Capitulo 12

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Entramos a mi habitación besándonos y tirando cosas en el camino a la cama, como lo dijo Scott fue muy fácil de convencer a la chica de venir a mi hotel, nos besábamos muy apasionadamente, le quite la blusa y ella mientras me desabrochaba mi pantalón y pasaba sus manos por mi miembro, agarré sus muslos y la cargué, ya en la cama me quite el pantalón.

Yo estaba enzima de ella, me quitó la camisa y yo le quite el sostén y empecé a besar sus pechos y luego su vientre hasta que tope con sus bragas, ella me miró encantada y yo se las quite, abrí sus piernas y metí dos dedos adentro de ella, ella gemía y ente sus gemidos me decía "No te detengas" y entre más hablara y gemía mi miembro se ponía más duro. Yo saque los dos dedos, y ella se paró de rodillas, me agarró del cuello y me tiro a la cama con ella enzima de mi, me quito mi bóxer y mi miembro salió disparado y se sorprendió y me sonrió, lo tomó en sus manos, empezó hacer movimientos de arriba hacia abajo muy rápidos. Yo cerraba los ojos de puro placer, voy a explotar. No quería que parara pero ya quería estar adentro de ella.

Cambiamos, ahora yo estaba arriba de ella, la volví a besar y entre en ella, ambos  gemimos. Empecé lento, disfrutaba verla, ver su linda cara, sus gestos, sus ojos, todo. Y después, ella estaba arriba de mi, dándome el mejor sexo en toda mi vida, ¡Dios esta chica si sabe cómo moverse! Poco a poco íbamos más rápido, gemíamos, gritábamos, nos besábamos, cerrábamos los ojos por puro placer.

-Ya no... aguanto- dijo jadeando, y sentí sus uñas recorriéndome la espalda.

-Solo un poco más nena- gruñí

Entramos al orgasmo, ella gemía más fuerte, iba a explotar, así que me deje venir en ella. Ambos terminamos jadeando y sudados. Los dos nos mirábamos a los ojos, pero yo empecé a examinar su cara, ella se veía hermosa, en su frente había gotas de sudor, y tenía las mejillas rosadas, su boca estaba entre abierta inhalando aire, y volví a sus hermosos ojos verdes azulados, le di un pequeño beso en los labios, la abracé y cerré mis ojos.

[...]

Cuando ella se fue esta mañana, me sentí mal, ella no recodaba nada y yo me porté como un idiota. Espero volverla a ver algún día.

En la actualidad.
Narra Allison:

Despertaba poco a poco y lo primero que vi cuando abrí mis ojos fue la cara de Martin muy cerca de la mía. Creo que estaba en el hospital.

-Martin...- dije casi en un susurro

-Allison...

Sus ojos eran lindos, tenían un color único. Me gustaban mucho, ojalá que mi bebé tenga los ojos de su papá.

-¿Qué me pasó?- dije y me toqué mi vientre- ¿El bebé está bien?

Me intente levantar pero Martin lo impidió.

-Todavía no lo hagas, debes de estar en reposo. Si, nuestro bebé está bien, solo te desmayaste.

-¿Qué pasó con Rachel? ¿Ella está bien?

-Ella... creo que esta afuera, tratando de comprender lo que pasa.

El camino a casa fue silencioso, yo miraba por la ventana y veía lo hermoso que era Ámsterdam, tal vez mañana vaya a recorrer un poco la cuidad y mandarle fotos a Susan.

Llegamos a casa y Martin me guió a lo que sería mi nuevo cuarto. Estaba amplio, nada comparado con el de mi departamento que muy apenas podías caminar.

-Gracias, por todo Martin- le dedique una pequeña sonrisa.

-No me agradezcas, por cierto mañana podemos ir a comprar ropa para ti, aquí hace un poco de frío, nada comparado con Miami.

-Ah no lo sé, es que es mucho lo que estás haciendo por mi y...- me acarició la mejilla.

-El bebé y tú ya son como parte de mi vida... déjame consentirlos un poco.

Sentí mis mejillas arder, no pienses mal Allison el solo se porta así por qué tú estás esperando un bebé de el- dijo mi subconsciente. Me dijo que soy parte de su vida, algo que nadie me había dicho jamás, creo que Martin me empieza a gustar...

-Martin...- el y su maldita costumbre de mirarme fijamente a mis ojos- necesito descansar un poco.

Si era enserio lo de descansar, yo debería de estar dormida a estas horas, bueno si estuviera en Miami, pero estoy en Ámsterdam y aquí apenas está comenzando el día.

-Esta bien, si se te ofrece algo solo avísame ¿De acuerdo? Descansa Allison.

A pesar de que Martin sabía que Rachel estaba en la planta de abajo, no le importo y me dio un beso en la mejilla y yo me sentía avergonzada y sentía que otra vez me iba a desmayar. Solo le sonreí y entre a mi cuarto. Y las dudas ya estaban a flote en mi cabeza.

¿En realidad me gusta Martin? ¿O solo sentía un cariño hacia el? ¿Está bien que él me guste?  ¿Qué pasará con Rachel?

*•*
¡Hola hermosas lectoras! Antes de todo quiero agradecerles por el apoyo que ah tenido esta novela ya son 1k!!! Siiii fiesta en mi casaaaa! GRACIASSS! Las adorooooo!
No olviden votar y comentar. Y bueno ¿Cuál es su canción favorita? La mía es Tremor y también Gold Skies. Ah otra cosa, ¿Les gustaría un maratón?

-M

|Algo Tan Inesperado| (Martin Garrix)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora