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3:37 am

El pequeño no paraba de llorar, abrazaba fuertemente a Teddy, nada lograba calmar su llanto.

En la otra habitación Liam se despertó por los llantos de Zayn. Sin pensarlo dos veces el castaño se fue corriendo hacia la habitación del menor.

Cuando abrió la puerta, el azabache estaba llorando, enterrando su cabecita en el peluche. Como si el objeto como si fuera a protejerle de todo.

Liam se acercó a Zayn y lo abrazo fuertemente. El menor comenzó a llorar en su pecho sin separarse del peluche.

-Zy, no llores. Ya estoy aquí, nada te va a pasar.- los truenos siguieron iluminando la habitación cada segundo. La compañia de Liam hizo que Zayn se calme un poco.

-L-Li no me d-dejes.- solloza, el menor prácticamente estaba temblando.- Tengo mucho m-miedo. ¿Dónde e-estabas?

-Digamos que tengo el sueño pesado.- dice mientras acaricia el cabello del menor depositando un tierno beso.- Recuerda que conmigo nunca te va a pasar nada. Ahora vamos a dormir.

-Duerme conmigo, Li.

-No te voy a dejar solo, bebé.

Ambos se acostaron en la cama del menor. Zayn se acurrucó en el pecho de Liam, con teddy en sus brazos y el mayor tomándolo de la cintura.

La lluvia seguía en su misma intensidad. Parece que nunca se detendrendía.

El castaño le susurraba cosas lindas al moreno y cada vez se relajaba. Al final ambos se quedaron dormidos.

~&~

Al día siguiente la lluvia había parado y ambos chicos seguían durmiendo. El primero en despertarse fue Zayn y se dio cuenta de que su mamá y su tía Karen estaban en la puerta de su habitación, ambas con una cámara en sus manos. El moreno no pudo evitar sonrojarse y se escondió en el pecho del mayor sintiendo el flash de una de las cámaras haciendo despertar a Liam.

-¿Zy, que pasa?- interrogó medio dormido.

-Se ven tan tiernos, chicos.- menciono Karen.

-Mamá, por favor. Tenemos sueño.- dice mientras abraza a Zayn de la cintura y tapándose con la manta.- Es muy temprano.

-¿Por que eres aburrido, hijo? Además son las diez y cuarenta de la de la mañana. No van a planear estar todo el día ahí echados.- Menciona Karen con un toco divertido.

Ambas mujeres se fueron dejando a los jóvenes en la cama del menor. Se quedaron echados, sin decir nada, se sentían muy cómodos juntos que no era tan necesario entablar una conversación.

-Li.- mencionó el morocho quien este momento sentía sus mejillas arder.

-Mmm...

-Tenemos que bajar.- dijo y se oculto en el pecho del castaño sacándole una pequeña risa.

Ambos salieron de la cama para vestirse. Liam tuvo que irse al cuarto de huéspedes porque su ropa estaba ahí. El menor se baño y se puso unos jeans blancos, una camiseta de manga larga y un suéter amarillo que le quedaba dos tallas más grande. Tal vez la tormenta había parado pero aun hacia frío.

Bajo las escaleras dando saltitos en cada escalón. Fue a la cocina y Liam y sus padres no estaban ahí supuso que ya se fueron.

-¡Zayn, mi amor!- era su mamá que lo estaba abrazando- Perdonadme por no estar contigo en la noche. Cuando esa tormenta comenzó yo era la más angustiada por ti. Intente llamarte pero era imposible.

Si, su madre sabia de que Zayn le teme a las tormentas y cuando las hay, duerme con su ella.

-Mami, esta bien. Liam estuvo conmigo.- dijo abrazando a su mamá son las mejillas sonrojadas.

L+Z.   |Ziam Palik| Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora