La mañana es muy fría, quiero levantarme y tomar una buena taza de café o de té, pero Dallas está aferrado a mi cintura con su brazo y él es realmente fuerte, no quiero despertarlo... Se ve tan lindo, parece un niño pequeño, aún tiene el ojo morado, la hinchazón ha bajado y se ve mejor de como estaba; me pregunto si sus padres le dirían algo.
—Dallas —susurro en su oído—. Despierta, tengo que desayunar
-No te vayas, Hana -aprieta los ojos-. No me dejes nunca
¿Hana? Siento una punzada en el pecho, Dallas sigue atormentado con el recuerdo de Hana, ¿Qué diablos le hizo esa maldita perra a mi amigo? El pobre la llama hasta en sus sueños... Probablemente, aún después de tanto tiempo, creo que él no está listo para tener otra novia, pero no puede estar sufriendo por una maldita que lo abandonó, él siempre está ahí para mí, no puedo dejarlo ahora.
-acaricio su pelo y beso su frente-. Te amo, Dallas
-Yo a ti, Hana -contesta.
Él abre los ojos poco a poco y cuando me ve frunce el ceño, quizás también esperaba ver a Hana pero no soy ella. -obviamente-
-¿Dormimos juntos, toda la noche? -pregunta.
-La noche no, la madrugada... Me abrazaste todo el tiempo y no podía levantarme... También me llamaste -trago saliva antes de decir-. Hana
-Perdón, Jamye...
-Descuida, no pasa nada -sonrío-. ¿Cómo sigue tu ojo?
-Un poco mejor, ya casi no me duele cuando me río
-Todo es culpa mía, lo siento
Me acerco a él y beso el párpado lastimado, Dallas se remueve un poco, aún le duele.
Él no me dice nada, simplemente se queda callado y vaga entre sus pensamientos, mira hacía la pared de enfrente, donde está mi armario y mi tocador, pero sin decir palabra alguna. Maldición, a veces quisiera tener telepatía y saber que es lo que la gente piensa, aunque quizás me llevaría muchas sorpresas con lo que la gente piensa.
Decido romper el silencio:
-¿Quieres levantarte ya? -pregunto.
Frunce el ceño y se queda mirando a la nada, como hace unos segundos, niega con la cabeza y me contesta:
-Estemos así un rato más -besa mi mejilla-. ¿Hace cuanto no dormíamos juntos?
-Ocho años, creo
Creo que Dallas y yo no hemos dormido juntos desde comenzamos a crecer, en casa de sus padres yo tenía mi propia habitación, era la de huéspedes que se había convertido en la mía, pero casi siempre dormía con Dallas, sus padres no decían nada, probablemente por lástima o quizás entendían que necesitaba estar con él, porque lo quería mucho, dormí así con él dos años, hasta que empecé a crecer y él lo hizo también, supongo que sus padres pensaron que ya no era correcto, ya no éramos unos niños.
-James me tendría envidia. -sonríe triunfal-. Pero no puedo decirle, ¿verdad?
-Dallas, sólo dormimos juntos, no tuvimos sexo ni nada parecido, no es la gran cosa
-Pero... ¿Te das cuenta de qué no tengo camisa y así te abracé toda la noche? -me observa con mirada picara y no puedo evitar reír.
-Dios mío, eres... -suspiro-. No encuentro la palabra
-¿Guapo? ¿Encantador? ¿Sexy? ¿Un doctor guapo, encantador y sexy? -suelta una risita-. Soy muy guapo y nadie se resiste a mis encantos
-Eres un idiota, egocéntrico y presumido -lo digo en tono de broma.

ESTÁS LEYENDO
I'm Strong
RomanceCuando era pequeña siempre había creído que mis padres estarían a mi lado eternamente, tenía la idea de que ellos eran una clase de humanos sobre naturales con la capacidad de ser inmortales y que nada les haría daño, también pensaba que puedes ser...