que me habían sucedido, pero en este momento no podía ser.

Kim saco su espada de entre su ropa, empuñandola frente a mí. Me contó que estuvo esperando a que le ayudará en aquel accidente. Me sentí muy triste por no haber podido ayudarla en ese momento, entonces empezó a insultarme y me enfureci.

"Está no es mi amiga, la que yo recordaba" -pensé.

Sin pesarmelo dos veces cogí mi espada, y empezamos la lucha. Estuvimos un buen rato luchando, y paramos por nuestro agotamiento. Más tarde volvimos otra vez y en una estocada que le doy ella pierde su espada. Acorrale a Kim contra un árbol y cuando mi espada estaba cerca de su corazón, me miró a los ojos con comprensión. No entendía que pasaba solo se que al final mi amiga volvió a ser la chica alegre que recordaba, y deje mi espada en el suelo.

Nos abrazamos con cariño y me dio una runa.

Ambas miramos hacía los arbustos de donde había salido yo, de allí salieron mis acompañantes. Miraron con sorpresa a la chica que tenía al lado, ya que estábamos cogidas de la mano como símbolo de nuestra amistad y fuimos hasta ellos.

- Chicos, os presento a una gran amiga. No la veía desde hace mucho tiempo y es la sobrina del rey dragón. Su nombre es... -me paré, porque mi amiga me apretó la mano con la intención de que quería hablar ella y me sonrió.

- Déjame que me presente. Mi nombre es Kim, encantada. Es un placer conocerte por fin "primo" Dimitri y... - dijo mirando a la muchacha que había cogido la mano del chico.

- Esperanza, hermana adoptiva de Destiny y novia de Dimitri, encantada -contesto con una sonrisa tímida y cálida.

En ese momento Kim me miró.

- Vaya... uhhh... Destiny, tenemos que hablar de muchas cosas. ¿Qué tal si nos ponemos al día? -dijo guiñándome un ojo, lo cual me tenso.

- ¡MAGNIFICA IDEA! -gritó Esperanza mirando al chico con tristeza.

Todos volvimos al campamento e hicimos una hoguera. Nos sentamos alrededor de la hoguera y empezamos contando nuestras historias.

- Bueno, ¿quién empieza? -pregunto Kim, mirándonos a todos.

Pensé que nadie diría nada, hasta que la voz de Esperanza dijo:

- Empezaré yo -miraba hacía el fuego como perdida-. Mi nombre verdadero es Stella, conocida en mi pueblo como 'la ladrona' -noto que Dimitri la miraba sorprendido, pero siguió su relato-.
Mi madre era una mujer que cuando me dio a luz, se puso enferma. Mi padre en ese momento no estaba, porque se fue a una misión para el caballero negro. Así que en ese entonces nos cuidó una mujer con el pelo cobrizo como el fuego, ella sanó a mi madre por un tiempo, hasta que tuvo que irse. Pero antes de que se fuera, me dijo que tenía que coger una medicina que ni ella podía pagar. Para recordarme lo que tenía que hacer me lo escribió, yo tendría unos 5 años.
Tiempo después empecé a robar porque no teníamos dinero. Conocí un secreto de mi madre que no sabía, y es que le habían arrebatado a un hijo que al final no era suyo, ya que lo encontró a las afueras de la aldea. En ese instante quise ir en su búsqueda, pero tenía que cuidar y curar a mi madre. De mi padre solo se supo que lo asesino un tipo que dijo ser su hijo, pero no era así. Pasaron años hasta que conocí a Destiny.
Ella me siguió hasta donde vivía, decidió ayudarme a conseguir la medicina que mi madre necesitaba, pero al volver la habían asesinado -termino su relato, aguantando sus lágrimas se acercó al brazo de Dimitri y él respondió abrazándola.

Kim le hizo una pregunta acercándose a ella:

- Supongo que aquella mujer que os ayudó, era la madre de Destiny ¿no? -la chica asintió.

Stella suspiro sin saber que más decir, y entonces el muchacho empezó a decir:

- Bueno, yo no se mucho de mi. Solo que me abandonaron en mitad del bosque, así que no se nada de mis origenes -su mirada era triste.

Ahora era el turno de Kim, así que empezó su historia:

- Aquel día de primavera que me separaron de ti, me taparon la boca para que no gritara y me llevaron a una casa llena de mujeres muy descuidadas y me encerraron en el piso de abajo, con otras chicas más, que parecían desnutridas como si llevaran semanas sin comer. Un par de días después oí como los tres hombres de la casa hablaban de como iban a ganar mucho dinero vendiendonos a otros hombres -les contó como pudo escapar de allí, no sin ayuda de las mujeres que estaban en esa casa porque no querían que siguieran con el tráfico de chicas jóvenes para ganar dinero- y así es como terminó todo ese suceso. Más tarde tuve suerte de encontrarme con una pareja maravillosa que me acogieron como una más en su familia, y después tuvieron hijos que ahora son como mis hermanos. Y también conocí a un chico llamado Draco, que resulta que es amigo de la infancia de un chico de ojos plateados y él sabe muchas cosas de vosotros.

- ¿Y cómo podría saber de nosotros si no nos conoce? -pregunté con confusión.

- En su debido tiempo lo sabrás, amiga -contestó Kim.

Todos me estaban mirando con expectación esperando a oír con atención lo que tendría que decirles, pero decidí que no les contaría nada, así que les dije:

- No tengo ningún secreto que contaros, así que, vamos a seguir andando y a recoger todo sino queréis volver a dormir al fresco. Pronto conoceremos a ese tal Draco.

Seguimos andando hasta llegar al final de este bosque.

- Allí esta mi dulce hogar -dijo una Kim sonriente y a la vez con nostalgia en su voz.

Echaba de menos su antigua vida junto a su tío.

¿Qué se encontrarán en esa aldea? ¿Quién será el chico de los ojos plateados? ¿Qué le pasa a Destiny para no querer revelar sus secretos? ¿Les contará algún día a sus amigos o no? ¿Habrá superado de verdad todo lo que le paso en su infancia Kim?

Nota: la de la imagen sería Kim, la amiga de Mystery / Destiny

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