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-Eyyy vaya beso te ha dado Aster... Se nota que le gustas -Elsa me da con el codo en el brazo.
-No me has pasado a buscar Elsa, quedamos que vendrías -le replico.
-Lo sé, pero me dijo Ana que ya vendrías, que no fuera, lo siento -me pone cara angelical.
-Pues he venido, pero con Aster. Aunque he de reconocer que me ha gustado que haya venido. -sonrío, Ana me mira, resopla y se mete en la piscina.
-¿A ésta qué le pasa? -Pregunta Telma. En la piscina estamos Telma, Elsa, Ana y yo. Adriana y Paula no han querido bajar, se han ido a un bar a tomar algo, las demás de la cuadrilla están desperdigadas, pues hemos ido haciendo grupos dentro de la cuadrilla, sólo nos reunimos todas los días importantes y algún fin de semana.
No tenemos ni idea -responde Elsa por las dos.
Me giro para mirar qué hace Aster, no me puedo creer lo que veo, al momento me hierve la sangre. Otra vez la rubia tetuda pegada a las faldas de Aster. Lleva un bikini de leopardo, sujetador en forma de triángulo que casi no le tapa nada de sus generosos pechos y un culotte creo que dos tallas pequeñas porque se le ve más de medio culo y súper apretado. Aster parece que pasa de ella pero ella insiste. Se levanta, mira hacia mí y ve que lo estoy mirando,  me sonríe y me manda un beso con la mano. Levanto el brazo y hago como que lo cojo y me lo pongo en la mejilla, le sonrío y le mando otro yo, que se joda la rubia, él me sonríe y veo que se dirige al agua. Se tira de cabeza en la piscina, una vez allí, me hace un gesto para que vaya. No tengo muchas ganas de meterme, me apetece hablar un rato con mis amigas. 
-Ve con él Ari, no seas tonta, date un baño y vienes - me anima Telma. Miro hacia Ana, no sé dónde se ha metido, me sorprende que tampoco está la rubia tetona por ningún lado, me vuelvo hacia Aster veo que sigue en la piscina. Me quito el vestido playero para ir a bañarme con él.
-Chicas, me voy a dar un baño, luego vuelvo -les guiño un ojo y voy en busca de Aster. Me fijo que está con sus amigos, que vergüenza me da. Una vez me he acercado al bordillo, me siento en él metiendo sólo las piernas hasta la rodilla, llevo la piel muy caliente y me da impresión meterme de golpe en el agua. Aster está cerca de mí, ha dejado un momento a sus amigos para venir a buscarme.
-Rubia, al final te metes al agua conmigo -sonríe como siempre. Miro sus ojos, en el agua aún se ven más verdes, los tiene preciosos.
-Tenía calor y he decido meterme a refrescarme un rato, no pienses que lo he hecho porque me has dicho que viniera -le pongo los ojos en blanco.
-Claro, ya lo entiendo, has venido sólo para refrescarte. Pues ven refréscate bien -me coge de la cintura y me mete con él en el agua. Madre mía, que fría está, será imbécil.
-¡Aster! ¡Qué frío! Esto no te lo perdono, el pelo no me lo mojes, se me queda muy feo mojado -Maldición, con la cara que ha puesto de pillo creo que he metido la pata. Justo, lo he visto venir, menos mal que me ha dado tiempo para taparme la nariz, me acaba de sumergir en el agua. Mierda, toda cabeza mojada, luego voy a llevar unos pelos de loca. Él como siempre se está riendo, este chico no hace más que reírse. Me encanta su sonrisa, me encanta todo él.
-Te mato, te he dicho que no me sumergieras, que malo eres tío -le salpico bastante agua a la cara. Cómo no, se vuelve a reír.
-¿Quieres guerra de agua? -empieza a salpicarme, este hombre no puede parar, empieza a salpicarme sin parar, así que yo también lo hago. Ya me canso, le hago gestos con la mano para que pare, lo hace.
-A mí me parece que estás guapísima con el pelo mojado -me mete el pelo detrás de la oreja izquierda y me da un beso de los que hacen historia. ¡Qué pasional es este chico!
-Gigoló, venga que corra un poco el aire -nos salpica uno de sus amigos. Nos echamos a reír tanto Aster como yo.
-Cabrón, déjame que estaba en la mejor parte. -Aster le devuelve el salpicón de agua. -Ari, este el Rober, el que me mandó ayer el whatsapp para que volviese a la huerta.
-El mismo -dice Rober -Encantado de conocerte -me acerco le doy dos besos, él me los devuelve. -Venga Aster, vamos a echar un partido, luego volvemos. Si me lo presta un rato la señorita claro -hace una reverencia con la mano y se ríe.
-No tengo que prestar a nadie, ha empezado él -señalo a Aster con la cabeza.
-Venga pues, vamos tío, la señorita te da permiso -Aster me da un beso rápido en los labios y se dispone a salir de la piscina.
-Luego vuelvo princesa -sonríe y sale del agua.
-Así que ahora soy tu princesa, cada vez voy subiendo de categoría, por aquí estaré -le digo adiós con la mano, veo el cuerpazo que tiene, moreno de piel, pechos y abdominales bien definidos, brazos de gimnasio al igual que las piernas... Está tremendo. No sé lo que durará este sueño, espero que mucho porque aún no me creo que un tío como él, que podría tener a cualquier tía mucho mejor que yo, esté coladito por mis huesos, sigo teniendo dudas. Sigo nadando un rato por el agua, me encanta nadar, además hoy no hay mucha gente, menos mal, casi toda la piscina es para mí. Este mes, la mayoría de familias es cuando viajan. Acabo de salir del agua, voy hacia la toalla, veo que Ana ha vuelto y está tomando el sol; las demás están jugando a las cartas. Cuando llego me tumbo en la toalla a secarme un poco el agua.
-¿Qué tal ha ido el baño? Ya hemos visto que mejor de lo que imaginabas pajarita -se ríen al unísono Telma y Elsa, Ana pone cara de mala leche, paso de ella.
-Pues sí, ha ido muy bien la verdad, ojalá todos baños sean así -sonrío.
-¿Tú de qué vas? Le robas el novio a las amigas -ya está, Ana ya ha saltado. -¿Te crees que eso está bien? -A esta chica no sé qué mosca le ha picado.
-Ana, ¿Qué estás diciendo, qué mosca te ha picado? Aster no tiene novia, bueno ahora sí, soy yo -le contesto. Ella suelta una carcajada.
-Ari, ¿de verdad crees que no eres un pasatiempo para él? Tú no vales lo que Tifany. Él tarde o temprano se cansará de ti y de tus estrecheces y volverá a caer rendido a sus pies. Vamos, conozco a mi primo, Aster no es hombre de una sola mujer, a parte, él necesita que le den caña. No creo que tu lo hagas.
-Ana, ya basta, te estás pasando. Me parece bien que conociera a Tifany y fuera amiga suya, pero eso se acabó, ahora está conmigo, creo que lo demostró ayer y lo ha demostrado hoy.
-Mira guapa, si te conoce es gracias a mí, le mandé una foto en la que salíamos las catorce. Se fijó en ti pero porque eres una perita que nadie a tocado. Cuando te toque, se acabó. Él sólo busca eso, sexo. Tú le das más morbo porque nadie te ha tocado. Nada más -está muy seria.
-Ana, ya vale, si vas a estar así lárgate, no queremos discusiones y menos por un chico -Elsa es ahora la que habla, siempre nos defendemos las unas a las otras. -Eres la última que ha llegado, vete con las otras de la cuadrilla que están desperdigadas pero a nosotras no nos molestes.
-Elsa, no defiendas lo indefendible. Ari, ya te darás cuenta de lo que te digo, sólo lo hago por tu bien -me pone sonrisa malévola -sino me crees, ¿Por qué no vas a mirar que está haciendo Aster en este momento? Yo no veo a Tifany por ningún lado -me hace dudar, miro y veo que algún amigo suyo está en la toalla. Rober no está en ella, menos mal, era con el que iba a jugar a fútbol. Ahora me doy cuenta de lo mala que es Ana. No entiendo porqué se comporta así después que la acogimos como a una más.
-Pasa de mí Ana -Elsa y Telma me miran y les hago una seña como que no pasa nada, siguen jugando a las cartas. Ana se va bañar. Me tumbo en la toalla y cierro los ojos, voy a tomar un poco el sol y a olvidar lo que ha pasado.
Estoy un rato en el sol y me entran ganas de hacer pis.
-Chicas, voy al servicio a hacer pis, ahora vuelvo -me levanto de la toalla y me pongo las chanclas. Llevo casi todo el bikini seco.
-Vale Ari, por cierto, pasa de todo lo que te ha dicho Ana, se nota que Aster le gustas -Elsa me acaricia la mano, Telma mira y confirma con la cabeza. -Tranquilas chicas, lo mejor es pasar y si tiene razón con el tiempo se sabrá, no voy a pensar ahora -me voy hacia el baño.
Una vez he terminado, en vez de volver a la toalla con las chicas me dirijo a campo de fútbol que está a pocos metros de la entrada de la piscina. Cuando he llegado veo que Aster está jugando en él con Rober y tres amigos más, eso me tranquiliza. Me quedo un rato mirándolos y veo que se acerca la rubia tetona, qué pesada es la tía, y le da un beso en los labios a mi chico. Éste no se resiste mucho. Me da un subidón de adrenalina y voy directa a ellos. Aster me ve y entonces la aparta.
-Ari, no es lo que piensas, ella se me ha acercado, yo no quería -Aster se va acercando a mí.
-Pelea de gatas -dice Rober, qué payaso.
-¿Entonces qué es? He visto que no la has apartado al revés, has seguido su beso -estoy furiosa, le estoy dando con el dedo índice en el pecho.
-No me has dado tiempo a apartarla, me ha pillado de sopresa -Aster se disculpa, la rubia tetuda ahí está plantada mirando mientras se ríe, ésta se merece un bofetón.
-¡Tú que miras silicona! Deja de reírte o te estampo mi puño en esos morros que debieron costarte miles de euros.
-Me río porque Ana, te había advertido y no has hecho caso, Aster no es para tí, es para mí a ver si te enteras de una vez bonita -Tifany me apunta con el dedo índice. Ya vale, no lo aguanto, le pego un empujón, casi se cae al suelo.
-¡Eh Ari! -Aster me coge de los hombros y me separa un poco de Tifany. -Esa no es la solución, de verdad, no quería besarla, ha sido inesperado. Y tú, Tifany -ahora se dirige hacia ella. Ella me mata con la mirada -no tenías que haberlo hecho, ahora estoy con Ari, olvida lo nuestro ya te lo dije ayer. Has aprovechado que estaba jugando al fútbol y no he visto a Ari, como ella no te ha visto a tí. -Se vuelve hacia mí -De verdad Ari, no hay nada.
Me llevo las manos a la cabeza, ya no sé qué pensar. Necesito irme de allí y no ver a Aster en un buen tiempo, no confío en nada ni nadie en este momento. -Aster, déjalo, déjame en paz unos días, necesito pensar. No llevamos más que un día y ya hemos tenido problemas. Primero con la rubia esta, luego tu prima... Vamos a dejarlo unos días -le suelto las manos de mis hombros y me voy hacia el otro lado. He de recoger mis cosas y marcharme a casa.
-¡Ari, espera! -me grita Aster, no le hago caso -Por favor, espera, dame otra oportunidad, te demostraré que realmente no hay nadie más que tú -sigo ignorándole, aunque noto que me sigue. Me coge del brazo. -Ari, escúchame, por favor -me paro y  lo miro -te prometo que no hay otra más que tú, déjame demostrártelo -Aster me mira con esos ojos verdes. Mi niño, no le creo, necesito tiempo. He de pensar todo.
-Necesito tiempo para pensar, mientras, puedes ir demostrándome que de verdad quieres algo conmigo, pero ahora déjame por favor -le suplico. Me suelta de brazo y agacha la cabeza.
-Al menos dime qué te ha dicho Ana, deja que me defienda -me pide.
-Pregúntale a ella, necesito irme de aquí, adiós Aster -me meto en la entrada de la piscina y lo dejo atrás. Me encierro en el baño y rompo a llorar, me siento humillada. En que me calme, recogeré mis cosas y me iré a casa.

Siempre Contigo Mi Amor#Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora