NUEVO HOGAR, NUEVA VIDA

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Voy de corrida esquivando toda una multitud de gente, "¿Qué demonios hago aquí?" "¿Por qué hay tanta gente?", el temor recorre todo mi cuerpo con un terrible escalofrió que hace vibrar mis venas comenzando por mi cuello y terminando un poco más abajo de mi pantorrilla izquierda, la gente se amontona en jaurías, hay gritos desgarradores, escalofriantes chirridos, y una que otra persona en el suelo; voy mirando hacia abajo para procurar no pisar a nadie, levanto mi cabeza y miro hacia los lados, un grupo de gigantes "esteroides con patas" forman una clase de circulo rodeándome, empujando a todo el que se atreva a acercar; mi ropa está completamente bañada en sudor, llevo puesta una camisa color blanca (gris con toda la humedad producida por el sudor), unos blue Jean ordinarios y una gorra negra, también llevo atados unos cables a mi oreja, los cuales se conectan a un pequeño micrófono atado con cinta color piel en mi mejilla derecha casi tocándome el labio, los cables bajan por mi torso hasta quedar en mi cintura, donde hay una especie de grabadora atada a un cinturón de tela ("¿Por qué demonios llevo puesta esta mierda?"); es media noche, pero el calor que hace es sofocante, y con toda esa gente rodeándome, siento que voy a estallar; la gente se amontona intentando tocarme (¿Por qué demonios alguien querría tocarme?), tomarme alguna foto o incluso besarme "¿Qué demonios quiere esta gente? ¿Por qué carajos me rodean? ¿A dónde demonios me llevan estos gorilas?"; Alzo la mirada y diviso carteles colgados en todas las esquinas en los cuales está escrito mi nombre ("¿Qué carajos pasa aquí?"), con un letrero muy grande el cual dice claramente "GRAN CONCIERTO"; los gorilas se detienen de golpe logrando esquivar a toda la multitud junto a un gran coliseo, al entrar, observo mucha gente preocupada quienes al verme lanzan plegarias y grandes agradecimientos al cielo, me visten, maquillan y preparan para el concierto, unos tipos muy preocupados me dirigen al escenario y me dan algunas indicaciones, al salir soy cegado (sarcásticamente hablando) por las brillantes luces del escenario, por los flashes de las cámaras y soy ensordecido por el ruido de la multitud, al llegar al centro del escenario la multitud de gente comienza a gritar en coro mi nombre.


-Jasón


- Jasón. -Gritan todos en coro.


-Arriba Jasón


-Despierta. - ¿Qué? ¿Por qué quieren que despierte?


Se torna a una voz muy familiar y más clara.


- ¡Despierta con un demonio! Se hará tarde para ir a tu primer de clases. - Dice mamá agitando fuertemente sus dos brazos en el aire.


Dos semanas de estar aquí, y el primer día en el cual tengo que madrugar se me va a hacer eterno.


-Mierda, mami, estaba dando un concierto. -Digo sin poder creer que todo fue un sueño.


-El único concierto que vas a dar estará compuesto de chillidos de nena, si no me haces caso ahora ¡Y te levantas de la puta cama!- Grita agitando una sandalia en la mano.


-Tranquila madre, ya me baño, olvidaba lo emocionado que ando por entrar a estudiar. -Digo sarcásticamente.


Me levanto de un brinco de la cama mientras mi madre sale de la habitación balbuceando algo sobre mi crianza y la importancia de ser puntual; me dirijo al ordenador y lo enciendo, mientras voy alistando la ropa, observo en el closet, saco un jersey negro, mi color favorito, y unos vaqueros negros, reviso mis zapatos, y las veo, las jodidas Jordán negras con toques azules que me dieron de navidad no me quedaran nada mal con esta ropa, hace un poco de frio así que saco mi beisbolera color blanco con líneas azules de los yankees de New York (espero no haga calor más tarde), esa es mi favorita y odiara tener que llenar mi maletín con la beisbolera; el ordenador, emite un ruido indicando que ya ha encendido, cojo el puntero y lo muevo hacia el reproductor musical, lo oprimo y aparece toda mi lista musical, pongo algo de Kanye West, a todo volumen para bañarme agradablemente (una vieja costumbre), me quito la pantaloneta de dormir, y salgo de la habitación envuelto en una toalla, entro al baño del pasillo, me cepillo mi retorcida dentadura y me bajo la toalla, miro mi asqueroso cuerpo en el espejo, mi blanca y pálida cara tiene un par de bolsas negras debajo de cada uno de mis ojos, se ve afectada por uno o dos granos en los pómulos y la frente, y en mi barbilla, se ajuntan unos doce o trece de esos, donde apenas sale uno que otro pelo de barba solitario, observo mis cejas bien delineadas (muchos preguntan si me las arreglo con cuchilla, pero yo jamás lo hago, ni lo pienso hacer), y mis ojos color marrón oscuro, el iris de mi ojos está rodeado por una mancha amarilla y líneas rojas (parezco drogado), miro mi cuerpo de arriba hacia abajo con vergüenza, observo mis largos brazos los cuales parecen un par de palos de bambú con dos pinzas al final llamadas manos, miro mi delgado torso, donde en vez de verse una fuerte masa muscular, se ven un par de costillas asomadas, mis delgadas piernas que no ayudan nada en mi aspecto físico, esas dos son mis grandes vergüenzas por eso siempre uso pantalón largo, y por ultimo regreso a mi pelo largo y esponjoso, el cual medio tapa mis orejas y se levante en forma de ola por mi frente, hay esta mi cara de mujer y cuerpo de enfermo, no me enorgullece tenerlo, pero fue el que me toco. Entro a bañarme mientras balbuceo lo poco que se dé la canción Black Skinhead que retumba fuertemente en la casa, ya imagino a mi madre gritándome que apague esa "música del demonio".

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⏰ Última actualización: Jan 21, 2016 ⏰

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