Little Miss Lennon - (John Lennon)

2. Con John + Misteriosa mujer.

21 De Febrero, 1971.

12:37 A.M.

La pequeña Vicky se levantó de la cama con el olor de huevo estrellado y tocino inundando su mente y sus pensamientos.

A ella no le gustaba mucho esa comida pero el hambre la invadía. No comía desde la noche anterior y estaba hambrienta.

Cuando bajó las escaleras mientras se frotaba los ojos, pudo ver a John de espaldas silbando mientras freía los huevos con la tocineta. Cuando él notó su presencia, volteó y le sonrió.

—Oh, hola. Veo que ya has despertado. –Se subió sus lentes de abuela y ella se sentó en el mesón. El adulto le sirvió su comida en el plato y ella, rápidamente, se la devoró. —¿Te gustó?

—Uhum... –Valen asintió mientras tomaba algo de su jugo de naranja. Era su favorito.

—Adivina qué.

—¿Sí? –La niña subió la cabeza.

—Hoy voy a buscar a tus padres, vas a volver con ellos. ¿No es genial?

Vicky de atragantó con la comida a lo que John le dio pequeñas palmaditas en la espalda. Ella no se quería ir, o, por lo menos, no ahora.

No era como si se quisiera quedar por el lujo y las comodidades. Ella, a diferencia de otros niños, era humilde y aunque Lennon hubiera sido pobre, ella habría querido quedarse igualmente. Él la había tratado tan bien... -¿No estás feliz?

—S-sí, lo estoy... –Trató de forzar una sonrisa.

Cuando terminó, le llevó el plato y el vaso de porcelana a John y éste los lavó. Se sentaron en los sillones y John prendió un cigarrillo y se dispuso a mirar los cuadros con nostalgia.

—¿Sabes? –La niña volteó. –Me recuerdas mucho a mi hijo y a mi hijastra.

—¿Dónde están ellos? –Preguntó con suma curiosidad.

—Mi hijo me odia. –Ella abrió los ojos con impresión. ¿Un hijo podía odiar a un padre? —Me perdí gran parte de su infancia por mi trabajo y ahora actúa muy cortante conmigo.

—¿Qué es cortante?

—Cuando tratas antipáticamente a alguien.

—Ah...

-Me divorcié de su mamá cuando él tenía tan sólo 5 años y eso le afectó mucho. Luego tenemos a mi hijastra. Tengo pensado en adoptarla pero la prensa nos acosa a todos lados y entonces ella se está viendo obligada a irse con su papá. –John soltó el humo de su cigarrillo.

—Qué mal...

—Y mi esposa. Hemos intentado tener hijos biológicos pero no ha dado resultado... Aunque nos divertimos intentándolo. –John hizo una mueca "pervertida" a lo que la niña, sin entender nada, rió

—John...

Lennon revisó su agenda y entonces se dio cuenta de que tenía una reunión con sus 3 amigos y se apresuró a bañar a Victoria. Llenó la tina con agua y jabón que hacía mucha espuma y le hechó un tipo de shampoo con enjuague para que no tuvieran que tardar tanto. Se subió la manga de su camisa azul a cuadros que tenía manga larga, para no mojar su camisa, y metió la mitad del brazo dando vueltas para mezclar el agua con los químicos y checar que la temperatura esté bien.

—Me quedaré aquí en la puerta por si acaso te resbalas, te podré sostener. –El adulto se colocó de espaldas en el umbral de la puerta para respetar la privacidad de Vic y entonces ella se bañó lo más rápido que pudo. La envolvió en la toalla de baño que le quedaba muy grande y salieron del baño.

—¿Qué ropa me voy a poner?

El adulto la miró sin saber qué hacer. Tal vez le pondría uno de esos trajes escoceses que se pusieron Julian y Kyoko en su sesión de fotos pero cambió de opinión.

—Te pondrás... Ya sé.

Buscó un abriguito de cuero que Yoko alguna vez había comprado para su hija y que nunca había usado, y unos pantalones púrpura de Julian de su última visita y se los puso.

—Me voy a poner los mismos zapatos de ayer, espera.

La niña fue corriendo escaleras abajo en  búsqueda de sus zapatos deportivos blancos. Se subió en el sillón, limpió sus pies con la palma de su mano, se colocó los zapatos y John se los amarró.

—Vámonos.

John hizo lo mismo de la noche anterior. Ya afuera, tomó de la mano a Valen y así comenzó el paseo.

—¿A dónde vamos?

El adulto le tendió un chicle mientras masticaba el propio y le señaló un lugar.

—Vamos a ir con mis viejos amigos Paul, George y Richard.

Entonces ella quedó pensativa. ¿No iban a ir a buscar a sus padres?

Cuando entraron en la cafetería, The Mike's Coffee, un agradable olor a café con leche inundó el lugar. -¿Qué quieres de comer mientras llegan mis amigos?

Entonces señaló una repisa con refinados pasteles de chocolate, y luego un puesto de café con leche helado. Ella quería algo diferente.

—Quiero esto.

—Está bien. Siéntate aquí y no te muevas de acá por NADA del mundo, ¿Okay?

La niña asintió y se quedó tranquila mirando un aparador.

Entonces, una mujer se acercó.

Esa mujer era blanca, con muchos rasgos asiáticos y su cabello era la digna melena de escoba. Se colocó en cuclillas frente a la niña y llamó su atención dándole pequeñas palmaditas en el hombro.

—¿Hum? –La menor volteó.

—Pequeña, ¿Tú eres la niña que sale en el periódico, a la que sus padres están buscando? –Le mostró un periódico arrugado y la niña abrió mucho los ojos. No se esperaba eso.

—¿Quién es usted?

—Soy la supermujer, niña. –La miró a los ojos. —Me recuerdas mucho a mi hija. ¿Quieres que te lleve con tus padres?

La niña, miró hacia John y dudó un poco, pero al final accedió. Bajó de un saltito la silla y la adulta tomó su mano para dirigirla a la dirección que salía en primera plana.

Cuando John volteó a ver dónde estaba ella, casi gritó.

Vicky no estaba.