2

23 2 1
                                    

Le doy un sorbo a mi gin-tonic, qué cargado me lo han puesto, intento no pensar en lo guapo que es. Seguro que se quiere aprovechar de mí y pasar sólo un rato, no voy a caer en sus redes.
Estoy sentada en frente de Elsa de espaldas a la puerta de entrada, necesito contarle lo sucedido.
-Elsa, ¿me acompañas al baño? -No quiero que las demás se enteren de nada.
-Yo me esperaría. -Me hace un gesto con la cabeza y me señala la puerta.
Me giro, -No puede ser -le digo, se está acercando el acosador.
Me vuelvo hacia Elsa y hago como que no lo he visto.
-¿Qué pasa Ari? -Me pregunta Telma. Ella es pelirroja con el pelo rizado y la cara de pecas. Es muy graciosa. Tiene un coeficiente más alto que las demás. Ella ya está en primer año de la universidad.
-Nada, me ha parecido ver un moscardón. -Pongo los ojos en blanco.
Elsa me manda un whatsapp -se está acercando el buenorro😀😀.
-No me pienso girar, voy a pasar de él 😠 -le contesto por el mismo canal.
-Yo creo que no -guarda el teléfono.

-Esa Ana como mola, se merece una ola. ¿Qué tal prima? -Aster le dice acercándose a su prima Ana. Ella está sentada a mi derecha. ¡Nooo!
-Veis, ya tengo el moscardón al lado -les digo a mis amigas. Ellas ponen cara de póquer. Ana me mira sorprendida.
-Hola primo, ¿Qué tal? -Se levanta Ana y le da dos besos.
-Bien; veo que te estás adaptando bien a tu nueva vida y has hecho amigas, ¿Porqué no me las presentas? -Se gira y me guiña un ojo.
-Sí, va todo bien. Ahora te las presento; son Elsa, Adriana, Paula, Telma y Ari. -Le dice mientras nos va señalando. Todas le dan dos besos, ahora me toca a mí.
-Rubia, me vas a dar dos besos ¿no? -se acerca a dármelos con esa sonrisa tan bonita, me quedo inmóvil durante un momento haciéndome la dura pero, al final, tras ver que me están mirando mis amigas expectantes, se los doy.
-Muy bien mi rubia. -Me da una palmada en el culo. ¡Pero éste qué se ha creído! Me giro hacia él y le doy un bofetón.
-¡Pero tú qué te has creído, que soy tu juguete! -Me termino mi copa de un sorbo y me voy al interior de un bar. Una vez allí, cierro la puerta de la terraza y me giro para mirarlo a través del cristal. Está sentado en mi sitio mirando hacia la puerta sonriendo; será caradura.
Su prima le está diciendo algo y las demás están embobadas con él. Nunca se nos ha sentado un chico tan guapo en un bar.
-Está loco por tí.
-¡Elsa! Qué susto me has dado. ¿Cuándo has entrado? -le pregunto fatigada, con una mano en el pecho.
-Iba detrás de tí.
-No me he dado cuenta. -Llevo tal enfado que ni me había percatado. Empezamos a andar hacia la barra.
-Ya lo he visto. Vaya morro el primo de Ana.
-Aster, se llama Aster. -Le digo -Sí, no sé qué se ha creído.
-Es verdad, Asterrr, creo que fui yo la que te dio información sobre él. -Se me queda mirando y se lleva las manos a la boca mientras abre los ojos. -¡Tú estás loca por él! Reconócelo a tí te vuelve loca esa actitud. -me dice ríendose. Pongo los ojos en blanco.
-¿Qué queréis tomar? -Nos pregunta el camarero rubio. -Dos gin-tonics de frambuesa -pide Elsa, tenemos los gustos parecidos. Se vuelve hacia a mí. Estoy mirando como preparan las copas.
-Pero qué tonterías tienes. ¿Cómo me va a gustar un tío así? Es asqueroso. Éste es de los que se piensan que todas las tías que pasan por su lado lo quieren. Es un chulo, es un creído, un egocéntrico. Y me voy a callar ya para no seguir poniéndolo verde. -Elsa me mira divertida. -¿Porqué te estás riendo?
-Me encantas. Te has colgado por él. Te mueres por sus huesos. -Otra vez igual, pongo los ojos en blanco.
-Ya te he dicho, es un playboy -Nos acaban de servir la copa y Elsa paga.
-Así que esa opinión tienes de mí. Me han dicho de todo menos playboy, me gusta, rubia. -Me quedo petrificada con su voz, otra vez. Reacciona, reacciona. -Tío, eres un plasta. -Me voy hacia el centro del bar y me pongo a bailar. Elsa se queda sentada en la barra. Veo que Aster le dice algo y ella asiente. -Lo que yo decía, un playboy -doy un sorbo a la copa y me pongo a bailar. Han puesto música más movida aquí dentro.
El alcohol empieza ha hacer sus estragos, lo noto correr por mis venas. Vuelvo a beber, casi no me queda. Hace mucho calor y las copas las bebo rápido.
Noto que me cogen de la cintura muy sensual, me gusta. Estoy un poco mareada.
-Dame la copa, ya te la has bebido toda. -Otra vez esa voz, me parece tan sexy. Esta vez me giro y se la doy. Me quedo mirando como la lleva a la barra, la deja y vuelve hacia a mí.
¡Dios, que guapo es! Es irresistible. No veo a Elsa por ningún lado, supongo que habrá salido fuera.
-¿Quieres bailar princesa? -Cómo negarme si me lo pide con esa sensualidad, total, ya me ha cogido la mano. Acepto con la cabeza.
Me pega a él, me pone mis manos en su cintura y él las suyas en la mía; está sonando la canción "stole the show".
Madre mía que sexy está. Bailamos pegados un rato, luego, mientras suena la musiquita de la canción, le suelto y voy moviendo la cadera subiendo los brazos haciendo hondas. Él me mira con mirada sexy mientras se lame el labio de abajo.
Le vuelvo a coger de la cadera y lo atraigo hacia a mí, volvemos a bailar como si fuéramos uno. Me sube las manos por la espalda y echo hacia detrás la cabeza. El pelo me cuelga por la espalda tapando sus manos. Me empieza a besar el cuello. Madre mía, qué sensación más buena, me está volviendo loca esas cosquillitas que me están haciendo sus labios en el cuello. Me vuelvo a levantar y nos miramos a los ojos. Ahora me fijo que tiene el pelo negro rizado corto con gomina y varios rizos le van hacia la frente. Tiene los ojos del color de la esmeralda. ¡Qué guapo que es!
No sé cómo pasa, pero me besa.
Es un beso con miedo. Sólo labio con labio aunque poco a poco, como estoy receptiva, se va convirtiendo en un beso apasionado. Juntamos lengua con lengua pero muy despacio. Besa muy sexy, sin prisa pero con seguridad. Tiene el tacto de los labios muy fino. Me está volviendo loca, me está subiendo una adrenalina por todo el cuerpo que no puedo controlar. Se me para el tiempo, no hay nadie más entre nosotros. Básicamente, me encanta.
Se acaba la canción y nosotros vamos parando hasta que separamos nuestros labios. Me mira con una sonrisa y mirada sensual. Yo aún estoy saboreando ese beso tan intenso con sabor a ron con cola. Poco a poco voy saliendo de mi ensoñamiento.
Cuando despierto, me giro y veo que todo el mundo nos está mirando, mis amigas incluídas. ¡Qué vergüenza!
-Besas muy bien, rubia. -Me está sonriendo. ¡Qué he hecho! ¡Se está burlando de mí! Sin pensarlo, he pasado de estar soñando y en la gloria a estar enfadada, cojo un vaso que lleva uno de los camareros que pasa por mi lado y le tiro el líquido en la cara.
-¡Tú, qué te has creído! Yo no soy ninguna de tus zorritas. -Me voy hacia la calle con el vaso vacío en la mano y lo dejo plantado.

Siempre Contigo Mi Amor#Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora