Las años pasan, mis sentimientos no

682 47 4
                                    

Los años pasaban y mi amor por Zed cada día era mayor, el tan solo pensar en acariciar su rostro, verle sonreír o que solamente me mire me hace estremecer. Pero después de tantos años él sigue sin darse cuenta, ahora lo considero como un hermano ya que se crió conmigo y eso lo hacia todo más difícil a mis ojos.

Estábamos en pleno entrenamiento, Zed y yo luchábamos el uno contra el otro para poder demostrar quien era el mejor en las artes ninja pero por mucho que luchásemos el resultando nunca variaba... Empate otra vez.

Los dos caímos al suelo rendidos.

-Ahh... La próxima vez... Te... Ganaré.-me decía dificultosamente Zed mientras tomaba grandes bocanadas de aire.

-Je... Eso no... Te lo crees ni tu.- respondí desafiante.

Me puse en pie y ayude a levantarse a Zed. Nuestras miradas se cruzaron nuevamente, me perdí en esos ojos rojos escarlata y sin darme cuenta Zed se había ido, yo tan solo maldije mi existencia una vez más...¿porque me tuve que enamorar de él?

-Joder...

-Esa lengua, Shen.

Oí decir a Akali desde atrás.

-¿Que quieres ahora Akali? Vienes a contarme otra vez tus fantasías sexuales entre Zed y yo o a reírte porque estoy enamorado y no se confesarme después de ocho años?

-Iba a hacer la primera pero luego he pensado en algo mejor, te ayudaré a que Zed se enamore de ti.

-¿Q-Que? E-Eso es imposible, e-el es un chico.

-¿Y? Oh, venga Shen, siempre estas pensando en él, no puedes dejarlo ir.

-Ya, pero ¿y si...

-Shh no quiero oír mas escusas, conquistarás a Zed y punto.

-Siempre mandoneando.

-Se me da bien. Bien, iré a hablar con Zed a ver si le puedo sacar al de "información"

-Estas loca.

-Si, pero ¿que harías sin tu loca? Jeje

-Ahí tienes razón jaha.

Pude oír la voz de mi padre llamándonos desde el patio de entrenamiento así que fuimos allí lo mas rápido posible. En cuestión de segundos estábamos todos allí.

-Teneis una misión de alta prioridad.-comenzó mi padre.- El templo de las artes prohibidas a sido invadido y están buscando las técnicas que se esconden allí, mas concretamente la técnica prohibida de las sombras. Debéis traer el pergamino sano y salvo.

-¡Si! -dijimos todos al unísono.

Salimos directos hacia aquel templo, no estaba muy lejos pero tardamos un par de minutos.

Al llegar, entramos por la parte de arriba para evitar llamar la atención, avanzamos sigilosamente por todo el templo hasta dar con la sala indicada por el maestro pero como era de esperar, no estábamos solos. Una gran cantidad de ninjas salieron de la nada rodeandonos. Nos agrupamos espalda contra espalda haciendo un circulo y comencé a dar las instrucciones:

-Kennen, ataca a distancia, necesitamos al enemigo bien achicharrado o lejos, tu elijes. Akali, todo lo que intente matarte, acaba con el. Zed, necesito que vallas a por ese pergamino. Yo me ocupo de que aquí no se valla ni uno.

-¡Si!

Zed abandono la formación dirección al pergamino mientras nosotros nos encargábamos de todos esos ninjas.

La batalla fue larga pero salimos triunfantes de esta. A los pocos segundo de terminar con el ultimo de ellos escuchamos un gran grito que mezclaba la desesperación con el dolor y lo primero que me vino a la mente fue... Zed, no había vuelto

-Mierda.

Salí corriendo de donde procedían los gritos cada vez mas fuertes hasta que dimos con la fuente de estos... Era Zed. En el suelo de rodillas agarrando su cabeza, como su le fuese a explotar. Fui a su lado como si mi vida dependiera de ello y comencé a llamarlo una y otra vez sin respuesta, luego lo agarre de los hombros y lo sacudí llamándolo nuevamente hasta que respondió.

-¿S-Shen?

Sin responderle le abracé fuerte como si se fuera a escapar. Notaba como Zed temblaba y comienza a llorar.

-¿Eres tu de verdad?

-Si, venga ya paso todo.

-Todo era... Tan real... Tu, Akali, Kennen...

-Cuentame que te paso

-Conseguí el pergamino, al cojerlo un fuerte dolor me vino a la cabeza, después me empecé a marear...luego vida criaturas inhumanas que se escondían en las sombras de mi alrededor e intentaban dominarme...

-Debemos volver ya, Akali y Kennen deben de estar esperandonos.

-Aun sigo mareado, ¿no puedes esperar un poco, impaciente?

Entonces le ofrecí mi hombro para que se pudiera apoyar y salir de allí.

-Sabes,- empezó a decir Zed- no se como lo haces pero cada vez que vamos a una misión acabas llevándome u ocupándose de mi heridas.

-Eres un impulsivo y, alguien tendrá que cuidar de ti ¿no?

Su reacción fue graciosa, aparto la mirada para que no le vea la cara y se puso bastante nervioso.

-V-Vamonos ya.

-Si

••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆••∆•

Y aquí acaba el segundo capitulo ;)

Me gustaría saber que opinan y no se olviden de compartir con sus amigos fundashis y amigas fujoshis y nos vemos en el próximo capitulo.

Bye-nee 乁( ˙ ω˙乁)

Desde CeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora