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Rotaro intercambios, la página de internet que me cambio la vida.

Y la página por la que estoy aquí, en el aeropuerto de Rusia.

Se supone que mi "familia" de acogida (unos locos que me quieren en su casa un año) tendrían que estar aquí.

Pero al final de cuentas ¿Como se supone que sepa quienes son?

Me dedico a observar la multitud, en busca de alguien sonriente saludando, ya sabes, como en las películas, con una cartulina súper bonita con mi nombre que después guardaría en mi caja de recuerdos, miro al cielo imaginándomela.

Luego camino un poco con mi equipaje y me siento en una de las sillas del aeropuerto.

Vaya que se les hizo tarde.

Miro angustiada a mi alrededor cuestionandome si rotaro era una pagina confiable.

Si me secuestran que haría yo sola aquí, del otro lado del mundo.
Las imágenes en mi cabeza me perturban y hago uso del Wi-Fi para buscar el número del consulado mexicano en Rusia, también la dirección y como llegar pasó a pasó con google maps, tomo captura de todo por si me pierdo en un lugar sin Wi-Fi, no vaya a ser.

Espero una hora mas, dos, gente llega y gente se va, arrastrando maletas, felices por una llegada o trágicamente tristes por una ida.

Me hace recordar a mi familia.
El: ¿Porque no quieres estar con tu propia familia? De mi madre, nunca entendiendo mi espíritu aventurero.

Miro el reloj una vez más y lo sincronizó con el reloj de la pared, lo bueno de los números es que no cambian en ningún país y el reloj analógico sobre el mostrador es igual de entendible aquí y en México.

Cuando finalmente no puedo esperar voy al mostrador de información.

-Hola- le digo en inglés.

-Hola- me contesta también en inglés.

-Disculpe, estoy esperando a unas personas por parte de rotaro intercambios y...- iba a proseguir pero la señorita me interrumpió.

-No diga mas, la llevan esperando dos horas por allá.- me señala con los ojos el lugar, a tres bancas de mi, miro a un hombre muy malacariento y una mujer igual, con un niño pequeño sorprendentemente igual de malacariento.

¿Que pasa? ¿Que nadie es feliz aquí o que? ¿Siempre estuvieron allí? No se quien es mas estúpido ellos o yo.

Camino segura asta ellos, no hay lugar para titubeos ahora, ya estoy aquí.

Me planto enfrente de ellos con una sonrisa, ellos me miran enojados, serios o puedo decir que hasta ofendidos.

¿Que demonios esta pasando? ¿Ya les caí mal? ¡Ni he hablado!

-Hola.- les dije en inglés, ya no especificaré esto, creo que es obvio.

-Hola.- me contesto el hombre mayor, con la cara mas seria que miré jamás.

¿Me perdí de algo? ¿Porque no me quieren? ¡Quieranme!

Vuelvo a sonreirles, está vez haciendo contacto visual con el niño, sus ojos sonríen pero el no.

Extrañada extiendo la mano asía el señor que me imaginó es el padre de la familia Korsakov.

Correspondió a mi saludo pero me apretó con una fuerza de mil tractores asesinos.

No mame ¡Sueltemeeeeeeee!

Hubiese querido gritarle eso pero me contuve y fingí que me rompían los huesos de la mano a diario.

Yo en RUSIA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora