"SOLO UN SUEÑO".
Estaba caminando en medio de una calle un poco estrecha, a mi derecha y a mi izquierda podían verse diferentes puestos de comida y accesorios para el cabello.
Seguí caminando derecho, alce mi mirada al cielo y pude ver que encima de una colina estaba un castillo enorme, hecho de piedra con un puente levadizo; me dije a mi misma que como fuera tenia que entrar a ese castillo pero, me quedaba muy lejos entonces desee estar en frente de ese castillo, cerré los ojos y al abrirlos vi que estaba en frente de ese castillo pero, alrededor del castillo había una fosa con agua, cerré mis ojos una vez mas y al abrirlos estaba del otro lado de la fosa con agua así que, cruce corriendo el puente levadizo y llegue en frente de la puerta del castillo, toque la puerta haciendo un poco de ruido y al hacerlo se abrió la puerta.
Entre caminando muy despacio, me detuve y mire a mi alrededor; las paredes, el techo, los pilares, los ventanales, el piso, todo tenia detalles aunque lo que mas llamo mi atención fueron los tronos tallados en oro al fondo de la habitación que supuse eran del rey y la reina. De repente, escuche pasos, no quería que me encontraran ahí así que di media vuelta en dirección a la puerta de entrada pero esta se cerro de golpe; lo único que pude hacer fue esperar inmóvil hasta que llegara el dueño de los pasos.
Los pasos se se iban haciendo cada vez mas audibles y me pregunte de quien serian, me di cuenta que venían del lado derecho de la habitación, así que espere pacientemente hasta que pude ver a un chico delgado, con cabello castaño ondulado, de tez morena y de ojos verdes. Inmediatamente supe que era el príncipe por la ropa que llevaba, se volteo y se me quedo mirando, lo único que pude pensar fue que sus ojos eran hermosos, creo que el también pensó lo mismo porque se fue acercando sin apartar la vista de mi, instintivamente retrocedí un paso, con un movimiento rápido me tomo de las manos y dijo:
-Me llamo Seigi,dándome la sonrisa mas dulce que haya visto jamas, ¿Y tu?
-¿Disculpa? Es que no escuche. Me sentía un poco apenada de preguntarle pero, me fije tanto en sus hermosos ojos que no pude escuchar lo ultimo que dijo.
-¿Cual es tu nombre?, otra vez me sonrió, por un momento creí que no me iba a salir la voz pero, al final pude contestarle:
-Serena, al tiempo que intentaba devolverle una sonrisa. No creo que mi sonrisa fuera tan dulce como la suya pero senti que le tenía qué devolver una, ya que el me había regalado una.
Y, despues sin que me diera tiempo a reaccionar, me beso. Nunca antes me habian besado pero, senti todo lo que dicen que se siente cuando te dan un beso ( senti mariposas en el estomago, el tiempo se detuvo, lo único que se podia oir eran nuestras respiraciones hasta llegue a ver fuegos artificiales y escuchar campanas).
Despues de un momento que duro una eternidad, separo sus labios de los mios y me volvio a mirar con esa sonrisa tan dulce y yo le sonrei también.
Me desperte, y desee con todo mi ser poder conocerlo aunque sabía había sido solo un sueño.