Bebé a Bordo (Yewook - Mpreg)

CAPITULO #1

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- ¿Libro de estructuras clásicas? ¡listo! ¿De estructuras modernas? ¡listo!,  ¿lápices carboncillo?¡listo! Pero - miro a su alrededor - ¿Donde están la caja de 150 colores?  - se pregunto- ¡Claro está en la gaveta grande! ¿ Y el libro de tendencias y estilos?, ese no sé donde lo deje.

Un chico de estatura baja, cabellos castaños, ojos hermosos, piel suave y blanca de unos 21 años, corría de un lado a otro en su pequeño departamento, buscando los materiales que necesitaba, para las clases de la universidad. Estaba en segundo año de la carrera de diseño de interiores, era uno de los 5 alumnos promedios de su promoción, recientemente se había independizado y se había mudado de la casa de su padres para comenzar a vivir solo, por eso se le hacía difícil encontrar sus cosas, todavía había cajas por todos lados y se le estaba haciendo tarde para las clases, pero todavía le faltaba algunas cosas, y con las cosas desordenas no podía apurarse, odia el desorden pero la mudanza no era cosa fácil.

- ¡LO ENCONTRÉ!  - gritaba el chico hacia la nada - Y ahora - vio parte de su departamento-  ¿Donde fue que deje mi taza de café y mi horario? 

Se levantaba del piso y buscaba sus demás objetos, se lo veía entrar a su dormitorio, con nada y salía por la otra puerta que conectaba el baño al pasillo  con dos libros en un brazo y en el otro su taza de café. Tomándolo lo más rápido posible, terminándolo y dejando en el lavaplatos.

- ¿Algo me falta?- se rascaba la cabeza mientras pensaba.- ¡¡CLARO!! ¡¡MI PORTAFOLIO!! eso no se me puede estar quedando.-

Salió corriendo a su armario donde sabía que se encontraba su querido portafolio con todo sus diseños, desde el primero hasta el último. Volvía de manera eficaz a guardarlo en el bolso de lado donde tenía todo sus libros que necesitaba. Lo terminaba de cerrar y como siempre no todo es perfecto cuando uno anda de apuro. 

Sonó su celular y corrió a verlo.

- Papá - saludo - Buenos días, cuéntame ¿que pasa?- el joven hablaba con tranquilidad pero con toque de apuro.

- Mi pequeño ¿como amaneciste? ¿Ya desayunaste? ¿pudiste dormir bien? ¿llevas todo para la Universidad?.

- ¿Qué? - alejo un poco su celular para regresarlo a su oreja - Papa, si ya hice todo eso, gracias por preguntar pero no entiendo porque me lo preguntas justo ahorita, tu sabes que a esta hora, no puedo ni pensar en respirar.- decía muy apurado mientras buscaba las llaves de la casa.

- ¡HIJO REGRESA A CASA! ¡ AQUÍ TIENES TODO!.- lloriqueaba su padre desde la otra línea.

- Papá ya hablamos de esto, no hay vuelta atrás, los iré a ver los fines de semana.

- Pero no lo comprendo, dime ¿ en que te falle? - era el drama a primera hora -  Para que te vayas de mi lado.- a veces su padre podía ser sentimental cuando se trataba de su pequeño.

- ¡Yah! ¡Siwon-Shi! deja de llamar al niño para torturarlo- gritaba su omma , en la otra línea, y se pudo claramente oír como le quitaba el teléfono a su appa para hablar con el.

- ¡Wookie!  ¡Mi bebe! no le hagas caso al loco de tu padre - admitía que los extrañaba un poco -  Solo no te olvides de alimentarte bien después no quiero verte todo desnutrido y feo, yo no te cuide en cuna de oro por gusto.

- Hee, ¿como le puedes decir eso al pequeño?  el Señor dice que el hijo debe honrar a padre y madre y mudándose de la casa está dañando mi corazón - negué a lo escuchaba en linea - ¡ Me está deshonrando con eso! -  le causaba gracias, si es verdad pero todavía el reloj corría y el no salía del apartamento.

- ¡Qué Señor ni que nada!  el bebé solo quiso independizarse y cuidarse por sí solo y sigues con eso te vas despidiendo de esta octava belleza del mundo, porque te pido el divorcio.- el ego de la Omma de Wookie era demasiado alto.

- Pero Hee escúchame o pásame a Ryewook para leerle un proverbio...- solo tenía 2 días de haberse mudado, y el drama de sus padres era de reality.

- Omma y Appa los amo demasiado pero los llamo en la noche, se me hace tarde para la universidad, se cuidan, besos ¡chao!-

Y sin dejar hablar a sus padres cerro el celular, lo guardo en su pantalón, corrió hacia la mesa para coger su bolso, paso por el espejo para arreglase un poco su cabello, y salió del apartamento,a buscar la metro que lo llevaba.