Maldita Obsesión

Capitulo Uno "Todo Iba Bien"

Hoy es mi primer día en la universidad, hace ya dos semanas que me mude a un apartamento junto con Clara y Yessi mis mejores amigas de toda la vida. Decidimos tomar la misma carrera universitaria para seguir estando juntas, aunque la verdad es que la arquitectura no siempre fue lo mío, tomar fotografías por otro lado es lo que realmente amo, pero quiero seguir estando con mis chicas. Claris, Yessi y yo nos encontrábamos en nuestra primera asignatura de la mañana en la cual nos había tocado creo yo la profesora más obstinada que pudiera existir. Enserio que mujer está, su mirada era como dardos de fuego que nos lanzaba a todos y nadie lograba contestarle bien ni tan solo una pregunta.

—Ya quiero ver donde vive seguro y tiene retrato de calaveras y toda la cosa — esa era Yessi dirigiéndose a Claris y a mí. Yessi siempre le sacaba el lado bueno a todas las cosas, siempre lograba que muriéramos de carcajadas por sus comentarios.

—Ay Yessi por Dios te pueden oír— dijo Claris. Ella por otro lado trataba de hacer que nos comportáramos Yessi y yo, sin embargo; siempre caía en nuestras redes y terminaba uniéndose con nosotras.

—Oigan que les parece si al salir de las clases nos vamos a los jardines a tomarnos unas nuevas fotos. Ya saben por el nuevo día de clases— les dije muy entusiasmada. La verdad es que las fotografías siempre me hacían feliz.

— ¡¿Oigan y que tal si tan solo prestan un poco de atención a la clase?! Créanme cuando les dijo que no tengo contemplación a la hora de las evoluciones— nos dijo la profesora Elisabeth con una mirada tan profunda que nos hizo erigirnos en un instante. La mujer sí que transmitía terror y desesperación. La mañana estuvo llena de presentaciones y bienvenidas a pesar de la pesada primera hora con la profesora Elisabeth todo iba muy bien.

—Ok chicas la idea es que salgamos las tres— trataba de acomodarnos para tomarnos las fotos en los jardines de la universidad, el lugar era totalmente precioso y quería tener buenas fotos de las chicas y mías en ese lugar.

—Ali por dios ya nos hemos tomado más de cien, tengo los dientes totalmente entumecidos— me dijo Yessi algo cansada de las fotos. La verdad es que sí ya nos habíamos tomado muchas.

—Ok será luego entonces — les dije

—hey que me dicen de los chicos, hay que ser sinceras todos son lindos, bueno unos que otros que lo arruina pero... — comenzó a decir Yessi

—Si Yessi lo notamos. Pasaste toda la mañana dándole vuelta a tu cabeza para ver quien pescabas— le interrumpió Claris, Siempre que hablábamos de chicos, encontraba algo malo que decir de ellos. No era muy buena en sus relaciones así que procuraba no involucrarse mucho en el asunto.

—Si Claris y nosotros notamos la capa que te pusiste en la cara para no lograr ver a ninguno— le repico Yessica

—Bueno chicas pero porque preocuparnos de eso ahora, ya tendremos tiempo de ver quien le interesa a quien— les dije tratando de tranquilizar la situación

—Y... Ali por Dios no digas que no estabas al pendiente también, porque te vi— me dijo Yessi

—Pues sí pero no pasa nada, como les dije ya tendremos mucho tiempo para eso— dije sonriendo, la verdad es que si eche un pequeño vistazo en busca de algún chico y aunque la verdad es que todos... Bueno la gran parte eran muy guapos no había alguno que me llamara la atención lo suficiente. Luego de tomarnos como unas ciento cincuenta fotos (idea mía) y destrozar a todos con nuestras críticas, llego la hora de irnos a nuestro apartamento el cual lo habíamos decorado con un estilo muy original y totalmente femenino, cualquier chico llegaría y saldría corriendo abrumado con tantas cosas de chicas. Luego que nos encontrábamos en nuestro apartamento quisimos preparar algo de comida, pero no habíamos hecho las compras completas así que nos faltaba algo que beber, por lo que comenzamos a discutir entre las tres sobre quien iría a conseguir algo, pero como no lográbamos ponernos de acuerdo (cosa que casi siempre sucedía) lo echamos a la suerte con una moneda, donde por mala suerte caí yo.

—Aff siempre yo— refunfuñe, estaba hastiada siempre que echábamos las cosas al azar caía yo

—Por Dios Ali, no seas exagerada a veces también caemos nosotras— dijo Claris, compartiendo una pequeña risita de complicidad con Yessi.

—Si Ali amiga no exageres y ve rápido porque ya quiero comer— Yessi seguía con su risita con Claris lo que hacía que me molestara más, pero igual me dirigí a la puerta para salir a comprar algo para beber.

—Ah amiga que sea soda ¿sí?— me dijo Claris justo antes de que cerrara la puerta de mala gana.

Caminaba a una tienda que quedaba cerca de nuestro apartamento, trataba de caminar lo más lento posible para que las chicas se desesperaran y comenzaran a comer, así no le quedaría ganas de volverme a mandar comprarle algo más. Llegue a la tienda a paso de tortuga y ya que estaba ahí comencé a pasearme en ella para ver algo más que comprar (claro también quería que transcurriera el tiempo por aquello de que no me volvieran a comprar nada mas) me detuve al ver unas películas, me gustan mucho las de terror, estaba tan inspirada viendo las portadas de las pelis cuando alguien me hablo.

—La verdad es que si quieres ver unas de esas te sugiero que las veas acompañas, sino tendrás pesadillas todo el resto de tu vida— el chico me hablaba a mí pero su mirada estaba en las películas. De pronto sentí un repentino temblor recorrer mi cuerpo y me sentí tan nerviosa.

—ohm si lo sé. Amo ver películas de terror pero claro acompañada— le dije un poco nerviosa, las manos de pronto me estaban temblando. Él se voltio y me regalo una media sonrisa que hizo que en mi se estremeciera todo. (no sé qué me sucedía)

—Bueno más te vale— se voltio y siguió su camino hacia la caja registradora. Me quede de pie sin nada que decir, cosa que es rara en mí, siempre tenía algo que decir pero en estos momentos solo estaba en blanco. Me dirigí también a la caja donde aún se encontraba él a la espera detrás de una chica que pagada unos dulces. No podía respirar me sentía que debía hacer algo pero que. No se me ocurre nada más que...

—Hey me llamo Alicia pero todos me dicen Ali— le dije con una gran sonrisa en mi rostro.

—Hola Ali, me llamó Nicolás y todos me llaman... Bueno... Todos me llaman Nicholas— volvió a dirigirme esa media sonrisa que hizo que todo volviera estremecerse dentro de mí, por enésima vez.

—Y... Y ¿Vives cerca de aquí? - carraspeé, parecía algo entrometida con mi pregunta pero ya que., debía decir algo.

—No. En realidad vine a visitar una persona, quise pasar rentando una peli antes de llegar a su casa— Al decir esas palabras me sentí tan mal, era obvio que se trataba de una chica sino con quien más va a ver una peli de terror. El pago las películas y solo se despido de mi con su mano y su media sonrisa (nuevamente me estremecí)

—Ok... Ohm... Entonces adiós— logre decir justo cuando salía por la puerta. Aff me sentía fatal, aquel chico había venido solo a causar un gran estruendo dentro de mí y se fue así como así. No sabía cómo sentirme al respecto y así con mi cabeza hecha pedazos regrese poco al apartamento en el cual se encontraban dos chicas mal humoradas, probablemente porque me había escapado hora y media para "comprar" tan solo una lata de soda. Con la distracción de Nicolás había escogido solo una lata y no me había percatado. Tuve que explicarles a las chicas lo sucedido pero igual no quedaron muy convencidas, para ellas tenía más sentido que yo lo había hecho por venganza (que al principio si fue así) luego todo se tranquilizó y cada una se fue a su habitación a descansar ya que a la mañana siguiente seria nuestro segundo día en la universidad no podíamos faltar. Yo me fui a la cama luego de disculparme con las chicas como unas cien veces más. Pero en mi cama el insomnio se apoderó de mí y no lograba dejar de pensar en él, quería conocer más, de donde era realmente, ¿estudiaría? Y si así era, ¿dónde? y esa chica, aff... quien será la afortunada. Toda noche me la pase haciéndome preguntas y cambiando la historia de lo que había sucedido en realidad, a como me gustaría que hubiese sucedido. Les dije a las chicas que ya tendríamos tiempo para darnos cuenta de quién nos gustaría en la universidad, pero la verdad es que ya yo me estaba adelantando y sin darme cuenta de como, pero lo estaba haciendo.