ø BY MISTAKE ø larry

ø Un juego de dos ø

Harry bufó, volviendo a la mesa antes que Louis, olvidando por completo sus mejillas sonrosadas y su pene erguido.

"Oh" dijo su mujer, sobresaltada, al verlo, cubriéndose la boca. Ella era como una maldita señora de una película de antes mezclada con la protagonista de 'Una rubia muy legal' "Cariño" agregó, señalando a la entrepierna del de rizos.

Él miró hacia abajo y, al hacer contacto con su pantalón elevado, se sentó rápidamente, encogiéndose de hombros. "Supongo que cuando me limpié el vino refregué demasiado jaja" Estaba tan jodidamente nervioso que cualquiera que viese la escena se burlaría sin parar.

A los pocos segundos, Lou volvió, dejándose caer delicadamente sobre la silla, haciendo la de pijo para caerle mejor a la esposa de su amante.

O al menos, eso le gustaba pensar que Harry era, o que sería pronto.

Porque sí, Louis Tomlinson obtiene todo lo que quiere.

Y, en ese preciso instante, quería jugar con Harry.

Por debajo del largo mantel a cuadros, el brazo del castaño se extendió hasta donde la erección del de cabellos color chocolate todavía no cesaba. Con dedos traviesos y expertos, presionó y jugueteó con la zona, obteniendo primero dos ojos exageradamente abiertos por parte de su compañero.

Pero luego, obtuvo una sonrisa de lado.

Eso significaba solo dos cosas.

La primera, lo estaba disfrutando. La segunda, ya no tendría que jugar solo, ya que al parecer Hazz comenzaba a entender lo divertido y excitante que podía ser el sexo, o más bien el toqueteo, a escondidas.

Pensando en cómo satisfacer él también un poco a L, no se dio cuenta de controlarse, y un hondo ronquido rasgó ásperamente su garganta, haciendo que Kendall levantara la cabeza.

"L-lo siento, e-era una mosca molestán-dome" habló pausado, haciendo un ademán con la mano como si espantase algo que en realidad no estaba allí.

"Estás muy raro el día de hoy" concluyó la morocha, secándose la boca con una servilleta de tela y levantándose, mientras se estiraba para agarrar el plato de los dos muchachos.

En un movimiento fugaz e imperceptible, los dedos de Harry apretaron fuertemente el brazo de Louis, en señal del miedo que sentía por el acercamiento de la chica, que podía verlos.

Sin embargo, ella no lo notó, y solo se desvió hacia el área de las hornallas.

Cuando estaba fuera de la vista de ambos, Harry gruñó hacia Louis, y esté apretó fuertemente lo que tenía entre sus manos en respuesta.

Harto de no ser el dominante, Styles acercó al chico a él, tomándolo por el trasero en un movimiento calculado, casi tirándolo de su silla.

"¿Qué fue eso?" preguntó la dama, desde donde estaba.

"Nada." Respondieron al unísono ambos hombres, sentándose rectos y sonrientes, como santos y divinos ángeles que ni de casualidad tenían los pensamientos más sucios el uno sobre el otro revoloteando en sus neuronas.

Cuando Kendall volvió, Louis se paró repentinamente, y miró hacia el que estaba a su lado "Gracias, sería genial si me dieses tu celular para que así pueda llamar un taxi, de paso te agendaré mi número así se lo das a Keni" inventó una mentira en cuestión de segundos, y la llamó por su viejo apodo, como el inteligente chupamedias que es.

Harry, agarrando en el aire la indirecta que los ojos del otro enviaron, le tendió el teléfono con su mano temblando por las fricciones anteriores.

Al final del día, Louis tenía una antigua amiga devuelta y un nuevo títere con que divertirse, mientras que lo único que tenía Harry era una mujer que lo reprendió por tener una erección mientras tenían visitas y un nuevo contacto en su celular con el nombre "Amante <3".