Dos Sombras en la Obscuridad

Seras Mi Todo, Pero No Mi Amor(Parte III)

Después de pasar un rato en la biblioteca después de clases ambos avanzarón en lo que seria la parte final de sus ensayos sin embargo aún les quedaba intercambiar ideas sobre ambos filosofos. Los dos acordaron que en las proximas reuniones empezarian a presentar a su filosofo.
Tal y como el día anterior ambos permanecieron juntos en todo momento llamando la atención de todos y siendo el principal tema de rumores en el instituto acerca de un posible noviazgo o pacto sexual. Para suerte de Ana Mike no se acerco a ellos, nisiquiera se les cruzó por enfrente, para ella fue un alivio no tener que enfrentarse a él o tratar de evitar una pelea que seguramente Drew hubiera comenzado, de sobra sabia que ellos dos se odiaban mutuamente aunque desconocia el porque.
Cerca de las cuatro de la tarde Drew la llevó a un lujoso restaurant en el centro de la ciudad, era el favorito de su madre, tanto por el servicio como por la comida pero, al parecer Ana se sintio incomoda en ese lugar.
Un sujeto de chaleco azul los llevo a una de las mejores mesas que se situaban junto a la ventana, Drew intercambio algunas palabras en italiano con él, en sí solo hablaban de platillos y saludos sencillos pero eso basto para que la chica de ojos marrones quedara sorprendida y se incomodara aún más con ella misma.
Drew notó al instante que algo no andaba bien con ella, lo supó desde que la vio morderse el labio.

-¿Sucede algo?-preguntó con un tono de calidez.

-Siento que no cuadro aqui-se rasco la nuca rapidamente sin embargo Drew solo se echo a reir, eso sin duda alguna le molesto-¿Por qué te burlas?

-Lo que dices son tonterias-se apoyo sobre la mesa acercandose a ella-Porsupuesto que encajas aqui...luces preciosa.

Ana alzó la vista rapidamente ruborizandose al instante. Titubeo un poco sus siguientes palabras sintiendose alagada.
Drew se dio cuenta que hablo en lugar de pensar, le dijo algo  que creía estaba solo en sus pensamientos sin embargo bien sabia que era verdad, el discreto vestido floreado, las zapatillas de piso y el saco negro le lucian perfectamente bien. Ana le parecio el ser perfecto en ese momento.

-Ana lo siento yo no quize...-se maldijo en voz baja agachando la mirada-Maldición no sé en que pensaba al decir eso...

-Descuida-interrumpió ella bruscamente-No eres el unico a quien le sucede.

Drew la vio por unos segundos sin decir nada, de sobra sabia que ella se sentia apenada aún sin tener porque
《Tratala bien imbecil》

-¿Quieres agua?-preguntó tomando la jarra de vidrio y el vaso. Al principio notó que lo que hacia no tenía la más minima coherencia, eso solo podria ser producto de su nerviosismo-Supongo que tienes sed.

-Em...claro-ella sonrió extrañada-Mi garganta esta seca así que seria bueno beber algo...

Los intentos de ambos por mantener la calma se volvian cada vez más llamativos para quienes también se encontraban en el lugar. Una vez más se volvian el centro de atención.

Drew terminó de servir los dos vasos de agua sin embargo no duro mucho en volver a llenar el suyo por lo rapido que bebia el agua a causa de sus nervios.
《¿Qué demonios te pasa Collins?¡Controlate!》
La vio atraves del vaso de cristal mientras bebia se quedó como hipnotizado al escucharla reir ligeramente, nisiquiera él sabia porque lo hacia.

-¿Por qué ries?.

Ana sonrió al verlo.

-Llevas un minuto "bebiendo agua" de un vaso completamente vacio-se acomodo el cabello por detras sensualmente-Más de uno se te ha quedado viendo-continuo al ver a su alrededor.

Él parpadeó un par de veces para comprobar lo que ella decia. Fingiendo tener el control sobre todo dejó el vaso a un lado observando a los demas clientes con una forzada sonrisa. Para Ana no pudo lucir más sexy.