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26 de enero del 2016.
Querido diario,
Hoy no tenía ninguna esperanza de que fuese un gran día. Son fechas marcadas y pensaba tener a gente de mi alrededor apoyándome, pero me equivoqué. No sé como no aprendo aún, sigo esperando gestos o simplemente palabras de los demás cuando sé de sobra que si no lo han hecho ya, no lo van a hacer en un futuro.
Claro yo soy la chica que siempre tiene esperanzas para todo, y tenia esperanzas de qué por lo menos me preguntaran un "¿qué tal hoy?". Pero ya he aprendido, y te lo prometo diario, que no se puede esperar nada de nadie, porque siempre vas a acabar dándote en las narices. La gente es así, algo que a ellos no le incumbe, cosa que no hago caso. Ya no es solo eso, es que aparte de ni siquiera preguntar o ayudarte al verte que estás mal, porque eso se nota, te cuentan sus "problemas" cuando tú ni siquiera has preguntado, pero tu los escuchas e intentas ayudar. Pero ¿esto para qué? Si luego van a seguir pasando de tí y siendo egoístas en cuanto a sentimientos.
Total amigo, qué creo que ha llegado la hora de dejar de ser Helena, la chica que tenía esperanzas siempre, y se Helena, la chica que vive la realidad.
Bueno diario, me despido hoy aquí, pero antes me gustaría preguntarte algo. Si te sientes decepcionado por alguien al sentir que te han engañado, ¿te comportarías de la misma manera con ese alguien?

¿Que hay, querido diario?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora