MLB & CN: Los héroes de ambos mundos #MlbAwards2018

Capítulo 6: ¿Qué pensará de mí?

POV Ladybug/Marinette:

-¿A-Adrien?-Decía atónita.

Eso fue lo primero que vino a mi mente al momento de reconocer la identidad del gato negro, cuyos sentimientos rechacé por tanto tiempo.

Al darse vuelta y confirmar que era el mismo en persona, noté que no podía moverme del sitio donde me encontraba, todo fue tan repentino, que no sabía qué hacer o cómo reaccionar ante tal hecho. Lo siguiente que recuerdo, fue que Bridgette rápidamente me tomó en sus brazos y nos alejamos del lugar, no sin antes lanzar una mirada fulminante pero a la vez triste a su compañero.

Una vez llegamos a casa, mi alterno me pidió disculpas sobre lo ocurrido, diciendo que si hubiese sabido desde antes que nuestros miraculous poseían un tiempo para su desactivación, podría haber acelerado las cosas y evitar habernos puesto a mí y Adrien en tal situación. Era obvio que se sentía responsable de todo, pero la calmé diciendo que la culpa era mía igualmente, ya que podía habérselo comentado, pero se me escapó ese detalle.

Luego de eso, transcurrieron algunas horas, Bridgette se había recostado en mi cama a descansar y yo meditaba, dudando si lo que ocurrió fue real o no. Mis pensamientos giraban en torno a Adrien Agreste y la personalidad tan diferente que poseía, analizando cada ocasión que nos encontrábamos y cada acción que tomaba tanto como Marinette y como Ladybug.

Aún no lo aceptaba, el hecho de que mi amor platónico y aquel superhéroe fuesen la misma persona.

Ambas Tikki se encontraban bastante preocupadas por nosotras, hasta que la mía rompió aquel incómodo silencio, al notar que mi mamá me llamaba para cenar:

-Marinette, no estés así, por favor. Ve a comer algo al menos, no descuides tu salud por esto.

-Está bien Tikki-Dije con una sonrisa algo fingida.

Mientras comíamos, mis padres igualmente, notaban que algo pasaba conmigo, pero para mi sorpresa, no me cuestionaron nada, seguramente esperarían a que yo se los comentara primero. Sentí un pequeño alivio, ya que no sabría cómo explicarles la razón de mi estado de ánimo.

Llevé un poco de comida para Bridgette y la otra Tikki, ambas lo ingirieron a bocado lento y antes de volverse a dormir, la primera me había dicho:

-Marinette, sé que no es momento para decirte esto pero, la verdad, me puse bastante celosa de cómo se llevan tú y el Adrien de este mundo, pensé que tenían más posibilidades de estar juntos que en mi caso. Además, no sé cómo es realmente el Chat Noir de tu mundo, pero debido a aquel día que me confundió contigo, puedo asegurarte que no es una mala persona. No quiero que por mi culpa, la relación que tengas con él se destruya. Siento que esto no pasaría si no fuese por nuestra presencia en un lugar que no nos corresponde.

Acto seguido, se quedó dormida entre que emitía un pequeño sollozo, me di cuenta que para ella resultaba más difícil saber la identidad de su compañero, añadiendo que ninguna de las dos quería tocar el tema a la otra, por miedo a suponer cosas demasiado rápido.

Ya eran cerca de las 11 de la noche, y no podía dormirme, por lo que le pedí a Tikki salir un momento a tomar aire y pensar mejor la situación, acepté con su ayuda, que nada cambiaría si me quedaba lamentándome y dudando. Fui hasta el Notre Dame como Ladybug, la vista era bastante hermosa, lo cual me relajó bastante, y entre tanta paz, se me escapó una pregunta que tuve durante todo el día en la cabeza:

-¿Qué pensará Adrien de mí?

-¿Me llamaste, My Lady?-Decía él en tono coqueto.