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POV (Punto Opuesto de Vista) Cristina:

Seguir enamorada de la misma persona trece años, ¡vaya que flipo!. Además de que sea tu mejor amigo desde que ambos son unos críos...
Desde los cinco años Abraham y yo entablamos una muy solida amistad en la que ambos no ocultabamos secretos pero, este es mi único secreto oscuro ante él.
Mi único confecionario era Abe. Mis amigas también pero, él era el que más importaba.
Llega un momento en la vida que me cansé de esperar a que la jodida promesa se cumpla.

<<¡Joder tía! ¡Trece malditos años y el chaval no te ha pedido ni una sola cita! ¡Aceptalo de una vez, coño! Él... sólo te quiere como amiga>> pensé.

En ese momento dibujaba algo sin sentido en la hoja del libro de geografía. Una vez que no prestaba atención a la clase no le hace mal a nadie, ¿verdad?
La voz del director salió por los parlantes de todo el instituto diciendo: " Alumnos, queremos informarles que para celebrar el receso escolar por vacaciones de verano realizaremos un baile escolar de fin de clases. Eso es todo".
Automaticamente miré a Abraham y le sonreí. Él se volteó a mirarme y me regaló una de sus hermosas sonrisas.
Tantos recuerdos vinieron a mí. Pero faltaba algo esencial... Abe me tenía que proponer ir con él.

~Flashback~

-Cris...- Abraham y yo éramos unos niños de cinco años sentados en un sofá.
-¿Qué?- respondí.
-Cuando tengamos diecisiete años y nos toque ir a un baile, prometeme que irás conmigo- su mirada era de inocencia, la cual amaba.
-Sí- sonrío-, sólo si prometes besarme cuando me lleves a mi casa.
-Te lo prometo- unimos nuestros meñiques.

~Fin del flashback~

-¡Cristina!- dijo la voz de Jessica, una de mis mejores amigas.
-Dime- sonreí embobada mirandola, apoyando un codo en la mesa y con la mano rascandome la nuca.
-Ya te hemos dicho que tenemos que salir- miré a mi alrededor y noté que no había nadie en el salón. Sólo Abraham con un amigo suyo.
-Oh... el recre...- miré a Abe y me quedé algo así como "tildada".
-Oye Cris, ¿no quieres un pañuelo?- preguntó graciosa Alba.

Jessica y Florencia me levantaron de mi pupitre. Me llevaron fuera de él.
Anduvimos por los pasillos haciendo monerías, ya sabéis, adolescentes.
Hasta que... nos chocamos con Héctor. Mi admirador, está locamente enamorado de mí. No lo soporto, aunque si Abraham no se da prisa sinceramente le daría la oportunidad al pobre. Sufrir por un amor no correspondido no es nada lindo... Lo sufrí trece años coff coff.
Él me llamó y escuché lo que dijo.

-Cris, sé que no te sorprende que tú me gustes, pero quisiera que me des una oportunidad para que compruebes que yo soy para ti- me lo dijo con tanta dulzura que me rompía el corazón decirle que no.

En ese momento mi corazón y mi mente comenzaron a pelear.

Mente: ¡Dile que sí! Vas a quedar como una tonta si no lo aceptas.

Corazón: Pero yo amo a Abraham, quiero que él me ofrezca ir con él.

Mente: Te lo propuso delante de todo el insti... quedarás como una chavala sin corazón.

Corazón: Hay que rechazar con sutileza.

-Héctor, gracias por tu dulce propuesta... pero- noté que los amigos de Abe estaban viendo la estúpida escena- pero, no... espero que el chico que me gusta me invite- sus ojos entristecieron-. Prometo que si él no me lo propone o soy rechazada por él iré contigo.

Me di media vuelta y me fui.
Lo marqué como segundo plato, pero...

<<¡ESTÚPIDA!>>

Sonó la campana para determinar el final del recreo, eso significaba que tendríamos inglés.
Junto a mis tres amigas entramos casi últimas porque nos gustaba entrar últimas.
Cuando entramos vi a Abraham parado frente la pizarra y con algo escrito en ella que decía: " Cris: ¿quieres ir al baile conmigo? Abraham". Mi sonrisa era de oreja a oreja. Flipé de tal manera que no podía creer.

<<Abraham Mateo Chamorro... ¿me está invitando a ir al baile con él?... ¡Abraham Mateo Chamorro me está invitando a ir al baile con él!>> mi yo interior estaba bailando, esto siempre lo soñé desde aquellos preciados cinco años, pero en realidad estaba tratando de estar quieta y no dar pequeños saltitos llenos de euforia.

No me di cuenta hasta que vi a mi alrededor y toda la clase y el teacher (el profesor de inglés) estaba a mi lado.

-Cris- Abe caminó hacia mí apuradamente.
-¿Sí?- imité su acción.
-¿Quieres...?
-In english, please- comentó el teacher, todos rieron, incluyéndonos.
-¿Will you go to the prom with me?- preguntó con timidez, sus ojos lo delataban. Suspiré.
-¡Yes! ¡I want to go to the prom with you!- esas palabras, que para varias personas eran insignificantes, quería gritarlas a todo el mundo.

No aguanté y me abalancé sobre él, rodeé su cuello con mis brazos y lo abracé. Abraham hizo lo mismo conmigo.
Nuestros compañeros aplaudiron y por un segundo olvidé todo lo de mi entorno.

We Do It Old School~ ONESHOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora