Como todas las mañanas desde que estaba sola me encontraba en el Starbucks de la esquina, ya deben pensar que tengo serios problemas con la cafeína pero la verdad, lo hago con una simple meta ... Volver a verla.
** Flashback**
-no deberías estar tan sola- dijo él joven apuesto de la barra mientras me entregaba una taza grande de mocaccino
-deberías no preocuparte por una desconocida, estoy bien!- dije dándome la vuelta paseando la mirada por cada parte de la cafetería.
En uno de los cajones del fondo estaba una chica que rápidamente llamo mi atención, sostenía un libro en sus manos parecía centrada en el, su concentración me dio hasta curiosidad sobre que leía, parecía estar sola ya que en frente de ella solo había una taza grande de café a medio tomar, por un instante me quede observándola a detalle, traía él cabello lasio con una sutil californiana suelto por un poco mas abajo de los hombros, unos lentes de pasta morados oscuros arriba y claros abajo, una mirada seria clavada en él libro, ojos oscuros y profundos, unos labios rosados que se veían suaves y dulces. Debo haberla observado por demasiado tiempo porque de un momento a otro levanto la vista de su libro y nuestras miradas se cruzaron, mi vista se deslizo esquivando la de ella al instante sentí la cara caliente era mas que obvio que me había sonrojado, me moví con rapidez y me senté en una de las mesas de la entrada donde podía seguir observándola sin que me notara demasiado, pase el resto de mi mañana viéndola hasta que ella recogió sus cosas y se fue al salir pude notar que no solo tenia una cara muy linda si no un cuerpo realmente hermoso, delgada con una camisa blanca de botones que transparentaba el borde de un bra color negro, trate de no centrarme demasiado en su ropa interior, tenia un pantalón ajustado negro y un saco que hacia juego, sin poder ignorar los tacones negros que hacia parecer que tenia piernas infinitas, contuve un suspiro hasta que la vi salir por la puerta de cristal ...
**Fin del Flashback**
Desde ese día no deje de ir a ese café cada mañana solo para admirarla sin ser capas de acercarme a hablarle, una mujer así jamas me haría caso así que me conformaba con ver como comenzaba sus mañanas con un capuccino bien cargado y unas cuantas paginas de un libro de poesía de Mario Benedetti, algunas veces trabajaba en si laptop y otras simplemente escuchaba música.
Yo no soy una chica de poemas ni mucho menos, pero el ver que le gustaba tanto aprendí uno de sus poemas quizás por si algún día me armaba de valor para hablarle, va así - Mas que besarla, mas que acostarnos juntos, mas que ninguna otra cosa ella me daba la mano y eso era AMOR - la verdad me gusto tanto porque expresa, mi forma de ver una relacion, no todo es besos y sexo si no apoyo, así sabrás que es amor de verdad. Aun no me podía creer que estaba tan perdida por una chica que había visto durante un par de semanas, a la cual no había logrado ni decirle hola
Estaba tan distraída en mis pensamientos que al voltear para dirigirme a una mesa choque con alguien tirandole todo el café encima gracias a dios había pedido un moca-helado, me quede un poco inmóvil viendo como el café manchaba toda la camisa blanca y subí la mirada para encontrarme con la furiosa cara de la chica a la cual estaba viendo hace semanas, no podía creer que mi primer contacto con la chica a la que había visto tanto fuera tirarle un baso gigante de café encima
- lo lo lo... siento - dije tartamudeando buscando con torpeza una servilleta para ayudarla a limpiarse
- NOO!! hoy no! - dijo ella muy molesta viendo su camisa blanca teñida de un marrón intenso y transparentándose dejando a la vista la forma de sus senos en un delicado bra de encaje negro, siendo muy sincera así no podía quitarle la vista de encima
- Estemmm.... quieres ir a mi casa esta aquí a la vuelta y te presto una de mis camisas - dije sin pensar mucho, la estaba invitando a mi casa y no sabia ni su nombre
- No, no, tengo que irme llegare tarde - dijo quitando la servilleta de mis manos y salio a gran velocidad de la cafetería y yo inconscientemente fui detrás de ella y la tome del brazo, ella volteo violentamente
- lo siento- dije soltándola - pero de verdad no puedes irte así enserio mi casa es esa - dije señalando el 2do piso de un edificio muy lujoso, ella levanto la vista, no muy complacida asintió
fuimos al edificio sin decir nada subimos al ascensor me recosté un poco a la parte de atrás del ascensor mientras ella se quedo distante viendo el tablero de los botones, no podía dejar de verla hasta molesta se veía hermosa, llego al piso y me todo abrir la puerta ya que son pisos privados y la hice pasar. Ella camino por el departamento observándolo y giro sobre sus talones para mirarme fijamente cruzando los brazos sin decir nada
- te puedes dar una ducha para quitarte lo dulce del café - dije señalando mi habitación, caminando a paso tranquilo delante de ella, sentí como me seguía
- Gracias... - dijo no tan convencida de si debía agradecerme algo ya que todo era mi culpa, dejo su maletín en el suelo y quito su saco y comenzó a desabrochar los botones de su camisa hasta que noto que la observaba, deteniéndose en seco, yo entendí que no quería que la observara así que entre en mi vestier para conseguirle una camisa blanca, la deje sobre la cama
- en la cama esta la camisa, hay toallas en el baño y si necesitas algo no dudes en llamarme... soy Juliet - dije esto ultimo de espaldas a ella viéndola sobre el hombro detallando momentáneamente la linea de su columna, ella solo levanto un poco su mirada sobre el hombro
- Diana...- dijo sin mas quitando su bra y entrando al baño con el pantalón puesto y desnuda de la cintura para arriba sin dejarme verla de frente
Al salir solo suspire desglosando su nombre en mi mente repitiéndolo un par de veces mordiendo mis labios yendo a la cocina por un vaso colmado de agua, simplemente no podía dejar de pensar que un par de puertas mas estaba la chica a la que había espiado en el café tantas veces y no solo estaba... estaba desnuda bajo el agua tibia de mi ducha, podía imaginar gota a gota que se deslizaba por su espalda, sentí como mi cara se calentó de nuevo probablemente estaba aun mas roja de lo que pudo estar alguna vez, hasta me había planteado colarme en el baño, pero no podía asustarla de esa manera así que simplemente espere en el balcón a que ella decidiera salir, pasaron un par de minutos mientras veía los autos pasar, mientras en mi mente retumbaba su voz repitiendo su nombre una y otra vez haciendo que sonriera como tonta
- Oye...- sentí su voz a mis espaldas pero no muy cerca, voltee de inmediato y ella...
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Callate Y Besame...
RomanceElla sonrió y dijo -hablas mucho- antes de que pudiera responder sus labios estaban sobre los mios, suaves, delicados y sexys...