Marinette y Adrien protegen y mantienen la paz en la ciudad de París transformándose en los súperheroes Ladybug y Chat Noir. Sin embargo, sucesos extraños comienzan a ocurrir alrededor, hasta que descubren la existencia de sus yo alternos de otro mu...
Como era de costumbre, me había despertado tarde para ir a la escuela. Bridgette junto con ambas Tikki me ayudaron a preparar mis cosas, y luego de dejarles el desayuno, nuevamente a escondidas, salí rumbo al lugar mencionado. Pero en fin, una vez que finalizaron las clases, fui con Adrien hasta la entrada del instituto donde teníamos que encontrarnos los cuatro en el lugar acordado, pero aquellos dos no estaban, por lo tanto, nos separamos y los buscamos por todos lados. Estaba algo cansada, pero logré encontrar a mi yo alterno en el "Trocadéro".
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Una vez me acerqué a ella noté que tenía un par de entradas de cine en las manos. Le pregunté algo molesta si ese era el motivo por el cual no había llegado aún donde habíamos acordado. Ella me respondió:
-Sí, no quería preocuparlos ni nada de eso, perdóname por tardar. Es que como todos estábamos algo tensos por lo de ayer, pensé que sería buena idea relajarnos un poco yendo juntos a ver una película. En especial para Félix. Ya no estoy enojada con él, ya que en parte es mi culpa igualmente, pero me preocupa que su actitud afecte nuestro desempeño cuando peleemos contra los dos Hawk Moth.
-¿Segura que es sólo por eso?-Le cuestioné curiosa.
-Sí, aunque bueno, no puedo negarte que aún siento algo por él, a pesar de todo lo ocurrido.-Respondió sonriente.
No le dije nada más sobre el tema, porque en cierta forma creo que comprendo cómo se siente, así que solo le pedí que volviéramos transformadas, así no perdíamos más tiempo en regresar, ya que la hora de la función se acercaba.
Una vez llegamos, nos encontramos con Adrien y Félix en la entrada de la escuela, y después de des transformarnos, nos saludamos y conversamos un rato:
-Y, ¿les parece bien la idea de ir al cine por un rato?-Pregunté a ambos, a lo que seguí- Sé que es de suma importancia que hablemos sobre el tema de la leyenda, pero creo que sería mejor estar más relajados primero. ¿Verdad Bridgette?- le pregunté mientras la miraba.
-Me parece bien, después de todo, como les dije ayer, no hemos pasado ni un momento juntos sin estar bajo peligro o preocupados. ¿Estás de acuerdo otro yo?-Respondió Adrien alegre, mientras la pregunta iba dirigida a su alterno.
-Supongo que no tengo elección.-Respondió Félix sin mirarnos fijamente.
Noté que mi alterno se puso algo triste por la reacción de su compañero, así que dije que era mejor irnos para no llegar tarde mientras sujetaba la mano de la misma. Ella se animó un poco y me siguió.
Para no levantar tantas sospechas, y de paso evitar encontrarnos con alguien conocido, tomamos el tren del metro para dirigirnos al sitio. Sin embargo, para nuestra sorpresa (desgracia), nos topamos con Chloé y Sabrina apenas salimos del subterráneo:
-¿Qué está haciendo mi amado Adrien yendo al cine con una panadera como tú? Y ¿Quiénes son esos dos que están con ustedes? No los he visto nunca, pero bueno, ese no es el punto. El punto es que la que debería ir con Adrien al cine ¡soy yo!-Dijo enojada a los cuatro.
