I'm dangerous

4.No voy a matarte

-¿Son ellos tus amigos?

-Si.-dije seria. No estaba de humor la verdad.-¿A dónde iremos?, Necesito decirle a mis padres.

-Invéntales algo.-Zayn dijo sin mirarme.

-Siempre dices lo mismo.

-INVENTALES ALGO.-repitió. Suspire muy enojada, ya no quería seguir aguantando esta estúpida situación con él. Y tuve que hacer caso y le hable a mi padre.

-¿Hola, hija?

-Hola papá.

-¿Que pasa estas bien?

-Nada.... Es solo que tomaré un turno extra.

-¡Pero mañana tienes clases!

-Lo sé, lo sé. Puedo con las clases lo prometo.

-No me gusta que en tu trabajo no te avisen antes, ¿qué les pasa? Bueno. Avísame cuando vengas ya para la casa cuídate.

-Sí, papá.

-Te quiero.

-Y yo a ti.

-Contento.-dije sarcásticamente a Zayn.

-Si.-dijo sonriendo el muy cínico.

Siguió manejando en silenció, yo solo miraba por la ventanilla intentando ubicar el camino. Me gire a verlo y pensé en lo que dijo Kate. "Es sexy". No me había fijado como era realmente. Decidí examinarlo.

Vi su piel un poco morena, y sus brazos tenían muchos tatuajes. Su cabello era corto y era negro, tenía perforadas las orejas, y sus ojos avellana eran la verdad muy hermosos con sus pestañas enormes. Ni hablar de sus labios, eran muy sexys. ¡Coño que estoy pensando!

-Tranquila, podrás besarlos después.-me dijo sin siquiera mirarme, mientras yo veía sus labios. Me sonroje y deje de verlo, con una leve sonrisa en mi rostro.

-Ni siquiera quiero hacer eso.-dije sin verlo.

-Eso dicen siempre.

No dijimos una palabra más después de esa incomoda plática.

En lo que quedaba de camino, lo único que se escuchaba era la música del radio. Volví a mirar la ventanilla y no reconocía nada. Comencé a preocuparme. ¿En qué estaba pensando en subirme a un auto con él? ¡Era un asesino! ¿Y si estaba llevándome a un lugar alejado también, para matarme?

-¿Qué tienes?.-preguntó al verme, estaba nerviosa y miraba a todos lados sin parar.

-¡QUIERO IRME A CASA ZAYN!-dije muy paranoica.

-Ya llegamos.-dijo deteniendo el auto.

-¡VAS A MATARME!-grite al ver el lugar donde estábamos, era un estacionamiento, solo con una pequeña luz iluminando la esquina.

-¿Qué? No.....-comenzó a hablar mientras apagaba el auto.

-¡Déjame bajar!-dije intentando abrir el auto otra vez en vano.- ¡AYUDA! ¡AYUDA!-comencé a gritar como loca. El pánico se había apoderado de mí. Zayn me tomo fuertemente de los hombros, y me obligo a quedarme quieta contra el asiento. Con un rápido movimiento, la mayor parte de su cuerpo estaba sobre mí.

-NO VOY A MATARTE....-dijo mirándome fijamente a los ojos, esta vez sin enojó. Vaya que tenía ojos hermosos.- Yo cumplo lo que prometo. No voy a matarte tranquila.

No dije nada. Por alguna extraña y estúpida razón, le creí. Me sentía segura, bueno algo.

-¿Ya estás más tranquila?-preguntó.