Desde Cero

Luna Llena

Me levante del suelo lo más rápido que pude y fuimos raudos hacia los aposentos de mi padre nuevamente. Entramos rápidamente abrumados por aquel estremecedor golpe. Para nuestra sorpresa, nada más entrar vimos a Zed totalmente alejado de mi padre, cerca de una esquina de la habitación llorando de manera sonora mientras mi padre tan solo se mantenía calmado como siempre sentado en el suelo de la habitación.

Fui corriendo hacia Zed pero por desgracia fui detenido por la voz de mi predecesor.

-Shen, no te acerques.

-¡Pero, padre, está llorando! ¡No puedo dejarlo así porque sí!

-Shen, ahora mismo él no es Zed, al menos no el que tu conoces. Está llorando porque la oscuridad le esta carcomiendo por dentro.

-¡Tiene que haber algo, lo que sea, que salve a Zed de las sombras! -exclamó Kennen agitado. Se notaba como al pobre yoddle también le importaba la condición de Zed.- Haremos todo lo que éste a nuestro alcance y más para hacer que vuelva a ser el mismo de siempre.

El silencio inundo la habitación, un silencio total, ya no podía escuchar el sonido de mi propia respiración o los sollozos de Zed... Todo estaba totalmente en silencio hasta que mi padre volvió a hablar.

-Solo existe una manera de que vuelva a ser el de antes, pero no será sencillo ni tampoco hay tiempo por desgracia, las sombras lo consumen demasiado rápido.

-Maestro, déjenos intentarlo.- respondió Akali.-

El silencio volvió, mi padre no respondía a las suplicas de Akali o Kennen, yo... Solo podía mirar a Zed, mi padre tenia razón, las sombras le consumían rápido, podía verlo, sus ojos ya habían perdido el brillo que alumbraba mi vida pero no le dejaría ir... Cualquier cosa menos alejar a Zed de mi vida.

-Debéis recuperar la caja lo antes posible. Esa caja que guardaba el pergamino atrae a las sombras y puede que libere a Zed de estas. Lo único es que no sabemos de su paradero por lo que debéis de estar atentos por si volvéis a ver al ladrón. Mientras, Zed deberá irse al templo de las sombras, allí el poder de estas es menor por lo que tendréis más tiempo para encontrar al ladrón. Sin el pergamino, la caja es inútil por lo que volverá a por el. Lo dejo en vuestras manos.

-¡Si! -dijimos los tres alzando la voz.-

Salimos de la habitación, yo llevaba a la espalda a Zed que se había quedado dormido. Lo llevé a su habitación y le dejé en su cama, es mejor que descanse. Volví con Kennen y Akali, teníamos que preparar un plan para atrapar a aquel bastardo que hizo que le pasara esto a Zed.

-Debemos tenderle una emboscada, si es verdad que va tras el pergamino, no dudará en volver a por el, es por eso que debemos aprovechar esta pequeña ventaja que tenemos .- dijo Akali.- Podríamos poner un pergamino falso como cebo y que el verdadero se quede aquí en el templo con el maestro

-Buena idea Akali. Por ahora será mejor que descansemos, mañana a primera hora saldremos de camino al templo.

Nos separamos, cada uno a su habitación... Todos menos yo. No puedo dejar a Zed solo por eso pasaré la noche con él.

Legué a su habitación y él seguía dormido. Me senté al lado de su cama y miré a Zed triste, todo lo que le estaba pasando... Pude haberlo evitado si tan solo no lo hubiera mandado solo... Nunca me lo perdonaré, no hasta que Zed vuelva a ser el de antes.

Me acomodé en la cama de Zed apoyando mis codos en el colchón y cruzándome de brazos para luego recostar mi cabeza en estos sin dejar de mirar a Zed en ningún momento. Estiré una de mis manos hasta sostener la suya.

-Zed, te prometo que volverás a ser como antes.

De repente noto como Zed se despierta y, para mi sorpresa me tira al suelo, coloca sus manos en mi cuello y empieza a apretar cada vez más fuerte.

-No podrás salvarlo nunca, él nunca volverá a tu lado. Lo abandonaste, tu fuiste quien nos lo entregó y ahora nos pertenece.

Notaba una gran presión en el pecho, ¿iba a morir? Intentaba soltarme de su agarre retorciendome e intentando alejar sus manos de mi cuello pero era demasiado tarde... Mas de repente me sobresalto y despierto en la realidad, ¿todo había sido un sueño? Exhalé fuerte, nada de lo que había pasado era real.

Todavía era de noche, Zed seguía durmiendo plácidamente a diferencia de mí que ya no podía dormir así que salí al patio a que me diera el aire. Me senté bajo la luz de la luna y mirando al cielo me cuestionaba si realmente podía proteger a Zed otra vez. En mi cabeza resonaba una y otra vez una voz que le susurraba cosas como "Todo es por tu culpa", " Volverás a fallar" o incluso "Él será consumido por las sombras, morirá por dentro convirtiéndose en una marioneta y tu tendrás la culpa de todo"

Agaché la cabeza y cerré los ojos, ya he perdido la fe en mi mismo. Escuché pasos acercándose y me giro a ver quien es, Akali. Ella se sienta al lado mío y me mira.

-¿Tu tampoco puedes dormir? -me pregunta.

-He tenido una pesadilla y ahora no paro de darle vueltas a un asunto.

-Si te sientes mejor puedes contármelo.

-Es solo que...-suspire fuerte.- No paro de pensar que todo es culpa mía y que no voy a ser capaz de hacer que Zed vuelva a ser el de antes y protegerlo de amenazas futuras...

Ella empezó a reír, al parecer le hizo gracia lo que dije aunque no lo dije en tono humorístico.

-Eres de lo que no hay. Claro que vas a poder, Zed confía en ti, no le puedes fallar. Tienes que darlo todo por él, por vosotros.

-Gracias, Akali, que haría sin ti...

-Em... ¿No tener novio y estar llorando por las esquinas sin poder decirle a Zed que le quieres?

-Acabas de estropear tu momento de gloria.

-Lo se, pero tu necesitas a Zed más que yo un libro BL.

-¿BL?

-¡Nada, buenas noches Shen!

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Bien, 1 capitulo en menos de un mes xD

Poco a poco, gentecilla, con paciencia xD

Y eso, estos días he estado jugando bastante al Overwatch y se me había olvidado actualizar xD

Lo siento °^°

Bye-nee (^w^)/