Capítulo 10: ¿Y la ropa?

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PoV Riley.

Salí de casa sin desayunar ya que me había levantado tarde, más bien, super tarde. Ayer había bebido más de la cuenta y no pude dormir bien, claro ahora estoy con un dolor de cabeza horrible.

Por el camino me encontré a James que tenía la misma pinta que yo, parecíamos sacados de la película de Brad Pitt "Guerra Mundial Z".

-¡Dios qué pintas!- Dijo James al verme.

-Gracias, tú también estás muy guapo.

-¿Resaca?

-Sarcasmo.

-¿Qué?

-Cállate.

Llegamos a clase y nos pusieron retraso, pero tardamos más en secretaria, ya que le dijeron a James que llegaba muy tarde y tenía muchos retrasos, claro, como James es muy corto, se entendio que le habían llamado retrasado y estuve como diez minutos para explicarle que no era lo que él pensaba.

-¿Entonces no me ha llamado retrasado?

-Solo dice que tienes retrasos.

-¿Osea que los retrasos  mentales me vienen y se van?

-Eres igual de estupido que Hailey.- Dije subiendo al primer piso.

Al entrar en clase me senté al lado de Hailey y tras mio llego James.

-¿No me podías haber levantado?- Dije.

-Lo intenté pero hacías unos ruidos horribles y me daba miedo entrar.

-Ya.

Al acabar esa clase nos dirigimos a hacer gimnasia.

-Bueno entonces para este ejercicio os voy a clasificar en grupos.- Dijo la profe mirando su libreta.- Balón prisionero, nombres impares contra pares.- Según la lista.

Me tocaba con Chase y otros más contra Hailey y James más la otra mitad de clase.

-Ya.- Dijo la profesora lanzando el balón al aire y yo cojiendo a alguien para cubrirme.

El balón prisionero es una de mis debilidades, más bien, es horrible.

Tras recibir, dos balonazos en la cara, tres en la espalda y uno hecho a propósito por James en mi trasero nos fuimos a los vestuarios a ducharnos.

Odiabamos el sudor por eso tardamos siempre en ducharnos y salíamos casi las últimas.

-Riley ¿Y la ropa?- Dijo  Hailey sacando todo de su taquilla de gimnasia.

-¿Qué?- Abrí mi taquilla y tampoco estaba la ropa.

-¡Mierda!- Grito Hiley y cerró la puerta de su taquilla fuertemente.- Esos imbéciles de los Carter.

-¿Crees que han sido ellos?

-¿Quién más sino?

Salimos de allí con las toallas y descalzas. De un momento a otro el instituto fue invadido por todas las risas, silbidos, groserías y cumplidos de los estudiantes.

Nunca había pasado tanta vergüenza desde que Hailey puso un cubo de pintura en la puerta de clase y al ser la primera en entrar me cayó encima, no fue lo peor eso, sino que tuve que estar de color azul durante una semana, y que había quedado con el chico que me gustaba.

-Madre mía...- Dijo James sonriendo.

-Muérete.- Dijimos Hailey y yo a la vez.

-¿Una foto no?- Dijo Jake sacándonos una foto.

-Para el periódico del instituto.- Soltó Chase.

-Sois insoportables.-Dije y salí de allí super roja.

-¿Riley? ¿Hailey? - Dijo Audrey.- Vamos, tengo algo de ropa.

Fuimos con Audrey que llegó a la taquilla de James y Hailey la abrió. Allí estaba la ropa.

-Me llamo la atención que James metiera uno de mis tops en su taquilla.

-Son unos imbéciles.- Dijo Hailey.

Tomamos la ropa y fuimos a los baños a cambiarnos. Ya movieron su ficha, ahora nos toca a nosotras.

El día siguiente en clase, todos se nos quedaron mirando Hailey lanzó una mirada de muerte y los demás volvieron a lo que estaban haciendo. No hubo ninguna movida más, ese día ni el siguiente hablamos con los Carter y ya se podía decir que empezaba el fin de semana. Primera semana, superada. Creo.

Al llegar a casa vimos a mi madre contenta hablando por telefono, solo habían dos opciones, que Hailey haya conseguido trabajo o la familia que decide celebrar el ochenta y cuarto aniversario de la abuela. Más claro agua.

-Estaremos allí.- Sonrió ella y colgó.- ¡Niñas, nos vamos de compras!

-¿Cumpleaños de la abuela?

-Sí.

Creo que la única parte buena era que nos íbamos de compras, para ir arregladas a la fiesta. Nada más.

Fuimos a comprar la ropa que íbamos a llevar y claro, haciendo un poco la pelota y haciendo promesas que nunca se cumpliran, aprovechamos de sacar algo más de dinero a mamá. No es que tenga mucho dinero, ya que dependemos de un solo sueldo, pero nunca nos ha faltado nada y nos damos algún que otro capricho.

-Mañana a las ocho tenemos que estar listas para ir al pueblo de la abuela.

-¿De la noche?- Dijo Hailey y Audrey le tiró una almohada.

-Mañana. El pueblo está a dos horas niñas.

Al día siguiente, como dicho y escrito está, a las ocho ya estábamos en el coche y apunto de arrancar para ir al pueblo de la abuela.

Lo curioso es que los Miller nos reproducimos como conejos, eso significa que somos una gran familia numerosa, con seis tios, cada uno con su pareja, y cada pareja con dos o tres hijos, menos no; mis primos, y los patriarcas de la familia, los abuelos.

Hello my darlings!!

Avisé que no iba a subir durante un tiempo porque tenia examenes, de hecho ahora tendria que estar estudiando...

La semana que viene vuelven los capítulos con el horario que teniamos antes:) Creo.

¡PoV Riley! Lo deseabais, lo sé.

¡¡Muchas gracias por leer y votar!!

Baaaaaay.

No te metas con las Miller. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora