Pequeños rayos de sol se filtraban por la ventana de la pequeña cabaña que la noche anterior había sido testigo de la muestra de amor de dos amantes; Niall Horan se despertó gracias a esos pequeños destellos de luz, el rubio abrió los ojos topándose con los brazos tatuados y un poco musculosos de su guapo novio, los cuales abrazaban su cuerpo desnudo firmemente evitándole escapar, aunque de todos modos no era algo que planeara hacer, estar en los brazos de aquel muchacho lo hacia sentirse seguro, lo hacia sentirse en casa sobre todo después de aquel hermoso recuerdo de la noche pasada, donde por primera vez había hecho el amor con su guapo amante, que hace solo un par de horas se había convertido de su mejor amigo con algunos beneficios, a su novio, su chico y solo de el; y bueno era lo que mas el anhelaba tener a este chico maravilloso de ojos perfectamente destellantes de color verde y perfecta sonrisa estilo comercia que era adornada y embellecida por dos hermosos hoyuelos que se formaban en sus lindas mejillas, que solo volvían a ese maravilloso chico solo más perfecto.
A veces o la mayor parte del tiempo cuando tenia tiempo para reflexionar, que era poco a decir verdad ya que su agenda estaba infestada de ensayos, conciertos y otros compromisos, se preguntaba como ese chico tan maravilloso de largos cabellos ondulados, había logrado fijarse en alguien tan simple como el, porque no, Niall no era de esos típicos chicos o chicas que se odian a si mismos, no, Niall se sentía cómodo consigo mismo aunque sabia que no tenia nada de especial; si acaso solamente sus ojos azules eran lo único que lo hacían sentir un poco especial, de ahí en mas el no tenia unos hermosos hoyuelos en sus mejillas, y quizás su sonrisa no tenia nada de especial, no tenia un bronceado espectacular e incluso teñía su cabello para destacar un poco más, en cambio el...el en pocas palabras era perfecto
-Buenos días- una voz ronca que se filtro en sus oídos interrumpió todo tipo de pensamientos causando un escalofrió que se extendió por toda su columna vertebral, y que ademas le causo una placentera sensación, y que ademas despertó aquellas "mariposas" que se encontraban hospedadas en su estomago dándole un cosquilleo, y bueno todo eso y mas era lo que le provocaba un buenos días, un simple buenos días producida por la voz de el... su ya actual novio.
-Buenos días Harry -susurro alegremente el rizado apretó en un abrazó a su rubio, cerrando los ojos y disfrutando del dulce aroma que Niall emanaba, después lo soltó pasando una de sus manos al rostro del rubio empujando su mejilla un poco para girar su rostro y quedar frente a frente, el oji-verde le sonrió recibiendo un sonrojo y una tímida sonrisa del oji-azul. Harry se inclinó un poco lo suficiente para poder pegar sus labios con los del rubio en un dulce beso mañanero, el mas fresco del día.
–Me alegra que seas tu lo primero que vea al levantar- Harry susurró con una gran sonrisa plasmada en sus labios, y nuevamente juntaron sus labios en un largo beso lleno de miles de sentimientos buenos, un beso que se convirtió en más, que se convirtió en la resurrección de los recuerdos de la noche pasada, un beso que los convirtió en uno nuevamente.
[...]
4 semanas habían pasado desde aquel hermoso encuentro en la linda cabaña en Irlanda, y Niall y Harry o Narry aun no perdían aquella llama de amor, las demostraciones de amor tenían que ser discretas al menos ante la gente por todo eso de los fans, pero no se cansaban fe presumir delante de sus compañeros de banda y todo el equipo de One Direction el amor que se tenían tal era la escena ahorita que en medio del ensayo no paraban de besarse, susurrarse o incluso gritarse cuanto amor sentía el uno por el otro.
A la mitad del ensayo de una de sus canciones del nuevo álbum a Harry se le ocurrió cambiar su parte-I live for you, I long for you, Niall
I've been idolising the light in your eyes, Niall
I live for you, I long for you, Niall
Don't let me go, don't let me go- canto o mas bien grito este ganando que el rubio se sonrojara furiosamente y que Liam y Louis rodarán los ojos divertidos