con eso que acababa de suceder confirme que tu también sentías algo por mi, pero no lograba entender el porque no nos convenía saber la verdad. Regrese a casa y cancele la comida, me acosté en mi cama y no hice mas que pensar hasta que me venció el sueño.
paso una semana entera sin que tu fueras a verme, tampoco contestabas mis llamadas, ni mis mensajes, desesperada, y ansiosa intente distraerme un rato así que agarre un álbum fotográfico y lo empece a ojear...
El mundo se detuvo junto con mi corazón, en una foto donde tu estabas abrazándome, había una dedicatoria que decía: ''para mi prima favorita, de Ivan''.
Lo entendí todo, y por fin mis memorias contigo surgieron, ese día del accidente iría a tu casa, mas bien dicho la casa de mi ¡tía! días antes te había confesado mis sentimientos, y tu me correspondiste sin dudarlo, sin embargo no discutimos nada mas sobre el tema, y el día en que te olvide planearíamos algo para poder estar juntos.
abrace el álbum, y llore tanto que pensé que mis ojos se secarían. enamorarme de ti 2 veces, eso no era una simple coincidencia para mi, eso significaba que el amor que sentíamos no se podía evitar, y era de lo mas puro y sincero.
el teléfono interrumpió mi melancolía, conteste automáticamente y escuche tu voz algo ronca, la llamada duro muy poco, me dijiste que me querías ver el día siguiente en la playa, si, ese lugar que estos últimos días habías evitado ir.
Al otro día no demore en alistarme, lo primero que encontré en mi closet fue lo que use, y mi cabello lo deje húmedo y sin peinar, todo lo hacia en estado zombie, tenia miedo de que tu ya no quisieras estar conmigo y que con el accidente hubieses cambiado de parecer sobre el estar juntos. Al llegar a la playa te vi a lo lejos y mi piel se estremeció, tu esperaste a que me acercara mas, mi aspecto no era el mejor y por eso creo que te percataste que algo había descubierto, me abrazaste tan fuerte y con tanta desesperación que las lagrimas fueron imposibles de evitar, entonces hablaste...
-No pude alejarme de ti, quería hacerlo aprovechando que no te acordabas de mi, pero te amo demasiado, y al parecer la perdida de memoria no pudo impedir que me dejaras de querer-.
-En este lugar fue donde te confesé lo que sentía ¿verdad? por eso no querías que viniéramos-.
-Temía que recordaras todo, yo quería que ya no me amaras, que tuvieras una relación mas sana y normal, pero no puedo soportarlo, el día que invitaste a tu amigo me mataron los celos, pero sabia que esa era la oportunidad para que te fijaras en otra persona, por eso decidí irme. Esa semana sin verte, me estaba volviendo loco, y solo reforcé mis sentimientos por ti, perdóname por no ser mas fuerte-.
-Y es que no tienes porque pedir perdón, no te das cuenta que lo que menos quiero es encontrar a alguien mas, no creo que pueda existir alguien mas, y lo único que se es que quiero estar contigo, que si nuestro amor pudo superar este obstáculo, superaremos todo, pero juntos siempre-.
Con esos labios temblorosos y húmedos me besaste, fue un beso cálido y tierno, pero logro dejarme sin aliento.
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Memorias de Susan
Romancea su amor no le importa la edad, el sexo o la religión; pero ¿la sangre? ese lazo que los une como familia, ¿sera un obstáculo para su amor?