Sigo soñando con volar a través de las nubes con alas negras en la espalda, sigo queriendo llegar al país de nunca jamás y al de las maravillas, cruzar el espejo que cruzó Alicia y ver mi reflejo en el que se vio Harry, llegar hasta el centro de la Tierra y lanzarme en un cohete hasta la luna, ser el experimento más humano de un doctor obsesionado por crear vida y ser el fantasma que no pudo asustar a sus inquilinos, sigo queriendo ver extraterrestres caídos de Marte o tal vez combatir bestias mecánicas con runas mágicas, casarme con la descendencia del Santo Grial, tener un mundo en mi espalda y matar a la que convierte en estatua todo lo que ve, quitarme la armadura oxidada y ponerme en la piel del investigador que busca sin cesar el paradero de una mujer, contar la historia de mis bastardos en plena segregación, luchar por mi vida en un mundo de completa desolación y matar al viejo que mató Edgar Allan Poe, investigar el suicidio de mi amada o viajar a Holanda con ella, escribir mis vivencias en el holocausto y crear un tabú como lo hizo el el graduado pero en este mundo lleno de locos, que no se atreven a imaginar, me tocó ser el más cuerdo que aun imaginando tiene los pies en la Tierra.
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A mi musa.
PoesíaLa noche es mi día. Los ojos de quién sea pueden ser mi musa. El escrito mi escape.
