♧Capitulo 13♧

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Narra Luke:

Nada podía fallar este día. Ya tenía planeado como sería y pasaría todo, con detalles.

Sacudí la cabeza para borrar todos mis pensamientos y me levanté de mi cama. Me fui a dar una gran ducha y luego de eso, dicidí buscar las mejores prendas que tenía para impresionar a Emma.
Me decidí por un polo sin mangas negro, unos pantalones que eran realmente ajustados, y cuando digo REALMENTE AJUSTADOS era porque eran ajustados. Se marcaban mis piernas de pollo, que obviamente eran encantadoras, y por último unos zapatos negros.
Que use negro no significa que sea uno de esos emos infelices, solo que el negro resalta mi belleza.

"Luke tú no necesitas que algo resalte tu belleza... Tú ya eres bello"- dijo mi subconsciente.

Y bueno, mi subconsciente no se equivocaba, la verdad es que soy irresistible.
Vi el reloj, y marcaban las 7:00 am, lo que indicaba que ya era hora de salir. Asó que sin más, salí de casa.

Cuando llegué al punto donde Emma se "supone" que me debía ya estar esperando, vi que no había nadie, así que molesto me recosté en el muro que había ahi.
Nadie hace esperar a Luke Hemmings, estaba furioso por dentro.
Para calmarme un poco decidí chequear mi celular y se me formó una sonrisa en la cara al ver un mensaje de Carly.
Sí, ella era otra de las chicas que estaba loca por mí y que de vez en cuando nos encontrábamos para tener nuestra noche de diversión.

"¿Cuando voy a tu casa otra vez? Muero de ganas por verte."

Estaba a punto de responderle pero sentí que a lo lejos, una sombra se iba acercando y acercando más y más a mi.
Así que volteé disimuladamente y vi una sexy silueta. Era nada más que Emma.
Guardé rápidamente el celular y me paré correctamente y le mostré una sonrisa divertida. Ella la notó y sonrió un poco sonrojada.

-¿Qué tal preciosa?- dije acercándome a ella para darle un beso en la mejilla.

-Bi... bi- titubeó un poco y luego dijo firme pero mostrando una sonrisa- Bien.

Yo sonreí, cogí su mano y entrelacé nuestros dedos y caminamos lentamente hasta ver que ya no estábamos tan lejos de llegar a nuestro destino.
Agh, odiaba esas cursilerías de cogerse la mano, pero qué más da, tenía que hacerlo, era parte del plan.
Oh Luke, el plan. Lo había olvidado por completo y ya íbamos a llegar a la escuela.

Sin más, di un movimiento rápido, que es indescriptible por ser "rápido", y quedé enfrente de ella lo que hizo que ella dejara de caminar.
Me miró un poco sorprendida y alarmada a la vez y pocos segundos después se pudo ver en su rostro, una expresión de tranquilidad. Se acomodó un mechón detrás de la oreja mientras miraba fijamente el suelo un poco sonrojada.
Cuando bajaba esa mano para ponerla en su posición principal la tomé rápidamente y como ya tenía su otra mano entrelazada con la mía no fue necesario tomarla.
Solté por un momento una de sus manos para alzar un poco su rostro y así quedar frente a frente mirándonos y volví a coger su mano.

-Emma- dije mirándola a los ojos- eres una de las chicas más lindas que he conocido en toda mi vida- obvio eso era mentira, puras cursilerías- desde que te conocí, fuiste distinta a las demás, sentí algo distinto por ti- mentira- yo quería saber si tú... -hice una pequeña pausa y solté una de sus manos para rascarme la nuca un poco nervioso, indeciso de decirle o no, tal vez estaba cometiendo un error o quizás no- ¿Quisieras ser mi novia?

Narra Emma:

Cuando salí de casa, lo primero que hice fue ir a casa de Abi, como siempre y luego ir por Luke.

Digamos que en carro el trayecto de mi casa a su casa es más corto que caminando. Sip, definitivamente era un mal día para llevar tacones.

Cuando llegué, toqué la puerta, y para mi sorpresa salió la Sra. Miller.

-Emma, querida, que bueno que estas aquí- dijo regalándome una cálida sonrisa.

-Buenos días Sra. Miller. Venía a buscar a Abi para irnos a la escuela- dije.

-Oh, Abigail amaneció enferma hoy y no puede ir a la escuela. Cuanto lo lamento- dijo ella mirando al suelo.

-No se preocupe, Sra Miller. Espero que se recupere- dije un poco apenada- Si me disculpa, me retiro que se hace tarde para la escuela.

Sin más, me fui alejándome de la casa de los Miller rumbo al punto donde recogía a Luke.
Estaba emocionada por verlo, ver su hermoso y perfecto rostro. Ya quería llegar.
Hasta que a lo lejos vi una rubia y bien peinada melena. Mientras más me acercaba, más lograba divisar quien era. Y sí, era nada más y nada menos que Luke, quien se hallaba recostado en un muro viendo su celular.
Creo que se dio cuenta de mi presencia porque guardó su celular, retomó la postura y se acercaba a mi. Hasta que llegó y me dio un beso en la mejilla.

-¿Qué tal preciosa?- dijo con esa voz tan varonil.

-Bi... bi- titubeé un poco, maldición ¿Por qué mis nervios me tenían que traicionar en este momento? Y yo que creí que lo había superado-Bien- dije finalmente firme.

Sentí cómo una de sus manos cogía la mía y entrelazaba sus dedos y caminábamos lentamente hasta ver que poco a poco nos acercábamos a la escuela.
En ese momento sentí esas típicas "maripositas en el estómago", eso que todas las chicas dicen que sienten cuando están enamoradas... ¿QUÉ? ¿Enamoradas? Yo no puedo estar realmente enamorada de él, yo simplemente creí que era un simple gusto.

 "Que se puede convertir en ENAMORAMIENTO" dijo mi subconsciente.

Pe... pero, pero yo no podía.

 "Emma, ya no te engañes más. Todos sabemos que amas a Luke Hemmings" dijo mi subconsciente de nuevo.

Agh, a veces odiaba taanto a mi subconsiente, por tener la razón.

Bueno, al parecer sí, estoy ena.....

Un movimiento repentino y un poco brusco me sacó de mis pensamientos y me hizo reaccionar.
Estábamos frente a frente, sí, Luke y yo estábamos frente a frente, pero como siempre me siento demasiado nerviosa cuando alguien me mira a los ojos y peor aún si era Luke, así que por instinto supongo yo, miré al suelo y al ver cómo un mechón estaba en mi rostro fastidiándome decidí ponerlo detrás de mi oreja y al poner mi brazo en la posición de antes, sentí que su otra mano libre alzaba mi rostro delicadamente para quedar así frente a frente, mirándolo a los ojos, y por último su mano volvió a sostener la mía.

-Emma- dijo mirándome a los ojos-eres una de las chicas más lindas que he conocido en toda mi vida. Desde que te conocí, fuiste distinta a las demás, sentí algo distinto por ti. Yo quería saber si tú...-hizo una pequeña pausa y soltó una de mis manos para rascarse la nuca y se le notaba un poco nervioso-¿Quisieras ser mi novia?

Al escuchar esa pregunta, tragué saliva fuertemente y sentí cómo todo mi cuerpo, desde mi cabeza hasta mis pies se estremecía...

MISION: Conquistar al Mujeriego.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora