Tú no me conoces [CORRECCIÓN]

14- Eres un inepto.

-Oh vamos Miley, se que aún no me cuentas algo ¿porque el vestido?-preguntó su hermana frente a ella mirándola fijamente

Volcó los ojos y la miro

-Nada, sigues de insistente como siempre.- miro su reloj 3:38- coño- murmuró- necesito de tu ayuda.

Salieron rápidamente hacia el auto, luego de correr prácticamente, llegaron a un edificio llamado Emnasa un extraño nombre, casi corriendo subieron al ascensor, y llegaron a un apartamento.

Luego de escoger un Jean, una camisa holgada campesina blanca y unas vans negras, era el maquillaje lo que faltaba, un poco de rubor y máscara, hicieron la misma coleta pero con ondas al final del cabello.

-Mierda, me veo bien.- se miró al espejo y miro el reloj 4:30 -Vamos Vamos que no llegó.- apuro a su hermana

Salieron de tal apartamento dirigiéndose al lugar donde ella se estaba quedando.

Al llegar hay estaba él, mirando su reloj de reojo mientras miraba a todos lados recostado a su auto.

-Nos vemos mañana, ya tienes mi numero, me llamas.- sonrio su hermana mientras veía que ella se bajaba del auto y prácticamente corrió hacia el.

-Hola.- lo miro y el alzó su cabeza.

-Pensé... Que no venias.- le sonrió mirándola de abajo arriba.

-Eres un inepto.- volcó los ojos- estuve casi una hora arreglandome y ni un cumplido.- volcó los ojos nuevamente con los brazos cruzados.

-Te vez hermosa.- le sonrió.-¿nos vamos?

Y así pasaron los meses, se encontraban en las tardes, salían a bailar, o se iban a algún lugar, se mudo a el apartamento de su hermana, y se restauro con ella, él, empezaba a sentir algo, pero decidió ignorarlo, era solo un amigo, no había tenido momento para contarle todo, pero en algún momento tenia que ser, y hay se acabaría tal historia.

Ella lo volvía loco, y solo un mes de conocerla, la consideraba las más bella, su ex, Amanda, insistía y insistía, una tarde con Miley, se le apareció de repente, insultándola y haciéndola quedar como una zorra, pero obviamente Miley no se quedo quieta, la revolcó en el pasto dejándola sucia, y gritándole mil veces que más zorra era su madre, y eso era lo que conocía de ella, era divertida y muy simpática, pero solo con quien se lo merecía, sarcástica y odiosa cuando estaba enfadada, y pobre el que se metiera con ella, conoció su hermana, quien era una rubia muy simpática pero mayor que el, y no parecían hermanas, ella no le había contado nada sobre ella, y agradecía que fuera así, el también tendría que contarle todo sobre el, y no se sentía augusto con ella hablando eso.