Si algún día lees esto, lo cual es muy poco probable, te preguntaras porque al final siempre escribo I love you, daddy. No hay una explicación muy larga, a decir verdad es bastante corta. Para ser breve lo escribo porque te quiero. Puede ser que me has causa demasiada tristeza pero sigues siendo mi papá y te quiero. Se que te odio, te tengo demasiado rencor y digo demasiadas cosas pero eso no quita el hecho que dentro de mi, muy en el fondo, todavía te quiera. Si estuviera niña diría que te amo, si estuviera adolescente te diría que te mueras. Pero ahora te digo te quiero, no es querer tanto como amar y tampoco es odiar tanto para odiar, lo que acaba de decir no tiene sentido. El punto es que siento que un te quiero es un punto medio. Ni mucho amor ni mucho odio.
I love you,daddy.
