Por primera vez.

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Emily

Entre a la fiesta y fue directamente al jardín, me senté en el sector en el que había menos personas y me quedé allí mirando las estrellas.

Hasta que ellos empezaron a hablar.

-Sos una basura Emilia -

-¿Porque no te matas?-

-Mírate, das asco-

-Libera al mundo de tu horrible presencia-

-Ese vestido te hace muy gorda ¿te diste cuenta?-

Cállense. cállense. cállense.

-ya quisieras niñita-

Empecé a tirar de mi pelo, los ojos se me llenaron de lágrimas, pero no, no iba a llorar. No acá. No ahora. Estoy en una fiesta. Hay muchas personas. No te derrumbes.

-lo único que sabes hacer es llorar-

-no servís par nada-

Basta por favor.

Escuche un ruido a mis espaldas y me giré alarmada, pero enseguida me encontré con unos ojos tricolores imposibles de olvidar.

Todos se callaron haciendo que suspire del alivio.

-¿Estás bien?-

-Si-

-Mentira-

-¿Te molesta si me quedo?-

Negué con la cabeza y nos quedamos en silencio.

¿Porque no me molesta que se quede? ¿Porque no me molesta su silencio?


Simón

Detesto las fiestas, no sé cómo es que Evan me convenció de venir.

Caroline no deja de tirarse encima mío y ya está cansándome.
Emily desapareció en el momento que entramos a la casa, Roma y Evan se perdieron por algún lugar y yo estoy acá tratando de sacarme a la morena de encima.

-Oh vamos Simmon ¿porque no quieres ir conmigo?- me hizo un puchero.

-Porque no me van las regaladas- sus ojos se humedecieron y me golpee mentalmente por ser tan imbécil- Oye, no te pongas mal, mira ¿ves al tipo de allá?- le señale un chico que estaba a unos metros nuestro que hace unos momentos estaba mirándonos, ella asintió pasándose una mano por la nariz- ¿Te gusta?-

Jesus me siento tan gay, ella asintió.

-Estoy seguro que de que vuelve loco por ti-

-¿Tú crees?- los ojos se le iluminaron.

-Si, ahora anda- la empuje y una vez que se fue me deje caer en el sillón y suspire.

La música alta y la cantidad de personas empezaba a agobiarme, así que fui al jardín trasero con la esperanza de encontrar a Evan para decirle que ya me quería ir, pero en vez de eso, me encontré con Emily en una esquina apartada del jardín, sentada en el piso recargada sobre un árbol.

Me acerqué a ella, en cuanto escucho que alguien se acercaba se sobresaltó, pero en cuanto me reconoció volvió a calmarse.
Me acerqué más y antes de sentarme a su lado pude ver que tenía los ojos llorosos.

Stay With HimDonde viven las historias. Descúbrelo ahora